Miquel Carles Català, alcalde de La Portella

Miquel Carles Català, alcalde de La Portella

Política

Los oscuros negocios inmobiliarios del alcalde de Junts que echó a un inquilino a la fuerza

Según los vecinos, el primer regidor de La Portella, Miquel Carles Català, "se dedica a comprar inmuebles para alquilarlos sin contrato" a un precio que oscila entre los 200 y los 400 euros

7 enero, 2022 00:00

Si hay algo de lo que estos días se habla en La Portella es de la actuación del alcalde Miquel Carles Català (Junts), que este lunes echó a un inquilino de su propiedad a la fuerza. Se trata de un pueblo pequeño de la provincia de Lleida, con poco más de 700 habitantes, en el que el regidor está en el punto de mira de los vecinos que advierten de sus oscuros negocios inmobiliarios.

Según ha podido saber Crónica Global, Català no solo es regidor en el municipio, sino que también “se dedica a comprar inmuebles” que han sido puestos en venta por familias que se han marchado del pueblo. Posteriormente, a través de su empresa de construcción, Català Visa SL, remodela y reforma esas viviendas para acabar alquilándolas sin contrato a un precio que oscila entre los 200 y los 400 euros, según las características del inmueble, que normalmente ronda los 30 o 40m2, explican fuentes conocedoras. El regidor no ha atendido las peticiones de este medio para declarar su versión. 

Compra, reforma y alquila sin contrato

Francisco Javier Balañà es una de las personas que vivían en una de estas viviendas. Antes de echarle, le cobraba 200 euros de alquiler y estaba sin contrato. “Le pagan en efectivo”, aseguran los vecinos. Desconocen el motivo por el que Català ha echado al joven, pero consideran que "ha abusado de su autoridad” como alcalde para “dejar en la calle a alguien sin una orden judicial”. Como este piso, existen otros repartidos por el municipio, en los cuales residen familias durante todo el año, pero también temporeros.

Vivienda donde residía Francisco Javier Balañà / CG

Vivienda donde residía Francisco Javier Balañà / CG

Desde el partido de la oposición, Independents per la Portella-Acord Municipal (IxP-AM), aseguran que se trata de “pisos patera”. De momento, lo han “denunciado políticamente” en el pleno y no descartan llevarlo a la Fiscalía para que “investigue”. Los vecinos hablan y saben que “el alcalde comete irregularidades, pero nadie quiere meterse en un lío”, relata uno de ellos.

Exigen su dimisión

La oposición pedirá explicaciones y también su dimisión, a pesar de que tienen pocas esperanzas porque, “hasta ahora, no ha dicho nada”. Esperan que Balañà denuncie para que los Mossos d’Esquadra puedan actuar. De hecho, el propio joven reconoció no haber interpuesto denuncia alguna, lo cual "dificulta que el caso pueda tener recorrido".

A Català también se le conoce en La Portella por otros casos. Uno de ellos relacionado con un edificio propiedad del Bisbat de La Seu d'Urgell, situado cerca de la iglesia. El 26 de febrero de 2016, el que entonces era arquitecto técnico municipal, H. R. Morales, confeccionó un informe técnico en el que proponía determinar que el inmueble situado en la plaza Pare Costes número 4 se encontraba en ruina e instaba a su demolición inminente en un plazo máximo de 30 días naturales. 

Posible "delito de prevaricación"

Sin embargo, según el Registro de la Propiedad de Balaguer, el 12 de julio de ese mismo año, el alcalde adquirió esa finca en nombre de la entidad mercantil Català Visa. El precio de la adquisión no consta. 

Finca con un expediente de derribo que adquirió Català / CATASTRO

Finca con un expediente de derribo que adquirió Català / CATASTRO

IxP-AM denunció el caso ante la Fiscalía. En el documento, al que ha tenido acceso este medio, consta que podría tratarse de un "delito de prevaricación". Por ello, quieren averiguar "las circunstancias concretas de la venta de este inmueble por parte del Bisbat de La Seu d’Urgell" y saber si el alcalde "hizo prevalecer su cargo con el fin de obtener un beneficio patrimonial propio, forzando la venta del inmueble y por un precio inferior al del mercado". Desde el partido cuentan que "han pasado más de cuatro años y aún no se ha tirado abajo". 

Otras polémicas

Las fuentes consultadas recuerdan también un polémico despido de una secretaria del ayuntamiento en 2012. Según declaran, "la echó sin motivo", aunque "se comenta que fue porque no le caía bien”. Sin embargo, existe una sentencia que “declara este despido como un acto nulo, lo cual significa que se la debe readmitir y pagar una indemnización” que, advierten desde la oposición, es “cuantiosa”. De hecho, les preocupa porque “podría incluso superar el presupuesto municipal del pueblo”.

“Desde que gobierna Carles Català, han pasado ocho secretarios de carrera judicial” porque “se van cuando ven el percal”, denuncian. Explican que el alcalde pretende que “hagan cosas que no se deben hacer”, aunque no concretan más detalles. “Nadie se entiende con él. Se cree que está por encima de todo y, o juegas a su juego, o te vas”, critican.