Josep Ginesta
El secretario general de Trabajo ha sido el encargado de anunciar a Foment del Treball y Pimec que iniciarán el conteo de la representatividad empresarial. Aunque era un escenario al que no se quería llegar, la Generalitat tenía pocas opciones ante el enroque del diálogo aunque sólo fuera en una de las partes. Más, cuando el conflicto dura ya doce años. El problema para el Gobierno catalán es que si quiere bajar a la arena del conflicto lo debe hacer con todas las consecuencias. Recuperar un decreto de hace dos legislaturas y que ya era de parte no es el camino. Al menos, si se quiere evitar ir de nuevo a los tribunales.