El factor Gaza se inmiscuye en la investidura
Conflicto diplomático con Israel mientras Junts y Ciudadanos coinciden en el Parlament a favor de las tesis israelíes. Feijóo trata de calentar las calles contra la amnistía. Reencuentro Madrid-Barcelona
18 octubre, 2023 07:57Un ataque contra un hospital en Gaza causa cientos de muertos. Israel acusa a la Yihad Islámica de tal atrocidad. La guerra se cuela en la política española. Un nuevo motivo de enfrentamiento entre los partidos y de división en el Gobierno de coalición. Una ministra de Podemos, Ione Belarra, acusa a Israel de ser un Estado "genocida" y "okupa". La embajada protesta por las declaraciones. El ministro de Asuntos Exteriores, Albares considera el comunicado diplomático como "inamistoso", pero da por zanjado el incidente. El desbarajuste es de tal calibre que Junts y Ciudadanos coinciden en el Parlament al presentar sendas mociones a favor de Israel. Todo vale en la política española. Cualquier cosa es munición. Ahora, Gaza.
En medio de semejante desbarajuste, La Vanguardia advierte de que "El pacto de investidura encalla y se activan las estrategias electorales". Se trata de un análisis informativo de Enric Juliana que abarca todo el espectro: "Con el pacto de investidura encallado, el PSOE vigila con mucha atención su flanco izquierdo. No quiere que la crisis de Gaza abra una brecha en su electorado, puesto que España es uno de los países occidentales en los que pervive una mayor simpatía por la causa palestina. El 31% de la población española simpatiza con los palestinos, frente a un 12% que se inclina por Israel, según un estudio de la empresa global de datos You Gov".
Y: "En España hay más simpatía por los desesperados habitantes de Gaza, hoy sometidos a un brutal sitio, que por la dureza de los actuales dirigentes israelíes tras los atroces crímenes cometidos por Hamas hace diez días. El terrorismo de Hamas queda en segundo plano en no pocas conciencias ante hechos como la matanza de ayer en un hospital de Gaza. En las redes sociales, los nervios están a flor de piel. El Partido Socialista lo sabe y cuida su perímetro, por si hay que volver a votar el 14 de enero".
El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, también tiene un ojo puesto en los estudios de opinión y en las posibilidades, al parecer crecientes, de una repetición electoral. "Feijóo amplifica la ofensiva contra la amnistía con nuevos actos en la calle y una subida en el diapasón del discurso", apunta El País. El texto es de Elsa García de Blas: "El PP no quiere soltar la presa de la amnistía. Los populares creen que la negociación del Gobierno con los independentistas ha entrado en una nueva fase, más madura, y por eso el Ejecutivo ha empezado a construir la defensa argumental de la medida de gracia apoyándose en el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero. El PP, por tanto, aprieta también el acelerador. La ofensiva de los populares tendrá el principal hito esta semana el jueves en el Senado, en la comisión general de las comunidades autónomas, con el choque entre los 11 presidentes del PP y el presidente de la Generalitat de Cataluña, Pere Aragonés. Pero en paralelo, los populares planean tres nuevos actos en la calle, los dos últimos fines de semana de octubre y el primero de noviembre, mientras el líder popular da una nueva vuelta a su discurso, endureciéndolo".
Continúa la nota: "Los populares volverán a salir a la calle en el marco de su ofensiva. El próximo domingo, Feijóo protagonizará un acto “abierto” contra la medida de gracia en un lugar todavía por determinar, después de haber tenido que cancelar la ubicación en Málaga porque el espacio previsto estaba reservado, según fuentes del PP. El partido prepara en las próximas semanas en total tres actos en la calle, en diferentes ciudades, “para defender de la igualdad de los españoles frente a un PSOE que mercadea con ella por el interés parlamentario de Pedro Sánchez”, al estilo de los que ya ha celebrado en Madrid y Santiago de Compostela. En principio, no tan multitudinarios como el de la capital de finales de septiembre, al que acudieron miles de simpatizantes de todo el país en autobuses fletados por el PP, pero sí amplios y en espacios abiertos para transmitir la imagen de que no se reducen a actos de partido. Génova explica que quiere “colectivizar” la respuesta a la amnistía con los presidentes autonómicos del PP, que acompañarán al líder en estos actos y de quienes también ha tirado para plantar batalla este jueves en el Senado contra la medida de gracia".
