Pere Aragonès no escuchará ninguna réplica a su discurso de este jueves en el Senado para defender la amnistía a los condenados y encausados del procés secesionista y la celebración de un referéndum de "autodeterminación" en Cataluña. El presidente de la Generalitat ofrecerá un monólogo de diez minutos exclusivamente en catalán en la Cámara de representación territorial y, acto seguido, se irá, desatendiendo de este modo las respuestas del resto de grupos políticos. Principalmente, del PP, dado que los representantes del PSOE y su Gobierno ya han declinado acudir y rendir cuentas sobre esta medida de gracia, que figura en las negociaciones que los socialistas mantienen con ERC y Junts para lograr su apoyo a la investidura de Pedro Sánchez.
El mandatario de ERC será el primero en intervenir en esta Comisión de Comunidades Autónomas del Senado. La sesión que empezará a las 11:00 horas de la mañana y, una vez finalice, se marchará aduciendo motivos "de agenda", desoyendo así las consideraciones que hagan el resto de presidentes autonómicos (en concreto, 11 del PP, dado que los socialistas no asistirán).
Exigen más cesiones a Sánchez y su Gobierno
Así lo ha reconocido este miércoles la consellera de la Presidencia, Laura Vilagrà, según la cual Aragonès "hará una defensa de la amnistía, de la autodeterminación como mecanismo de resolución del conflicto político", y añadirá "una referencia a que hay que mejorar la situación que vive la ciudadanía".
"Hemos querido asistir para ocupar este espacio. No nos da miedo ir al Senado", ha añadido Vilagrà, advirtiendo de que la negociación para la investidura de Pedro Sánchez "aún está verde". Y eso, a pesar de que el Govern secesionista da la amnistía "por descontada", pero es que además exige al Ejecutivo central en funciones que se aborde la "autodeterminación", el traspaso total de la red de Cercanías de Renfe y más cesiones en la financiación autonómica catalana.
El PSOE elude rendir cuentas
La ausencia de representantes del PSOE en esta sesión del Senado -donde el PP tiene mayoría absoluta, y a la que también dará plantón el lehendakari vasco, Íñigo Urkullu- ha sido criticada desde las filas populares, pues lo consideran una desconsideración y una "anomalía democrática". Su senador Antonio Silván acusó ayer martes al Gobierno de "menosprecio institucional" si no acude.
Desde el PSOE han justificado su plante esgrimiendo como argumento que el PP intenta "crispar". Así lo dijo ayer la ministra de Política Territorial, Isabel Rodríguez, dirigiendo duras críticas contra el PP, al que acusa de "instrumentalizar" el Senado.
Por su parte, desde el Govern secesionista, su portavoz Patrícia Plaja argumentó que Aragonès acudirá para defender la amnistía y la "autodeterminación" de Cataluña ante lo que llama "la derecha reaccionaria española", según las palabras de esta alto cargo.