Mas presume del 9-N y culpa a Madrid del "Procés"
- El expresidente sostiene que la negativa de Rajoy a conceder un concierto catalán forzaron la consulta primero y luego el referéndum. La urbanidad parlamentaria del último fichaje de Puigdemont
- En portada: Tormenta en el Puerto de Barcelona por un mail del nuevo presidente
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El secesionismo saca pecho por el décimo aniversario de la consulta del 9-N, la precuela del 1-O. La prensa de orientación independentista entrevista a Artur Mas, "capitán" de aquel embate contra el Estado que agudizó el procés y el deterioro social y económico de Cataluña. Pero esa no es la lectura del nacionalismo, pendiente ahora de una chispa, un accidente o una eventual gota fría para volver a la carga con la brasa y retomar la asonada.
Mientras tanto, sus peones calientan los asientos del Parlament con el mismo decoro con el que la señora Anna Navarro Schlegel, el último gran fichaje de Puigdemont, le hace dos peinetas a dos consejeros del Govern por votar lo contrario que Junts. Hay que reparar en la delicadeza de esta señora, en su urbanidad y en el estilo Bonanova chabacana que la caracteriza. Ese es el nivel de un independentismo que no acaba de entender ni de aceptar que ya no tienen mayoría para despreciar a los adversarios políticos y para gobernar en contra de más de la mitad de la ciudadanía catalana.
Si la educación no es el fuerte de estos personajes, la coherencia tampoco. "Puigdemont pide ser entrevistado en TV3 como jefe de la oposición pese a haber rechazado el cargo", destaca un titular de la edición catalana de El País. El texto es de Marc Rovira y arranca así: "Junts per Catalunya y Carles Puigdemont buscan la fórmula para confrontar al PSC en Cataluña, sin dejar en evidencia el compromiso de retirarse de la política que asumió el expresident en campaña electoral. La estrategia pasa por rehuir el término “oposición” e insistir en reivindicarse como la única “alternativa” posible al Govern de Salvador Illa. El matiz ha supuesto, incluso, la renuncia explícita a designar una figura del partido que ejerza de jefe de la oposición, un cargo reconocido expresamente en el reglamento del Parlament de Cataluña y que da derecho a un trato protocolario especial, a una remuneración específica, más un complemento extra para poder disponer de asesores. Además, el jefe de la oposición tiene garantizada una entrevista en horario de máxima audiencia en la televisión pública catalana. Ese espacio, que se acostumbra a programar tras el informativo vespertino, aporta visibilidad y sirve de contrapeso a la entrevista que también reserva TV3 para el president de la Generalitat. Puigdemont, presidente de Junts y cabeza de lista en los comicios del 12 de mayo, ha reclamado tener la aparición televisada, pese a su rechazo expreso al cargo de jefe de la oposición. TV3, que se ha encontrado en el aprieto de tener que decidir sobre algo que en realidad incumbe al Parlament, ha enviado una carta al presidente de la cámara catalana, Josep Rull, para que aclare de manera oficial quién es quién en el hemiciclo".
Sigue la pieza: "La carta enviada por la dirección de TV3 para saber qué consideración protocolaria tiene Puigdemont llegó al Parlament la semana pasada y Josep Rull, que es militante de Junts, se apresuró a preparar un texto de respuesta, sin consultar el contenido con el resto de integrantes de la mesa de la cámara catalana. Rull ha mandado una contestación a TV3, que lleva por fecha 4 de noviembre y donde pone de relieve que persiste lo que considera como una anormalidad en el hemiciclo que hace de Puigdemont un caso singular. El presidente del Parlament señala que, si bien la figura del jefe de la oposición está claramente delimitada en el reglamento parlamentario, lo mismo que sus derechos, el diputado Puigdemont no ocupa su escaño porque se arriesgaría a ser detenido si entrara en Cataluña. Rull alude al interés de la ciudadanía y defiende la conveniencia de que, como representante de la segunda fuerza con mayor representación en la cámara, el expresidente catalán sea entrevistado en TV3, como si fuera un jefe de la oposición al uso".
