De asesor a alto cargo
Una de las medidas contempladas en la aplicación del artículo 155 es el cese de Carles Puigdemont y de su Gobierno. Por tanto, todos los cargos de confianza, los eventuales, designados por los consellers cesan con el titular de la cartera. No así los altos cargos que siguen en su puesto hasta que no se nombre un sustituto. Quizás por eso, el Govern ha hecho cuatro nombramientos y sólo uno ya era alto cargo. Se trata de Albert Castellanos, hasta ahora director general de Promoción Económica, Competencia y Regulación, que ha sido nombrado secretario de Hacienda de la Generalitat.
Los otros tres nombramientos son: Jordi Boixareu, sustituto de Castellanos, que hasta ahora director del Programa para la Aplicación y Desarrollo de los Tributos de Catalunya; Pere Martínez, nombrado director general de Análisis y Prospectiva, siendo hasta ahora jefe del Gabinete de Relaciones Institucionales de Presidencia; y Lluís Juncá, hasta ahora director de la oficina del vicepresidente y conseller de Economía y Hacienda, nombrado secretario general de la vicepresidencia de Oriol Junqueras.
En conclusión, de estos cuatro nombramientos, tres son cargos de confianza que ahora pasan a ser altos cargos. Una manera de blindarlos si se impone el 155. Y de los cuatro cargos, uno sólo es del PDeCAT, los otros tres pertenecen a ERC.