Cuando Pujol y Puigdemont se dejaban querer en la Feria de Abril en Cataluña
Jesús Conte, periodista y exjefe de prensa del Govern, repasa en un libro los 50 años de un evento masivo que se mantiene pese a las burlas independentistas a los andaluces
20 abril, 2023 00:00Hubo un tiempo que la Feria de Abril de Cataluña era cultura catalana. Jordi Pujol y Carles Puigdemont la visitaban y se dejaban querer. Pero hoy, quienes celebran esa fiesta son tildados de "colonos". Un libro repasa los 50 años de un evento por el que han desfilado dirigentes políticos de todos los colores. Las burlas hacia la Virgen del Rocío y los andaluces en TV3 ha vuelto a poner el foco en esta fiesta, que el independentismo más radical rechaza, pero que es visitada anualmente por millones de catalanes.
Lo que comenzó como una fiesta improvisada sin apenas permisos municipales, se convirtió con el paso del tiempo en un acto masivo. De esa evolución da cuenta El nostre país està de Feria. Medio siglo de Feria de Abril en Catalunya, escrito por el periodista y exjefe de prensa de la Generalitat, Jesús Conte. Editado por la Federación de Entidades Culturales Andaluzas en Cataluña (FECAC), el libro está lleno de anécdotas y de documentos que no siempre han sido fáciles de obtener, confiesa su autor.
Empezó como un par de casetas de baile y una barra de bar “para curar la nostalgia” de los andaluces afincados en Cataluña, para luego profesionalizarse hasta convertirse en un evento que en la edición de este año tendrá una duración de 11 días, resultado de un mes de montaje y decoración.
En sus inicios, la Feria de Abril se celebró en un local social de Barcelona (1971), pero luego salió a la calle y fue cambiando de escenario: Gavà, Castelldefels, L’Hospitalet… Pero fue en Barberà del Vallès donde adquirió su carácter multitudinario. Posteriormente se celebró en Santa Coloma de Gramenet, Sant Adrià de Besós –ya junto a la playa— y, actualmente, en el recinto Fórum.
El evento se convirtió pronto en cita obligada de los políticos a la caza de votos de la comunidad andaluza. Todos los presidentes de la Generalitat, excepto Quim Torra, han visitado la Feria. Jordi Pujol, tras pasear durante tres horas el ferial en 1983, manifestó: “Me encuentro muy bien entre ustedes y no sólo he venido por gusto, sino también porque es mi obligación el intentar ser el presidente de todos los ciudadanos de Cataluña, con independencia de su lengua, origen, condición social o sus ideas políticas. Si no lo hiciera así, sería, de entrada, un mal presidente”.
Puigdemont: fino y jamón
Puigdemont inauguró la edición de 2016 y volvió en 2017, el año en que convocó el referéndum de independencia. “Compartió el jamón y el fino en diversas casetas, saludó a quien se le acercaba y se movió sin ningún tipo de incidente”, recuerda Conte, cuyo libro es fruto de una intensa labor de documentación.
Pere Aragonès, añade, “conoce la Feria desde que se ubica en el Fórum, acompañó en 2018 al presidente del Parlament, Roger Torrent, en plena vigencia del artículo 155, representó a la Generalitat como vicepresidente en 2019 y luego inauguró la última edición, en 2022, ya como primer mandatario de Cataluña”.
Lo que escribía Rahola
La escritora y exmilitante de ERC Pilar Rahola escribía en 1994: “¿Es la Feria de Abril un acontecimiento catalán? Preguntarlo es ofender. Porque es el acontecimiento cultural más importante de miles de catalanes, porque ya forma parte indiscutible de nuestras expresiones folklóricas, porque un país sólo es sano –sólo es democrático— cuando es capaz de asumir y enorgullecerse de todas sus diferencias internas, porque la Cataluña actual no es imaginable ya sin la Feria de Abril, por todo lo que nos define colectivamente la Feria de Abril es catalana”.
La historia de la Feria no ha estado exenta de polémicas, como la "guerra de las vallas” entre los ayuntamientos de Barberà y Sabadell, la muerte de un trabajador en el tren de la bruja y de un toxicómano (1986), o la pelea con arma blanca que acabó con la vida de un joven de 20 años (1987).
Colapsos, un barrizal...
Los colapsos circulatorios en los accesos y las lluvias que convertían el ferial en un barrizal también eclipsaron una fiesta que, pese a las controversias, sigue siendo masiva. El año pasado se tuvieron que cerrar los accesos el 1 de mayo durante unos minutos porque se estaba superando el aforo máximo de 25.000 personas en el Fórum.
¿Tendrá continuidad? La reciente burla sobre la Virgen del Rocío y de los andaluces en TV3 indignó a sus organizadores. Pero este año habrá Feria de Abril de Cataluña y adaptada a los nuevos tiempos, pues contará con una carpa LGTBI. Un colectivo llamado La Movida ha preparado una caseta con draq queens y ambiente queer por primera vez en los 50 años de historia del mayor evento de las raíces andaluzas en el territorio.