Más noticias de la loca esfera independentista. "Los ultras del independentismo catalán, encandilados por la victoria de Trump", señala un titular de El Confidencial. El texto es de Antonio Fernández: "La victoria de Donald Trump en Estados Unidos ha provocado euforia en algunos círculos independentistas, entre ellos, los más extremistas y xenófobos. Uno de los partidos que mejor ha recibido la victoria del republicano es Aliança Catalana (AC), el partido liderado por la alcaldesa de Ripoll, Sílvia Orriols, que tiene dos diputados en el Parlament. Desde posiciones cercanas a este partido se ha defendido la voluntad del pueblo de los Estados Unidos y se han atacado con dureza las campañas anti-Trump desatadas por medios de comunicación catalanes. "Trump no es santo de mi devoción, pero no me creo que sea el demonio prefabricado que nos vende la caverna mediática catalana. ¡Qué vergüenza de medios subvencionados!", dijo Anthony Sánchez, exlíder de las juventudes de Junts y ahora pasado al partido de Orriols. Y resaltaba que "Donald Trump vuelve a la Casa Blanca por la puerta grande"".
Continúa Fernández: "En segmentos de la ultraderecha independentista se cree que la victoria del magnate es un ejemplo a seguir por varias razones: en primer lugar, por el discurso patriótico, con tintes xenófobos. En realidad, los posicionamientos de Trump, que aboga por cerrar las fronteras a la inmigración y por la expulsión inmediata de inmigrantes, son muy similares a los de Aliança Catalana, cuyos postulados siguen esa misma senda. Patriotismo, reticencia a la inmigración y guerra sin cuartel contra la izquierda woke son las piedras angulares tanto del norteamericano como de la alcaldesa de Ripoll. Son elementos fundamentales en su discurso ideológico. De hecho, en webs digitales próximas a Orriols, la defensa acérrima del candidato republicano se complementaba con las acusaciones de lawfare contra el empresario y la disculpa de todas las tropelías penales cometidas. El posicionamiento de Aliança Catalana se hizo notar inmediatamente tras la elección. Una nota oficial del partido felicitaba al empresario "por haber sido elegido el 47º presidente de los Estados Unidos de América. Una nueva etapa de prosperidad y libertad se extiende por América"".
Y: "De hecho, desde los círculos independentistas catalanes del entorno de Carles Puigdemont se había visto con buenos ojos la llegada de Donald Trump al poder en 2016. Y, aunque el norteamericano apostó públicamente por la unidad de España, la consigna del soberanismo era mantener públicamente ante sus activistas, que "nunca rechazó expresamente el referéndum del 1 de octubre". Era un modo de mantener la autoconfianza, esperando el milagro de un gesto cariñoso por parte de la Administración estadounidense. La brasa de ese posicionamiento sigue existiendo y desde los círculos más cercanos a Carles Puigdemont, se echa un capote al nuevo presidente electo norteamericano. "Veo toda clase de opiniones sobre el resultado electoral en los Estados Unidos. Creo que nosotros nos lo hemos de mirar desde el respeto que corresponde a la diplomacia y, sobre todo, pensando en nuestros intereses para crear un Estado Catalán independiente en los próximos 4 años", sentenció Josep Lluís Alay, jefe de la Oficina de Carles Puigdemont. Alay es la persona que ideológicamente está más cercana al actual presidente de Junts per Catalunya (JxCat) y publica en las redes sociales lo que Puigdemont, por razón de su cargo, debe callar para no levantar polvareda. Es algo así como el alter ego del expresident fugado".
Otro alter ego del prófugo es Mas, el gafe que condujo Cataluña hacia el periodo más negro de su historia en democracia y el agente impulsor del truño del 9-N. En Público y con ocasión de la nefasta efeméride le entrevistan Ferran Espada y Ona Falcó. Mas, en su despacho oficial de expresidente, cobrando de expresidentes y con las ayudas de cámara, chóferes y escoltas que corresponden a los expresidentes catalanes, se queja de la terrible represión que sufre y afirma que "El 9-N fue el primer gran paso del proyecto soberanista, pero a menudo el primero es el más complicado", frase que sirve de titular a la entrevista, de la que destacan estas preguntas y respuestas:
P: Se cumplen diez años de la consulta participativa del 9-N que su Govern impulsó. Vista con perspectiva, ¿qué significó para Catalunya?
