Minoria Absoluta, la productora del empresario y activista independentista Toni Soler, ha firmado contratos por un valor de casi cinco millones de euros con la Corporació Catalana de Mitjans Àudiovisuals (CCMA) --el ente que gestiona los medios audiovisuales públicos de la Generalitat-- desde que se decretó el primer estado de alarma el 14 de marzo de 2020.
La mayor parte de esa cantidad se destinó al encargo de producción audiovisual de su programa Polònia para la temporada 2020/21. Un espacio de sátira política que se emite semanalmente en TV3 y que, según admitió la semana pasada la presidenta de la CCMA, Núria Llorach, ha recibido de la Generalitat dinero del fondo Covid. Un fondo del que también se ha beneficiado, según apuntó, la productora Mediapro de Jaume Roures con la venta de su polémica docuserie El Judici, dedicada al juicio a los líderes del procés, y criticada por su falta de imparcialidad y su claro sesgo secesionista.
1,5 millones extra del fondo Covid para TV3
En concreto, de los 4.803.590 euros que Minoria Absoluta ha obtenido de TV3 desde que estalló la crisis del coronavirus, 3.117.426 euros (más del 60% del total) se destinaron a Polònia --si bien de esa cantidad hay que descontar los 60.000 euros abonados por la productora por la cesión de uso de platós de TV3--. Su siguiente programa con un coste más elevado fue el controvertido Està Passant, que facturó a la cadena 1.649.163 euros. El resto de los ocho contratos firmados en este período incluye también otros 90.000 euros para hacer diez capítulos de la serie Pioners, y otros menores como los 7.000 euros por unos derechos de emisión.
Más allá incluso del desembolso realizado por la televisión pública catalana en producciones externas en plena crisis del coronavirus, lo que más polémica ha suscitado ha sido el hecho de que se haya destinado a estas dos productoras parte del fondo Covid del Estado del cual dispone la Generalitat, pensado para cubrir actividades esenciales y emergencias frente a la pandemia. Así lo reconoció la propia Llorach ante la comisión de control parlamentaria de la CCMA el pasado 28 de mayo: "De los fondos Covid, recibimos un millón y medio en el mes de septiembre, si no me equivoco”, con la finalidad de compensar la “falta de ingresos publicitarios”. Y esa cantidad, tal y como admitió, se utilizó “para comprar producción, entre otros, por ejemplo, el Polònia”. Una decisión que, al igual que la compra de El judici a Mediapro, atribuyó al director de la cadena, Vicent Sanchis: “Cada vez que llega dinero a la corporación, sea del fondo que sea, el director tiene el margen que le corresponde como responsable para decidir en qué contenidos se utiliza”.
El caso llega a la Comisión Europea
Este dispendio, en plena crisis social y económica por la pandemia de coronavirus, ha suscitado las quejas de la oposición parlamentaria no independentista. La confesión de Llorach, por ejemplo, llegó en respuesta a una pregunta de la diputada del PSC Beatriz Silva. Y el caso ha llegado incluso al Parlamento Europeo, donde Ciudadanos (Cs) ha denunciado el uso de fondos Covid para la compra de material audiovisual por parte de TV3.
Núria Llorach, admitiendo que el fondo Covid hizo posible la continuidad de Polònia y la adquisición de 'El judici' de Mediapro
En concreto, el eurodiputado de Cs Jordi Cañas ha preguntado por escrito a la Comisión Europea la posibilidad de abrir una comisión de investigación sobre “el correcto uso de la Generalitat de Cataluña de los mecanismos financieros habilitados por la UE para reforzar los sistemas sanitarios”.
De las dudas de Sanchis a las quejas de Valls
Sea como fuere, el caso es que, antes de recibir esa inyección económica, el director de TV3, Vicent Sanchis, reconoció en otra de las comisiones de control a la CCMA que posiblemente tendría que dejar de emitir Polònia debido al déficit económico de la cadena.
