El Barça se sintió huérfano de extremos tras la partida de Ousmane Dembelé, el pasado mes de agosto. Por aquel entonces, la irrupción de Lamine Yamal todavía no cobraba tanta magnitud en el primer equipo, aunque ya había participado en varios amistosos de la gira en Estados Unidos. Xavi Hernández pedía un recambio a Deco y Mateu Alemany. En la terna de candidatos destacaba el nombre de Nico Williams, uno de los nuevos cracks de la Roja.
Sin embargo, dos factores han enfriado esta posibilidad que adelantamos en Culemanía. Primero, la ascensión meteórica de Lamine, con condición de futbolista titular ante la baja de Raphinha y la marcha de Dembelé. El técnico catalán y su staff consideran reemplazado satisfactoriamente el desborde del extremo francés. En segundo lugar, Nico y su agente, Félix Tainta están por la labor de renovar su contrato con el Athletic de Bilbao.
Oportunidad de mercado
Precisamente, la condición contractual de Nico tentó a los grandes equipos españoles, a la par que los gigantes europeos. Y es que el vínculo del pequeño de los hermanos Williams con los leones expira en junio de 2024. El Barça pretendía otra posible llegada a coste cero dentro de un año que siguiera los pasos de su excompañero Iñigo Martínez.
En tanto, el Real Madrid permanecía atento por la misma razón: oportunidad de mercado. Según otros medios españoles la cláusula del jugador de 21 años asciende a 40 millones y el Athletic busca una revisión al alza hasta los 50 kilos mediante una renovación. Estas cifras levitan por encima de las posibilidades económicas del club que preside Joan Laporta, pero sí que permanecen al alcance de la entidad madridista.
Necesidad cubierta
Los dirigentes del conjunto vasco quieren sellar la continuidad del joven internacional con la selección española antes del 1 de enero. De este modo, se ahorrarían el riesgo de que Nico empezara a negociar con otros equipos con pleno derecho. En ese momento entraría el Barça, cuya dirección deportiva encabezada por Deco mantiene la alerta a la espera de acontecimientos.
Sin embargo, la necesidad ha perdido urgencia, ante posiciones menos cubiertas como el pivote. Lamine, Raphinha y Ferran Torres compiten por el puesto de extremo derecho. La eclosión de la joya de 16 años ha encarecido la pugna por la titularidad y ha rebajado el alarmismo posDembelé. Curiosamente, tanto el canterano azulgrana como Nico habían caído lesionados para el parón de selecciones, y llegarán a tiempo para agitar el Barça-Athletic de este domingo 22 de octubre.
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