Màrius Serra, espiando a Ferran Toutain y Miriam Tey

Màrius Serra, espiando a Ferran Toutain y Miriam Tey

Política

Màrius Serra, tras su espionaje, se presenta como víctima de los no nacionalistas

El escritor convierte la disculpa por haber espiado y difundido una conversación privada de Toutain y Tey en una nueva invectiva contra los no nacionalistas, acusándoles de victimistas. Paradójicamente, en su artículo él mismo se presenta como víctima por los "desproporcionados" ataques que ha generado su acción.

26 junio, 2015 15:10

Màrius Serra ha vuelto a la carga. Y lo ha hecho a través de un artículo que, en un principio, pretendía ser una disculpa por haber espiado y difundido una conversación privada de Ferran Toutain y Miriam Tey, pero que ha terminado siendo una nueva invectiva contra los no nacionalistas, a los que ahora acusa de "victimismo".

Un victimismo en el que, paradójicamente, él mismo incurre en su supuesto texto de disculpa, al tratar de presentarse como víctima por los "desproporcionados" ataques recibidos en la red como reacción a su espionaje.

Se disculpa pero justifica su espionaje

El artículo ha sido publicado este miércoles en El Núvol, un día después del espionaje, con el título "El victimismo ha cambiado de bando". Serra se ha disculpado y ha calificado lo sucedido de "acción irresponsable" e "irreflexiva", "despropósito", "maldad" e "insensatez", reconociendo que la polémica la "he provocado yo solito".

Sin embargo, de inmediato la justifica: "Me era físicamente imposible no oírlo"; "Todos cometemos errores y ojalá todos fuesen de esta magnitud"; "¿Quién no ha oído una conversación en un lugar público?"; "¿Quién no la ha explicado"; "Los escritores ponemos el oído en todo, y los que no escriben, también"...

"Desproporción" entre su "insensatez" y "las reacciones que ha provocado"

Durante el resto del extenso artículo, el colaborador de TV3, La Vanguardia y RNE -entre otros- se dedica a criticar lo que considera una "desproporción entre esta insensatez [su espionaje] y algunas de las reacciones que ha provocado", que tilda de "prodigiosa".

Por una parte, Serra apunta a Vilaweb por haber hecho noticia de su actuación, con "un titular que busca llamar la atención" ("Màrius Serra espía y explica una conversación anticatalanista de Ferran Toutain"). Poco después, el digital dirigido por Vicent Partal decidía suprimir el contenido y pedir disculpas al activista independentista por haberle incomodado. No así con Toutain.

Serra también carga contra un artículo de José María Albert de Paco en Libertad Digital ("Atestado") y contra la pieza de CRÓNICA GLOBAL que recogía lo ocurrido, cuyo "titular indica otra intención más directa", según el escritor.

De 'verdugo' a víctima

A partir de ahí, hace una recopilación de tuis de respuesta a su espionaje. Algunos mostrándoles su apoyo y otros criticándole e, incluso, insultándole.

En base a eso, llega a una sorprendente conclusión: "Cuando en los años 80 cursaba filología inglesa en la universidad, los que defendíamos la independencia éramos una minoría mucho menos numerosa de los que hoy defienden la permanencia en España. Nunca se me ocurrió hacerme la víctima. Eso ya lo hacía Jordi Pujol, el McGuffin del catalanismo, que hizo del victimismo un estado vital. Hoy, el victimismo ha cambiado de bando".