R: La consulta significó dos o tres cosas importantes. Fue el primer gran paso del proyecto soberanista. No fue el único, pero a menudo el primero es el más complicado de dar. Más allá de consultas locales, era la primera vez en muchos años que el pueblo de Catalunya era llamado a votar a favor o en contra de la independencia. Intentamos que las aspiraciones de un pueblo que se estaba movilizando tuvieran un canal institucional. La misión de los gobernantes era conducir lo que ya existía en grandes proporciones en la calle: grandes manifestaciones pacíficas para reclamar un derecho tan natural de un país como decidir libremente su futuro. Por otra parte, también hicimos entender que para que las cosas salgan bien, se tienen que hacer bien. Esto significa que, para sacar adelante un tema tan potente como el derecho a la autodeterminación, hace falta unidad de acción, trazar un camino común, liderazgos reconocidos de conjunto, no solo de partidos, un objetivo bien definido y grandes movilizaciones. Si alguna de estas piezas falla, como después fallaron, el castillo se derrumba.
P: ¿Cree que la respuesta del Estado fue provocada por la gran cifra de participación o porque ustedes dieron validez al resultado en una rueda de prensa de forma oficial? ¿Cuál fue la reacción inmediata desde Madrid?
R: La consulta superó todas las previsiones; no pensábamos que votarían 2,3 millones de personas sin que sucediera nada. Si la jornada del 9-N salía mínimamente bien, el Govern sabía que tenía que dar la cara porque era un gran tema de país. Se votó con pulcritud, de manera organizada y con un civismo ejemplar, con el Estado en contra. No podíamos quedarnos encerrados en los despachos; estábamos absolutamente comprometidos y nos jugábamos mucho. Teníamos que someternos a las preguntas de los medios de comunicación y transmitir a la opinión pública lo que, en nuestro criterio, había pasado. Eso provocó unos nervios indescriptibles en Madrid; pensaban que sería una votación de poca monta y se volvieron locos. Entonces empezaron las querellas y se intensificó la Operación Catalunya.
P: ¿Esperaba usted esa reacción? La guerra sucia y que un president de la Generalitat fuera juzgado, inhabilitado y todas las consecuencias que sufrió su Govern por una consulta que, en principio, no era vinculante.
R: Nunca te lo imaginas del todo, pero siempre prevés escenarios malos. Durante unos días estuve relativamente tranquilo porque vi cómo los fiscales de Catalunya, que no eran independentistas ni soberanistas, escribieron que no había ninguna base para acusarnos de delitos. Recuerdo que el Fiscal General del Estado de la época, que jerárquicamente está por encima del resto, les ordenó presentar una querella contra nosotros por vía penal. Y así lo hicieron. También recuerdo que aquel mismo Fiscal General a los quince días dimitió, porque le habían hecho hacer algo que él creía profundamente injusto. Aprendimos una lección. Si defiendes un proyecto para la independencia de Catalunya o por el derecho a decidir del pueblo catalán, sabemos que el Estado español no se quedará de brazos cruzados y que habrá consecuencias que habrá que asumir. Que, por cierto, aún sufrimos porque no se han terminado todas las causas penales ni económicas a pesar de la ley de amnistía. Las consecuencias provienen de dos cuestiones. Una cosa es la reacción del poder ejecutivo, que puede presentar querellas, y la otra es el poder judicial.
P: Si Mariano Rajoy hubiera acordado un sistema de financiación similar al que se ha pactado ahora entre ERC y PSC, ¿cree que la historia se habría desarrollado de otra forma?
R: Sí, lo he dicho siempre. Si Rajoy nos hubiera abierto la puerta a un pacto fiscal en la línea de un concierto económico, probablemente no habríamos vivido todo lo que ocurrió después porque habríamos llegado a una buena solución para Catalunya. Pero no fue así y, en lugar de tirar la toalla, seguimos adelante. Defendimos un proyecto propio que no podía ser el Estatut porque lo habían hundido ni un pacto fiscal.
