Disturbios en el centro de Barcelona en las protestas tras la sentencia del 'procés' en Cataluña / EFE

Disturbios en el centro de Barcelona en las protestas tras la sentencia del 'procés' en Cataluña / EFE

Política

Los CDR amenazan con otro 'alzamiento' en el primer aniversario de la sentencia del 'procés'

Los grupúsculos radicales independentistas convocan una concentración el miércoles en la plaza Urquinaona, epicentro de la revuelta violenta de octubre de 2019

10 octubre, 2020 23:22

Los Comités de Defensa de la República (CDR) amenazan con volver a generar disturbios violentos en las calles de Barcelona el próximo miércoles, 14 de octubre, con motivo del primer aniversario de la sentencia del procés.

Así lo ha anunciado el CDR del Barcelonés a través de su cuenta de Twitter. Un mensaje al que han mostrado su apoyo otras muchas agrupaciones de diferentes barrios de la ciudad y de localidades cercanas.

cdr 14 octubre

cdr 14 octubre

"Un pueblo alzado"

"El 14 de octubre hará un año de la sentencia contra todo un pueblo. Seguimos en las calles para seguir denunciando la opresión y represión de un Estado en fallida. Ante una sentencia injusta, un pueblo alzado", reza el tuit.

La concentración se ha convocado para las 20.00 horas en la plaza de Urquinaona de Barcelona, que hace un año se convirtió en el epicentro de las protestas promovidas por los CDR, la ANC, Òmnium Cultural y Tsunami Democràtic que derivaron en tumultos con ataques a la Guardia Civil, la Policía Nacional y los Mossos d'Esquadra y con innumerables barricadas de fuego.

Disturbios contra la sentencia del 1-O en la plaza Urquinaona de Barcelona el 18 de octubre de 2019. CDR / EFE

Disturbios contra la sentencia del 1-O en la plaza Urquinaona de Barcelona el 18 de octubre de 2019. CDR / EFE

Cientos de heridos

Aquella batalla de Urquinaona, como se la denomina en el argot independentista, causó centenares de heridos --entre agentes y manifestantes violentos-- y, durante varios días, dejó imágenes de la ciudad de Barcelona en llamas.

Los radicales arrancaron baldosas que --tras trocearlas-- usaron como proyectiles contra la policía, quemaron contenedores y destrozaron mobiliario urbano y multitud de establecimientos privados, obligando a los antidisturbios a responder con contundencia.