Enrique, un español ministro de la primera nación espacial
Un empresario de Marbella, nombrado miembro del Gobierno de Asgardia, un futuro reino orbital de la tierra al que aspira a vivir un millón de personas
19 marzo, 2019 00:00Es Enrique Moncada, el español ministro de la primera nación espacial tecnológica. Este empresario de las comunicaciones y el marketing y asesor de diversos gobiernos afincado en Marbella acaba de ser nombrado miembro interino del Gobierno de Asgardia, un futuro reino orbital que ha recibido un millón de peticiones de ciudadanía.
Imagen de una de las plataformas de Asgardia, una futura nación espacial / CG
Según ha podido saber Crónica Global de fuentes del sector vacacional, Moncada ha sido designado ministro de Exteriores de forma interina. La consejera delegada del proyecto espacial, Lena de Winne, tomará las riendas del Ministerio de Información y Comunicación. Markus Gronbach, ex alto cargo del Ministerio de Defensa alemán, ha sido designado para la cartera de Justicia, mientras que la auditora y exdirectiva del banco estadounidense JP Morgan Yana Smelyansky tendrá el despacho de Equidad y Recursos.
Preguntado sobre si quería comentar su nombramiento, anunciado por Asgardia en nota de prensa, el entorno del empresario ha declinado aportar más detalles hasta que sea oficial.
Asgardia no es ninguna broma
Moncada y el resto de ministros recogerán sus carteras en Viena (Austria) en abril. ¿Qué pasará entonces? "Pues que este señor, igual que el resto, empezarán a desempeñar sus funciones, evidentemente remuneradas, pues es una iniciativa a tiempo completo", han indicado las mismas fuentes. Las labores que les aguardan son ingentes. Incluyen convencer al gran público y a los inversores de que Asgardia va en serio y no es una broma o el capricho de un multimillonario ruso. Éste tiene nombre, claro. Es Igor Ashurbeyli, científico ruso, exmiembro de la galaxia militar rusa y creador de Socium, un conglomerado con ramificaciones en diversos sectores económicos. "Su proyecto tiene una capitalización cercana a los 15.000 millones y cuenta con un satélite en órbita", recuerdan los directivos, que han preferido no revelar su nombre.
Ceremonia de nombramiento del jefe nacional de Asgardia, Igor Ashurbeyli, en 2018 / Asgardia
Hay más. Otra de las asignaturas pendientes, además de los evidentes retos tecnológicos de crear plataformas habitables para humanos en la órbita terrestre baja, donde se encuentra la Estación Espacial Internacional (ISS, por sus siglas en inglés), es que los promotores de Asgardia deben levantar la nación desde cero. De un gobierno a un parlamento --que ya tiene presidenta, la venezolana Ana Mercedes Díaz, expresidenta del Consejo electoral Nacional de Venezuela--, pasando por su economía, contribución a la vida terrestre y sus relaciones exteriores con los países. Aquí es donde se presenta un desafío para Moncada, uno de los 4.000 españoles que aspiran a ser ciudadanos.
"¿Su aspiración? Que la ONU les reconozca"
El conciudadano deberá bregar para que se consoliden las relaciones exteriores de Asgardia. La nación sin estado (ni órbita) ya ha firmado acuerdos de colaboración en investigación espacial y materia educativa con la Unesco, pero se enfrenta a retos aún mayores. "Se trata de que las instituciones internacionales, ya sean la Organización de Estados Americanos o la Unión Europea les reconozcan como nación. Para, finalmente, pasar a engrosar la lista de estados miembros de la Organización de Naciones Unidas (ONU)", explican las mismas voces.
Acto de nombramiento de Igor Ashurbeyli como jefe de la Nación de Asgardia / Asgardia
En paralelo, los colegas de gabinete de Moncada deberán llevar la nave a buen puerto, o buena estación. De momento, los mimbres de Asgardia son numerosos, aunque desconocidos. Tiene su propia criptomoneda, su banco, su constitución, su parlamento, su tribunal supremo y ha lanzado ya un satélite con los datos de los 7.000 primeros ciudadanos. El ingenio se pegó a la ISS en septiembre de 2018 hasta febrero de este año, cuando empezó a orbitar y a recopilar datos. Esta suerte de caja de zapatos voladora es uno de los miles de satélites que el Gobierno de Asgardia quiere lanzar al espacio. Su objetivo es llevar internet a todos los rincones del globo.
Dos años de vida y un horizonte: 150 millones
Anunciada en 2016, la nación aprobó su carta magna en 2017. Tomó forma el 25 de junio del pasado año, cuando Igor Ashurbeyli, su creador, fue nombrado jefe de Nación. "Los intereses son muchos y variopintos. Se ha hecho un hueco entre la comunidad científica, que ha soñado con algo similar durante muchos años", explican las fuentes consultadas. Tanto es así que el propio ministro de Ciencia, Innovación y Universidades, Pedro Duque, es uno de los 4.000 españoles interesados en Asgardia.
Imagen del satélite de Asgardia y, a su vez, el primer territorio de la nación espacial / CG
Las expectativas creadas en menos de dos años de vida son enormes. Se habla de su posible contribución a solucionar los problemas medioambientales de la tierra o de la contribución tecnológica que una estación espacial habitada podría hacer. Sus creadores van aún más allá. El propio jefe nacional ha indicado que quiere enviar a 150 millones de personas a la órbita terrestre para que habiten en distintas plataformas. De éstos, además de Moncada, son aspirantes unos 1.300 ciudadanos en Barcelona y otros 1.600 en Madrid. ¿Qué necesitarán? 100 euros, una fotografía personal y jurar las leyes y la constitución de Asgardia, según rezan las leyes de ciudadanía. Un texto magno que, por cierto, ya orbita alrededor de la tierra. Todo ello y que Enrique Moncada, Ashurbeyli y el resto del gabinete consigan que el reino vea la luz. El jefe nacional quiere lanzar la primera nave en ocho años. Miles de ciudadanos estarán pendientes de su promesa.