Llevamos dos días de Gobierno. Dos. Y no salimos del asombro. Un Gobierno que son dos equipos de fútbol, con árbitro incluido. Once ministras contra once ministros. Pedro de árbitro. Si pagan bien los árabes, a jugarlo en Arabia. No caben en la sala del Consejo de Ministros. Una liquidación de la separación de poderes, si es que había algún poder independiente. ¿Sigue vigente Montesquieu? Pasó a la historia, al menos en España. Un sometimiento de la información de Presidencia al capricho del jefe de gabinete presidencial, o sea, de su valido, de su ‘Rasputín’, quien la comunicación sólo la quiere para su servicio. El ciudadano que no se entere de nada. Y un revuelto de noviazgos que la sala de reuniones del Consejo de Ministros parece una sala de citas. El nuevo ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, es el novio de la presidenta del Congreso Meritxell Batet. Recibió la cartera de Justicia de Dolores Delgado, la futura Fiscal del Estado y novia de Baltasar Garzón, que a su vez es el abogado de Evo Morales que presuntamente financió a Pablo Iglesias, (este tema sigue oculto) novio, a su vez, de Irene Montero, la nueva ministra de Igualdad ¿Hay quien dé más?

Sí. Todavía hay más. Lleva Pedro más de una semana como presidente y en el primer Consejo de Ministros sólo aprueban la subida de pensiones. El 0,9%. Suponen aproximadamente siete euros para las pensiones mayoritarias de unos 700 euros. ¡Qué alegría! Todos a dar saltos. Se duda si gastar la subida en vino o en comprar un cortijo o un ‘casoplón’ como el de la pareja podemita. Cuestión de números y de partirse de risa. Como da risa, así mismo, escuchar por la rivera del Manzanares que si Pedro y Pablo congenian bien, (en política, claro) en poco tiempo Pedro puede abandonar a los socialistas y Pablo a los podemitas para fundar un partido llamado ‘Partido Progresista’ o ‘Partido Progresista de España’, vendernos sus éxitos con la información controlada y mantenerse en el poder ‘sine die’, y así ‘madurar’ a España. Será demasiado, ¿no cree amigo lector? Puede, pero el temblor, al oírlo, se mete en el cuerpo y llevo tres días sin sacarlo. Espero sea una ‘fake news’ más. Lo deseo. ¿Hay algo más?

Sí. Todavía hay más. El ministro de Interior, Grande Marlasca, se ha cargado a la gente impuesta por el PSOE y Ábalos en su ministerio como la Secretaria de Estado de Seguridad, Ana Botella, y al director de la Guardia Civil, Félix Azón, por gente de su entorno. Nadie se ha cargado al ministro por la chapuza de la embajada de Bolivia donde mandó a los GEOS con pasaporte falso y pasamontañas. Ha empezado la criba. En todo el Gobierno. Dicen que estaba previsto, pero no nos lo creíamos. Ya empieza a notarse que ‘sí se puede’ ‘madurar’ a España. ¿Hay algo más?

Sí. Todavía hay más. Ya nadie reconoce al vicepresidente Pablo Iglesias. Ha dicho que la próxima Fiscal General Dolores Delgado “merece una oportunidad”. Con lo que largó de la entonces ministra de Justicia en su relación con el ‘caso Villarejo’. “Alguien que se reúne de manera afable con un personaje de la basura, de las cloacas, (…) debe alejarse de la vida política (…) no es aceptable que en este país haya ministros que sean amigos de tipejos como Villarejo”. Eso dijo de la exministra de Justicia. Está irreconocible. El poder. ¡Ay, el poder! Cambia al más bravo de sus súbditos, aunque vaya en vaqueros a Moncloa. Ningún gobierno en España soporta a un fiscal neutral. Éste, tampoco. ¡Pobre democracia! Otro aperitivo. Podemos ya pagó a la escolta de Irene. Se evita ir a juicio. Y publicidad en la prensa, si es que queda algún medio libre que no controlen entre él y Redondo. ¿Algo más?

Sí. Todavía hay más. Empiezan a dar permisos a los presos del Procès. Empiezan por los Jordis. Para disimular. No llamar mucho la atención. Luego vendrán los demás. Y Junqueras. Pronto la libertad. Y será candidato a presidir la Generalitat. Y cenará en casa por la Pascua. “Todas las partes tendrán que ceder” ha dicho Iglesias. Y lo que se decida lo tendrá que “votar” la ciudadanía catalana. Es el referéndum que tanto ansían los independentistas. Blanco y… en frascos del Vicepresidente Iglesias. Con el visto bueno del presidente Sánchez que ha confirmado que se va a reunir con el President Quim Torra aunque esté inhabilitado por la justicia. Para blanquearlo. El PSC (PSOE) ha apoyado a Torra como diputado catalán. Pasa de la Junta Electoral Central y del Tribunal Supremo. Más blanco en la botella. No quieren los socialistas el adelanto de las elecciones catalanas. Tendrían que indultar a Junqueras. Rufián lo llama ‘amnistía’. Nos vamos entendiendo. De eso se encargará la nueva Fiscal General llamada Dolores Delgado. Todo claro. O turbio, depende quien lo mire. ¿Algo más?

Sí. Queda mucho más. Sólo destaquemos que los indultos son la línea maestra del acuerdo con ERC. Sin indulto no habrá Presupuestos en este año 2020. Sin Presupuestos la legislatura no dura más de seis meses. Los 1.400 días, el sueño de Sánchez, se quedan en 180 días. ¿Hay más? Sí, mucho más. Pero nadie lo denuncia. Ni oposición (¿existe?), ni medios de información nacionales (¿existen?), ni televisiones (¿existen?). No se les ve. Será que ya lo controla todo el Rasputín de Redondo. ¡Buena nos espera! Alerta.