El independentismo no suma y adiós a Cs
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Domingo de ramos y de encuestas. Cielo plomizo y lluvias débiles en la conurbación barcelonesa. Tiempo de Semana Santa. Los partidos velan armas para la campaña del 12 de mayo con algunas certezas demoscópicas: Gana el PSC de calle, Junts y ERC pelean palmo a palmo por la segunda posición y el PP se dispara hacia arriba con inaudito empuje. Y sin candidato.
Dos son los medios que solazan a sus lectores con sondeos. La Vanguardia presenta estos datos: PSC, 41; Junts, 29; ERC, 26; PP, 15; CComú, 9; Vox, 8; CUP, 7; Cs, 0. El PSC ganaría en Cataluña y el independentismo perdería la mayoría" se titula la entrega que firma Carles Castro: "La guerra electoral relámpago que ha emprendido el presidente Pere Aragonès mediante el adelanto de las elecciones catalanas parece lejos de traducirse en un éxito para el conjunto del independentismo. Un sondeo de Ipsos para La Vanguardia, realizado entre los días 16 y 20 de marzo, tras el anuncio del anticipo electoral, dibuja un escenario en el que el primer partido volvería a ser el PSC, aunque con una mayor ventaja en voto que en las últimas autonómicas y que por primera vez también ganaría en escaños (con un total de 41). Si en febrero del 2021 los socialistas empataron a 33 escaños con Esquerra pese a aventajar a los republicanos en casi 50.000 papeletas, ahora el PSC se impondría con más claridad, ya que tanto Junts (con 29 diputados) como ERC (con 26) cederían conjuntamente hasta un total de diez parlamentarios. En la estimación de Ipsos, los socialistas (29,4%) aventajan en más de 11 puntos a JxCat (17,7%) y en más de 12 a Esquerra (16,8%)".
Sigue el análisis de Castro: "Las pérdidas globales del independentismo podrían alcanzar un cómputo de 12 escaños si se contabiliza el retroceso de la CUP. Y como consecuencia de ello, las formaciones secesionistas perderían también su actual mayoría absoluta en el Parlament. Pasarían de un total de 74 diputados, hace tres años, a una cifra de 62, ahora; es decir, seis asientos por debajo de la mayoría de la Cámara. El futuro Parlament registraría más cambios, pero, según las proyecciones del sondeo, no haría más fácil la gobernabilidad. Las pérdidas de Junts (tres escaños), Esquerra (siete) y la CUP (dos) cerrarían el paso a una nueva mayoría independentista, aunque la pugna entre las fuerzas de ese signo ya dinamitó la estabilidad de la última legislatura y neutralizó su hegemonía parlamentaria. Paralelamente, el sensible ascenso del PSC y la leve mejoría de los comunes (al pasar de ocho a nueve diputados) no bastarían para armar una mayoría alternativa de izquierdas (ni siquiera relativa). Socialistas y Catalunya en Comú (CeC) podrían reunir un total de 50 diputados, pero aún se quedarían a 18 de la mitad más uno de la Cámara y doce por debajo de los grupos independentistas".
El otro medio con encuesta es El Mundo y estos son sus resultados: PSC, 27,5%, 39-41 escaños; ERC, 18,4%, 27-28 escaños: Junts, 17,8%, 26-29 escaños; PP, 10%, 13-15; En Comú Podem, 8,1%, 9-10; Vox, 6,7%, 9; CUP, 5,9%, 7; Cs, 1,6%, 0; AC, 1,5%, 0.
"El 'efecto Puigdemont' no frena a Illa y el independentismo se queda muy lejos de poder gobernar Cataluña", advierte el titular. El análisis es de Cristina Rubio y arranca así: "Carles Puigdemont y su estudiado relanzamiento del procés no impulsan a Junts y el independentismo se quedaría sin mayoría absoluta por primera vez en una década a tan sólo siete semanas de las elecciones autonómicas del 12 de mayo. Un descalabro histórico provocado por la fuerte caída de republicanos y neoconvergentes, que no capitalizan las cesiones arrancadas al Gobierno de Pedro Sánchez, ni tampoco la amnistía pendiente de aprobación definitiva en el Congreso. Según la encuesta de Sigma Dos para El Mundo, el PSC de Salvador Illa se sitúa con claridad al frente de la tabla y ganaría con holgura los comicios con una horquilla de entre 39 y 41 diputados, entre seis y ocho más que ahora. Por tanto y siguiendo la estela de las elecciones generales del 23 de julio, los socialistas se afianzan como primera fuerza y volverían a evidenciar que solo rentabilizan en Cataluña la gestión actual en detrimento del independentismo. No obstante, y pese a su victoria, el PSC necesitaría de los comunes y del apoyo de otra formación para gobernar".
