La funeraria de Tarragona subió sueldos de forma ilegal en pandemia

Así lo indica la auditoría de la intervención municipal de la Empresa Mixta de Serveis Fúnebres Municipals de Tarragona para el ejercicio de la llegada del virus, que destapa gravísimas irregularidades que cuestionan la gestión del equipo de gobierno del alcalde Pau Ricomà, de ERC. 

"Subida de salarios sin cobertura legal"

Según el documento, al que ha accedido este medio, los auditores detectaron "incrementos retributivos" que rebasan lo establecido en normativa, lo que es un "incumplimiento grave". Provocó un gasto "sin cobertura legal" que debió ser regularizado "de forma inmediata para resarcir al erario público". 

Pau Ricomà, alcalde de Tarragona, en un contacto con los medios EP

Los auditores precisan que el personal beneficiado era "laboral" y que sus sueldos tenían que corregirse a la baja para casarlos con "las limitaciones establecidas por normativa". 

Irregularidades en los sueldos...

Hay más. El informe municipal destapa que la junta general no ha aprobado los sueldos de los consejeros --la última fue en 2016-- y no se imputó como pagos en especie la cesta de Navidad que recibió la alta dirección. Cuestión que podría ser menor pero que el fiscalizador de las cuentas de la compañía mixta no ve con buenos ojos. 

Además, se pagó un bonus variable al gerente no aprobado por el consejo de administración, lo que generó otra mención de censura. 

... Y en la contratación

En el capítulo de contratación, el controller destapó incidencias --el informe no se presentó hasta verano de 2022-- en los aspectos "esenciales" de los pliegos, actas perdidas o actas de la mesa de contratación sin firma. 

La funeraria municipal de Tarragona, además, no vigiló a sus adjudicatarias al pedir ésta financiación no permitida por los pliegos y, más grave, "prorrogaba tácitamente contratos" superiores a 15.000 euros. También se ha detectado que abusaba de la contratación menor. Es decir, las adjudicaciones que no requieren de un concurso público. 

Recomendaciones

Ante esta cadena de irregularidades, Intervención, apoyada por Global & Local Audit, emitió una serie de recomendaciones que se debían aplicar de forma inmediata. Pasaban por adecuar la contratación de personal y remuneraciones a ley y ceñir la adjudicación de contratos a la normativa dispuesta, básicamente. 

Atrio del Tanatorio municipal de Tarragona Cedida

La enseña público-privada se comprometió a afinar los aspectos criticados por los fiscalizadores. Entre otros, la funeraria avanzó que "adecuaría los contratos a la normativa aplicable" y reforzaría la "publicidad" de la contratación para preservar la competencia. 

Funespaña entró en 1988

En cualquier caso, el descontrol en la gestión del grupo de final de vida ha alertado a la Oficina Antifraude de Cataluña (OAC), que busca si las irregularidades son también susceptibles de más recomendaciones contra la corrupción o de terminar en la justicia ordinaria. 

Por lo pronto, suponen un obús de profundidad para el gobierno municipal de Ricomà, que aspira a la reelección este mismo domingo en las elecciones municipales. No en vano, el propio alcalde de ERC es el presidente de la funeraria. El primer edil republicano comanda un consejo de administración de una firma semipública que enajenó el 49% de las acciones en un concurso público en 1988. Ganó Funespaña, el operador de Mapfre, que encadena tres décadas de convivencia con la parte municipal.