Y: "Feijóo, mientras tanto, eleva el tono contra las negociaciones de Sánchez para su investidura. Después de alertar, el lunes, de que los nacionalismos llevan a España a “un horizonte similar al de los Balcanes” ―aunque luego matizó que se refería al riesgo de terminar como “reinos de taifas” y no en un final cruento como el de la antigua Yugoslavia―, el líder del PP insistió este martes en subir los decibelios. Esta vez, centrándose en EH Bildu y acusando al líder socialista de “blanquear el brazo político de una organización terrorista”, en referencia a la coalición abertzale y a ETA, que anunció el fin de su actividad armada en 2011".
Más madera. A falta de determinar qué ciudades acogerán las protestas contra la negociación de una amnistía, La Razón apunta que "Feijóo se planta en Bilbao y Barcelona con su «tercera vía» frente a la amnistía". Escribe Carmen Morodo: "Cambio de agenda en la dirección del Partido Popular a la vista de los síntomas que se perciben en cómo evoluciona la negociación de Moncloa con Carles Puigdemont, el expresidente de la Generalitat prófugo de la Justicia española, y con Oriol Junqueras, condenado por el Tribunal Supremo por sedición y malversación. Génova traslada su habitual reunión del comité de dirección de los lunes al martes para «colar» en la agenda del presidente nacional una visita a Bilbao, en la que, además de participar en el Congreso de Empresa Familiar, también estará en un acto con motivo del aniversario del Estatuto de Guernica. El contenido de la agenda es realmente el adorno de un movimiento que tiene un sentido estratégico más amplio. Alberto Núñez Feijóo va a la «casa» del PNV, igual que el miércoles se presentará en Barcelona, con una propuesta de «tercera vía» frente al diálogo que bajo cuerda mantiene Moncloa con sus socios para conseguir los votos necesarios para sostener a Sánchez en el poder".
Sigue Morodo: "En esa mesa de negociación sin taquígrafos está la amnistía, pero también el reconocimiento de que en Cataluña hay un «conflicto político», el debate sobre cómo dejar abierta la puerta a un referéndum, dentro de la ambigüedad, el mediador internacional y la exigencia de Puigdemont de que se criminalice la respuesta del Estado español a la declaración unilateral de independencia. En respuesta al ruido que acompaña a una negociación, que todavía hoy no se sabe cómo terminará, Feijóo marcará la próxima semana dos de sus prioridades a medio plazo, tanto si hay nuevo gobierno de coalición como si hay repetición electoral, y son el País Vasco y Cataluña. En Génova ven más margen de crecimiento en escaños en Cataluña, pero el desembarco en el País Vasco lo tienen ya diseñado y Feijóo pondrá el lunes la primera piedra, junto con el que será investido nuevo líder de los populares vascos y candidato a la Lendakaritza, Javier de Andrés, exdelegado del Gobierno y exdiputado general de Álava".
Entre tanto, la portavoz del Govern, Patrícia Plaja, anunció ayer que el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, acudirá a la sesión prevista para este jueves en el Senado sobre la dimensión y el alcance de una hipotética amnistía. "La decisión de Aragonès de acudir al Senado da artillería al PP para fustigar a PSOE y PNV", afirma El Nacional al respecto. El texto es de Marta Lasalas: "El PP ha recibido la decisión del presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, de acudir a la Comisión general de autonomías del Senado del próximo jueves como un inesperado regalo. Solo presidentes autonómicos del PP y el presidente de la Generalitat han respondido positivamente a la convocatoria. En este contexto, los populares han esgrimido inmediatamente el anuncio de Aragonès para cargar contra el gobierno en funciones de Pedro Sánchez y contra los presidentes autonómicos del PSOE, Emiliano García Page (Castilla-La Mancha), María Chivite (Navarra) y Adrián Barbón (Asturias), que han anunciado que no acudirán, así como contra el lehendakari vasco, Iñigo Urkullu. "Parece que esta vez el presidente de la Generalitat de Catalunya respeta el Senado más que el Gobierno de España", ha reprochado el portavoz del PP en la Comisión general de comunidades autónomas, Antonio Silván".
Más noticias independentistas. "El Consell de la República, en llamas: Puigdemont salva la cara, los críticos piden su cabeza", avisa El Confidencial. La pieza viene con la firma de Antonio Fernández: "El fugado Carles Puigdemont recibió este martes el visto bueno de la militancia del Consell de la República para reestructurar este órgano y tener el control absoluto del mismo. En el futuro será el jefe máximo, con menos ataduras, menos control y más poder en el órgano áulico que creó a su conveniencia en Bélgica como si fuese un presidente exiliado. Quiso legitimar sus decisiones esta semana con una votación a medida, pero la baja participación en esa consulta a las bases ha dado más alas y razones a sus críticos: solo acudió a votar el 6,53% del censo del Consell".