Sigue Rubio: "Por su parte, tanto ERC como Junts retroceden de forma destacada, se enredan en su sempiterna disputa interna y se quedan en un intervalo de entre 27-28 escaños para los republicanos y 26-29 para el partido de Puigdemont. Por tanto, la caída es notable y cada partido se deja entre tres y seis diputados (los neoconvergentes entre 3 y 6, y los republicanos 5-6) a menos de dos meses de las elecciones adelantadas por Pere Aragonès, según el sondeo. Un desplome al que se añade la CUP con siete escaños, dos menos que ahora, para completar una histórica minoría del independentismo, sin ninguna opción de gobernar por primera vez desde el inicio del procés. El partido de Puigdemont, ERC y los antisistema se quedan muy lejos de los 68 diputados que conforman la mayoría absoluta en el Parlament y sólo sumarían 64 en los pronósticos más optimistas, y 60 en la parte baja de la tabla. Es decir, entre 10 y 14 menos que los 74 actuales, una comparativa que muestra el descalabro independentista en los últimos tres años. De hecho, la «cacareada mayoría del 52%» lograda por el secesionismo el 14 de febrero de 2021 -contando con los votos de extinto PDeCAT- sería ahora del 42%. A esta caída hay que añadirle un factor externo determinante: el sondeo fue elaborado entre el 14 y el 22 de marzo, coincidiendo con el anuncio de Aragonès, el miércoles día 13, de avanzar los comicios catalanes".
En Junt se respira una cierta euforia. La Razón da algunas de las claves de ese estado de ánimo. De la pieza de Carmen Morodo: "Carles Puigdemont está manejando tan hábilmente las cartas que le ha entregado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que en poco más de una semana desde que se conoció el anticipo de las elecciones catalanas al próximo 12 de mayo ya ha conseguido que se despejen en cierta forma a favor de Junts las dudas sobre quién ganaría hoy el pulso dentro del soberanismo. Los planes de Moncloa en Cataluña, y con la candidatura de Salvador Illa, han entrado en terreno resbaladizo porque la victoria aritmética del PSC se enfrenta siempre en todos los encajes de coaliciones con un precio altísimo en Madrid para el propio Sánchez: «Inasumible», tal y como confiesa algún ministro".
Continúa la pieza: "En el círculo de poder del jefe del Ejecutivo ya manejan como muy posible la variable de que ERC obtenga en estas elecciones menos escaños que en los comicios de 2021, lo que atribuyen a la peor imagen de Pere Aragonès frente a Puigdemont dentro del conjunto del electorado soberanista. El andamiaje argumental de Moncloa que coloca a los de Junqueras en el marco de una política pragmática en el Congreso le ha convertido en un político rechazado por la mayoría de los votantes de la CUP y también de Junts. Mientras que Puigdemont tiene mejor percepción en los votantes de la CUP y tampoco genera tanto rechazo en los electores de ERC. Además, Aragonès carga en las espaldas con la mala nota que recibe la gestión de su Gobierno, tanto entre los votantes de Junts como entre los de la CUP".
Y: "Por otra parte, Puigdemont ha conseguido ya instalar la sensación de que su regreso es posible con la ayuda de la amnistía y porque, además, es su deseo –el gesto de renuncia a la candidatura europea– y esto alimenta de nuevo la expectativa de que es factible un nuevo Ejecutivo de coalición soberanista, lo que, indudablemente, corre a su favor. Los datos que tienen en Moncloa apuntalan la victoria del PSC, con más votos y más escaños, frente al empate a 33 diputados con ERC que se dio en las últimas elecciones autonómicas catalanas. Pero en el equipo de Sánchez son plenamente conscientes de que esta condición de primer partido de los comicios está muy lejos de garantizar una mayoría de investidura y un Gobierno presidido por el exministro Illa. Para que eso fuera posible, necesitan que no salgan los números para un Ejecutivo de coalición independentista y que el PSC y ERC lleguen, asimismo, a algún tipo de acuerdo transversal que termine con los doce años de gobierno soberanista en Cataluña. Y esto último colocaría a los de ERC en una encrucijada de muy difícil salida".
Ecos de la ruptura de las negociaciones entre PP y Cs. "'No hay nada que perder': Cañas será el 1 de Cs en la UE y Carrizosa en Cataluña tras la ruptura con el PP", señala un titular de El Español. El texto es de M. A. Ruiz Coll y Alberto D. Prieto: "Mejor cabeza de ratón, antes que cola de león. Es la tesis que finalmente se ha impuesto en Ciudadanos (Cs), después de que saltara por los aires la negociación para concurrir a las elecciones catalanas junto al PP, debido a que el PP se soliviantó con la negativa de Carlos Carrizosa de integrarse bajo las siglas de los populares. El partido naranja vuelve a volar solo y se prepara para concurrir en solitario a las elecciones catalanas del 12 de mayo con Carrizosa como cabeza de lista (actualmente es su portavoz en el Parlament) y, con toda probabilidad, con su histórico dirigente Jordi Cañas (actual portavoz nacional del partido) como número 1 al Parlamento Europeo en los comicios del 9 de junio".
