Rosell pide cambios en la Constitución
El presidente de la CEOE apuesta por la tercera vía y reclama diálogo para solucionar el conflicto político catalán
14 septiembre, 2017 11:32El presidente de la CEOE, Juan Rosell, ha reclamado esta mañana una tercera vía que solucione el conflicto independentista. Señala que el problema político catalán se mantendrá más allá del referéndum convocado el 1-O, por lo que exige “hacer política con mayúsculas”: “Volver a lo que hicimos en el 77 y el 78 y reconstruir un pacto entre todos”. “Hay que hacer cambios o reformas en la Constitución” con el objetivo de “vivir en tranquilidad y prosperidad los próximos 40 años”.
Y esto pasa por buscar una “vía intermedia” para el procés que se encuentre “entre la independencia y el acatamiento porque sí y una sumisión total”. Para ello, se debe restablecer el diálogo entre Madrid y Barcelona. El líder de la patronal ha explicado en una entrevista en la cadena SER que así se lo ha pedido “con más énfasis en privado que en público” tanto al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, como al de la Generalitat, Carles Pugidemont.
Desafección en Cataluña
El empresario catalán lideró este miércoles una reunión tensa en la junta directiva de la CEOE que concluyó con el consenso de un posicionamiento sobre el “referéndum ilegal”. Mostraban su apoyo al Gobierno por las medidas emprendidas para evitar la votación, pero la patronal fue más allá y también reclamó diálogo y una solución política a la secesión.
Preguntado sobre la presunta sumisión de Cataluña al Estado, mantiene que el empresariado no cree que se dé una situación en este sentido sino una “desafección muy importante”.
Impacto económico del enquiste del ‘procés’
“Lo que yo he dicho siempre a nivel personal es que en Cataluña hay un problema político de una gravísima envergadura y que hay que resolverlo con los planteamientos encima de la mesa y, desde la legalidad, intenta hacer todos los cambios que sea necesarios”, indica. Con el respeto a las normas de juego vigentes. Las de la “Constitución y las leyes de la UE”.
Rosell ha recordado que las empresas necesitan “seguridad jurídica y, cuando se altera, hay que tomar todas las medidas oportunas para restablecerla”. Pero dejar que el problema catalán se enquiste también impactaría de forma negativa en la confianza en el tejido económico e inversor tanto en Cataluña como en el resto de España.