Esta última respuesta contiene muchas de las claves de lo que ocurrió en Cataluña. Por ejemplo, la búsqueda de culpables exteriores, la nula conciencia de responsabilidad, el chantaje como herramienta política.
Más noticias. "Europa urge a Illa a acabar con la "discriminación de los castellanohablantes" en los colegios catalanes", afirma un titular de El Mundo. La pieza viene con la firma de Víctor Mondelo: "La Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo urge al presidente de la Generalitat, Salvador Illa, a cumplir las reclamaciones efectuadas por la misión de eurodiputados que en diciembre del pasado año visitó Cataluña para «investigar el modelo de inmersión lingüística» y que abogó por tratar equitativamente al castellano y el catalán en la educación, así como por salvaguardar los derechos de las familias que acuden a la Justicia para luchar contra el sistema monolingüe que impera en la región. El presidente del ente comunitario, el polaco Bogdan Rzonca, perteneciente al grupo de los Conservadores y Reformistas Europeos, remitió una carta a Illa el pasado 14 de octubre en la que le preguntó «cómo se garantiza que los niños [catalanes] no sean objeto de discriminación por ningún motivo, incluido el de ser castellanohablantes». En la misiva, a la que ha tenido acceso El Mundo, le reclamó, además, conocer «las medidas tomadas por la Consejería de Educación de la Generalitat de Cataluña para poner fin a la violación de los derechos fundamentales de los padres, niños y familias», que la misión europea concluyó que se estaba produciendo en la comunidad al arrinconar al español en las aulas".
Continúa el texto: "«¿Cómo se hace cumplir la obligación de garantizar que el 25% de la enseñanza en el sistema educativo catalán se imparta en castellano?», pregunta también el ente europeo al presidente socialista de la Generalitat, quien, en 2022, cuando era jefe de la oposición en Cataluña, aprobó junto a los independentistas una ley para sortear la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) que exigía la impartición de ese porcentaje de la lengua común en todos los colegios de Cataluña. Ley que ahora está siendo analizada por el Tribunal Constitucional (TC)".
Y: "El pormenorizado escrito también se interesa «sobre el respeto al equilibrio en los contenidos de las lenguas de enseñanza y la igualdad de trato entre las lenguas cooficiales», así como por conocer si «se ha establecido un protocolo de defensa y protección para las personas en situación de riesgo, es decir de las familias que recurren al sistema judicial para que se cumpla la sentencia» del 25% de español, pues fue ésta una de las exigencias recogidas en el informe que la Comisión de Peticiones aprobó el pasado mes de marzo, cuando estaba presidida por la dirigente del PP Dolors Montserrat, hoy vicepresidenta del organismo, así como del grupo del Partido Popular Europeo. El informe salió adelante con los votos a favor de los populares, de Renew -donde se integraba Ciudadanos- y del grupo de los Conservadores y Reformistas (ECR) -del que formaba parte Vox-; mientras que los socialistas, los Verdes -que acogen a ERC- y The Left -donde habita Podemos- se opusieron".
Los medios también recogen la riada de Cadaqués que se saldó sin víctimas mortales. El episodio abre muchos interrogantes sobre los fenómenos imprevistos, los sistemas de alarma y la explotación como aparcamientos de las rieras por las que no corre el agua desde hace décadas hasta que llega un día en el que se explica porque una riera es una riera y no un aparcamiento. Mientras tanto y en Valencia, Mazón ha deslizado que el día de autos, el 29 de octubre, llegó a las seis de la tarde a su despacho porque almorzó con la periodista Maribel Vilaplana para ofrecerle la dirección de la televisión valenciana.
9 de noviembre, santoral: Nuestra Señora de la Almudena, dedicación de la basílica de Letrán, Agripino de Nápoles, Eustolia de Constantinopla, Jorge de Lodève, Monaldo de Istria, Orestes de Capadocia, Sopatra de Constantinopla, Ursino de Bourges y Vitón de Verdún.