Sigue el texto: ""Vamos a ir a por todas, ya no tenemos que perder", señala una fuente de la dirección de Ciudadanos, que reconoce su frustración por la ruptura del acuerdo con el PP. En los dos próximos meses, irán "a muerte". Y si no lo logran, "adiós, pero con dignidad"".
Al PP le sonríen las encuestas. Aunque presentara un botijo el partido de Feijóo los resultados que se anticipan resultan espectaculares. Ventajas de haber tocado suelo. Pero hay nubes en el horizonte. "El PP catalán teme no consolidar el 'sorpasso' a Vox tras la demora de Feijóo con el candidato: 'Hemos perdido votos'", señala Vozpópuli. La nota viene con la firma de Ángel Ortiz: ""Nuestro suelo en el CEO anterior es nuestro techo ahora". El CEO es el Centro de Estudios de Opinión de la Generalitat de Cataluña, un instituto demoscópico público cuyos métodos de trabajo nada tienen que ver con los empleados por José Félix Tezanos en el CIS porque, a diferencia de éste, suelen acertar. Los pronósticos del CEO son atendidos con celo por todos los partidos políticos catalanes por su rigurosidad. Y en muchos sectores del PP catalán cunde el nerviosismo por los datos que arroja el último barómetro, publicado hace apenas tres días: están convencidos de que la demora de Alberto Núñez Feijóo empieza a mermar sus aspiraciones electorales. "Sólo hay que comparar las dos últimas encuestas", invitan fuentes del PP catalán en conversación con Vozpópuli. La penúltima, de noviembre de 2023, pronosticaba entre 12 y 17 diputados para una eventual candidatura del PP liderada por Alejandro Fernández. Una espectacular subida –el PP tan sólo tiene tres diputados en el Parlament de Cataluña– que contrastaba con un acentuado descenso de Vox, el partido que más voto de derecha antinacionalista (el 7,7%, traducidos en 11 diputados autonómicos) canalizó en febrero de 2021".
Sigue Ortiz: "La brecha, sin embargo, se ha estrechado en las últimas semanas y el CEO dibuja en este momento un empate técnico entre el PP (sin candidato todavía) y el partido de Santiago Abascal, cuya candidatura volverá a encabezarla Ignacio Garriga, secretario general y vicepresidente de la formación. Entre 9 y 13 diputados prevé para ambos partidos, vaticinando una carrera ajustadísima por la cuarta plaza, pero también por liderar el constitucionalismo en el Parlament. El objetivo por el que codean Génova y Bambú. Fuentes de la cúpula de Vox consultadas por este periódico se frotan las manos con los tiempos marcados por un Feijóo –"se ha equivocado", estiman en Bambú– que, además, ha visto trastocados sus planes tras fracasar la absorción de Ciudadanos. Se trataba de la primera parte del plan: captar ese 1-2% del voto naranja aún latente. "Nosotros sabíamos que la absorción era muy difícil", se lamentan fuentes cercanas a Fernández, con quien no se contó para acometer la operación. Todavía confían, no obstante, en captar votos en un electorado "muy movilizado"".
Ha fallecido la actriz Sílvia Tortosa a los 77 años. Del obituario de El Periódico: "La actriz catalana Sílvia Tortosa ha fallecido este sábado en Barcelona a los 77 años, según ha comunicado la Unión de Actores y Actrices. La intérprete, nadica en Barcelona en 1947, con una larga carrera en televisión, cine y teatro, fue uno de los rostros más populares en los años 70. También es considerada como una musa del cine del 'destape' durante el posfranquismo aunque a ella nunca le gustó el calificativo. Tortosa ha fallecido este sábado tras una "dura lucha contra el cáncer", según informa un comunicado de su agencia de representación y su familia recogido por la revista Semana".
Metrópoli Abierta da cuenta del cierre de uno de los "brunch" más populares de Barcelona. Qué pena. Adiós a los mejores açaí bowls de la ciudad, los del "Alma libre". Terrible noticia para nuestros queridos turistas. Se quedan sin sus saludables tazones de proteínas como nosotros nos vamos quedando sin desayunos de tenedor. Ojo por ojo.
24 de marzo, santoral: Catalina de Suecia, Maccartemio, Secúndulo de Mauritania y Severo de Catania.