Lluís Jutglar 'Peyu', recibiendo el premio Ondas al Mejor programa de proximidad de rádio por El Búnquer, durante la gala de los Premios Ondas 2023 en el Gran Teatre del Liceu de Barcelona

Lluís Jutglar 'Peyu', recibiendo el premio Ondas al Mejor programa de proximidad de rádio por El Búnquer, durante la gala de los Premios Ondas 2023 en el Gran Teatre del Liceu de Barcelona EFE - Quique García

Política

El presentador del programa del "puta España" de Catalunya Ràdio tira de victimismo tras recibir un Premio Ondas

Lluís Jutglar 'Peyu', productor de 'El búnquer' de la emisora de la Generalitat de Cataluña, pide que "nos dejen hacer nuestro trabajo más allá de lo que pensamos o de cómo hablamos"

23 noviembre, 2023 18:06

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El búnquer de Catalunya Ràdio recibió este miércoles el premio Ondas al "mejor programa de radio de proximidad" concedido por la Cadena Ser y Prisa Audio. El controvertido espacio de la emisora pública de la Generalitat, célebre en los últimos años por sus muestras de hispanofobia, obtuvo el galardón en un evento celebrado en el Liceu de Barcelona, en el cual su productor y presentador, Lluís Jutglar Peyu, se despachó con un discurso victimista recurriendo a sus habituales soflamas nacionalistas.

Peyu se presentó en el escenario vestido con un traje folklórico de pastor, con barretina y esperdenyes, para ironizar contra "la gente" a la que, según cree, "le gustaría que la cultura de nuestro país, Cataluña, quedara reducida a esto".

En esa línea, el empresario radiofónico aprovechó para cargar contra el sector cultural español, al que pidió apoyo porque, según él "se le ha echado a faltar muchas veces".

"Que nos dejen hacer nuestro trabajo más allá de lo que pensamos o de cómo hablamos", agregó en tono lastimero Peyu, entre aplausos del público y acompañado en el escenario por sus dos compañeros de programa: Jair Domínguez y Neus Rossell Neussi, ambos también célebres por su activismo nacionalista en los medios de la Generalitat y fuera de ellos. 

Hispanofobia en antena

Su programa, El Búnquer -al igual que otro que Peyu y Domínguez protagonizaron con anterioridad en TV3, llamado Bricoheroes-, ha dado cabida en sus cuatro años de emisión a exabruptos hispanófobos como "puta España". En alguna ocasión, proferido por alguno de sus protagonistas masculinos, y en otros, por sus oyentes y acogidos con jolgorio en el plató. A pesar de que el programa está grabado, sus responsables mantenían estos insultos de los oyentes al editarlo. En los últimos meses, sin embargo, estas ofensas ultranacionalistas fueron desapareciendo, hecho que podría haber jugado a su favor para obtener el Ondas.

300.000 euros por temporada

El programa El búnquer, que Catalunya Ràdio emite cada noche de lunes a viernes, lo elabora la productora El Corral de l'Humor, que a su vez es propiedad del propio Peyu. Su coste para la Corporació Catalana de Mitjans Àudiovisuals (CCMA) -el ente público que gestiona los medios de la Generalitat de Cataluña- asciende a 299.916,93 euros esta temporada, según su portal de transparencia. Una cantidad sensiblemente superior a la del año pasado, cuando ascendió a 265.004 euros también a cargo de las arcas públicas. El búnquer empezó a emitirse en la temporada 2020-2021 y, entonces, costaba casi la mitad: 160.000 euros.

Lluís Jutglar PeyuJair Domínguez, a su vez, también están contratados en el programa de TV3 Està passant, que produce Minoria Absoluta, la compañía del empresario televisivo Toni Soler.

Peyu y Neus Rossell, asimismo, elaboraban la pasada temporada una sección en el magazine diario Els matins de Catalunya Ràdio que consistía en dedicar "un buen día de mierda" a alguien, una sección de pocos minutos por la que cada uno de ellos cobraba 14.000 euros anuales.

Los chascarrillos supuestamente humorísticos de estos presentadores son del agrado de algunos destacados dirigentes del secesionismo catalán. Entre ellos, el secretario general de Junts per Catalunya, el posconvergente Jordi Turull, que el pasado 18 de octubre les felicitó aludiendo de forma velada y sin citarlos a sus exabruptos hispanófobos: "Expectación máxima por las 'palabras de agradecimiento' el día que recojáis el Premio…". Esta vez, se limitaron a ofrecer un discurso nacionalista y victimista culminado con un patriótico "visca Catalunya", sin ir más allá.