Pero finalmente eso no se produjo, y Polònia continúa emitiéndose esta temporada no sin algunas controversias. La última, el pasado fin de semana, cuando el concejal barcelonés y exprimer ministro francés Manuel Valls se quejó --a raíz de su caricatura en algunos de sus gags-- del sesgo independentista tanto del programa como de TV3, a la que acusó de ser “una maquinaria de propaganda única en Europa”.
Insultos y 'fake news' en 'Està passant'
Más controversia aún genera, en este sentido, el otro programa estrella de Minoria Absoluta en la cadena. Se trata de Està Passant, un espacio diario también de sátira política que se emite por las tardes antes del informativo Telenotícies, dirigido y presentado por el propio Toni Soler.
Este programa ha sido denunciado en varias ocasiones por su radicalismo nacionalista, llegando incluso una vez a los juzgados por haber comparado y tildado de “perros” a los Mossos d’Esquadra por sus cargas e intervenciones en movilizaciones secesionistas. Una denuncia que no tuvo mayores consecuencias por la retractación ante el juez de sus presentadores.
Más recientemente, Està Passant ha protagonizado otros episodios sonados en este sentido. Así, en su despedida antes de las pasadas vacaciones navideñas, Soler felicitó el nuevo año dedicando un emocionado recuerdo a los políticos presos del procés y deseando que los políticos constitucionalistas y jueces que, según él, les condujeron a la cárcel se atragantaran con el turrón.
Nada más empezar 2021, los responsables de Està Passant estuvieron a punto de tener que volver a pasar de nuevo por los juzgados por propagar fake news sobre el exdiputado y sindicalista Joan Coscubiela, al que atribuyeron, falsamente, haber pertenecido al consejo de administración de Endesa para intentar desprestigiarle. Después de recibir dos burofaxes de Coscubiela pidiendo una rectificación --con el primero, Toni Soler llegó incluso a reafirmarse tras leer su nota--, finalmente esta se produjo.
"Puta España"
Està Passant tampoco ha sido ajeno a los episodios de hispanofobia de algunas de las estrellas de TV3. Así, el pasado 19 de febrero, su copresentador Jair Domínguez profirió el improperio “puta España” para hacer una rima en un gag supuestamente humorístico.
Domínguez, célebre por su nacionalismo exacerbado, ha utilizado también esta expresión en otro de los programas que presenta en la cadena, Bricoheroes, así como de forma recurrente en sus redes sociales. Algo que ha sido denunciado en las comisiones de control de la CCMA por contravenir su propio libro de estilo, sin que ésta no sólo no tomara medidas al respecto, sino que incluso lo amparara escudándose en la libertad de expresión de sus colaboradores externos, aún afeándoselo.
En este sentido, cabe destacar que otro de los colaboradores del programa es Òscar Andreu, también conocido por sus encendidas soflamas independentistas y críticas a los partidos constitucionalistas en su perfil de Twitter. Algo que también ha sucedido en el caso de Toni Soler, que desde su cuenta personal en esta misma red social, por ejemplo, llegó a animar a participar en las acciones de Tsunami Democràtic, a aplaudir el intento de ocupación del aeropuerto de El Prat y a calificar de "cínico" al presidente del Gobierno Pedro Sánchez durante las protestas contra la sentencia a los presos del procés.
100 millones de euros en 15 años
Toni Soler dispone de un sueldo anual de 174.000 euros como director de Minoria Absoluta, productora de la que es, además, propietario. Según explicaba recientemente el digital Metropoli Abierta, este empresario televisivo se ha aumentado además en 29.000 euros su asignación desde 2019.
Minoria Absoluta ha facturado en total unos 100 millones de euros por sus programas y documentales a TV3 entre 2005 y 2020, según dicho medio. La televisión pública de la Generalitat es su principal fuente de ingresos, pues de los 7,8 millones netos que obtuvo en 2019, un 90% procedía de ella.