Sigue la pieza: "“Después de esta ridícula participación, espero la dimisión del Govern del Consell de la República. El resultado es lo de menos. Ahora, hoy, el Consell es una andrómina sin rumbo. Dejé de hacer aportaciones mensuales. Ahora estoy pensando en la baja definitiva. Vergüenza”, era uno de los mensajes emitidos por unos círculos independentistas que han dejado ya de idolatrar al fugado. El empresario Jordi Roset, propietario de Petrolis Independents, empresa cotizante del Consell (llegó a regalar a sus clientes suscripciones gratuitas al Consell), tampoco se muerde la lengua: “Vistos los resultados y la participación, lo que se tendría que hacer es cerrar todo el Consell de la República. Cuando algo no funciona, no merecen gastarse recursos económicos ni esfuerzos de activistas voluntarios”. Sublevación. Lo que debería haber sido un bálsamo para Puigdemont lleva camino de convertirse en una lluvia de polvos pica-pica que pueden amargar al expresident el futuro político, porque agranda la brecha entre el fugado y los círculos radicales que hasta ahora eran su principal apoyo. El tema es tan delicado que ni el propio Carles Puigdemont publicó el resultado de la consulta en su cuenta de Twitter, a través de la que suele comunicar habitualmente toda su actividad".
Pero quien sí publica los resultados es El Confidencial: "La votación sobre los cambios pergeñados por Puigdemont fue catastrófica: de los 90.481 activistas que forman el censo del Consell, votaron solo 5.908, lo que representa el 6,53% de dicho censo. De ellos, 4.529 militantes apoyaron la iniciativa de Puigdemont de disolver la Asamblea de Representantes y remodelar la cúpula del Consell, lo que representa el 76,5% de los votos emitidos. Un total de 1.152 militantes (el 19,5%) se posicionaron en contra de la medida y un 4% (236 activistas) optó por votar en blanco".
También hay buenas noticias en el panorama político nacional. Barcelona y Madrid vuelven a tener relaciones. "Cómo reconstruir en 35 minutos un puente quemado: la intrahistoria del encuentro Almeida-Collboni", titula al respecto El Mundo sobre una información que firma Carlos Guisasola: "A veces basta con media hora bien aprovechada para devolver las cosas a la normalidad. Ocurre en la vida y en la política. Que la política, en definitiva, va de mejorar la vida a los ciudadanos. Por eso, ayer, minutos antes de las 11.00 horas, el socialista Jaume Collboni se adentraba en los larguiruchos pasillos del Palacio de Cibeles para visitar al alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida. Lo hacía como regidor de Barcelona, cosa que puede parecer normal, de no ser porque era algo que llevaba años sin ocurrir. Concretamente, desde aquellos días de máxima sintonía entre Manuela Carmena y Ada Colau, ambas hilvanadas con un hilo político muy similar. El último encuentro oficial databa de 2018. Porque en la anterior legislatura sólo brotó ruido entre Madrid y Barcelona".
Y: "Ayer bastaron 35 minutos para encauzar buena parte de ese caudal desbordado en estos años. En definitiva, para reconstruir un puente, uno de los más importantes del país, que parecía estar calcinado. En la sala de juntas de Cibeles, y con la presencia de cinco banderas (Barcelona, Comunidad de Madrid, España, Madrid y Europa, en este orden), Almeida y Collboni se estrecharon la mano como si tal cosa. Nada de imposturas. Y tampoco, según deslizaron quienes estuvieron en la cumbre, nada de política nacional. Seguramente, cualquier mención a la amnistía habría desembocado en desencuentro. (...) «Lo extraño es que no se haya producido una reunión entre los alcaldes de Madrid y Barcelona anteriormente. Recuperar la normalidad nos viene bien a todos», subrayaba Almeida, minutos después del encuentro. «Prefiero mirar hacia el futuro, hacia adelante, y entender que debemos tener un diálogo común. Tenemos problemas comunes y puede haber soluciones comunes. Dentro de las diferencias políticas, la relación tiene que ser cordial», insistía el primer edil madrileño, que le garantizó a Collboni que no tardaría en devolverle «gustosamente» la visita en Barcelona para conocer su despacho".
18 de octubre, santoral: Lucas evangelista, Amable de Riom, Asclepíades de Antioquía y Monón de Nassogne.