El presidente del FC Barcelona, Joan Laporta, no escatima palabras. El máximo dirigente del club azulgrana concedió una rueda de prensa de casi hora y media para analizar el contexto económico, institucional y deportivo del Barça. La oratoria es la mejor arma del abogado catalán, empeñado en limpiar el nombre de la junta directiva de la entidad. Tras recibir numerosas críticas de los socios y los grupos de opinión, el mandatario barcelonista pasó al ataque mediante una defensa efectista en el Auditori 1899.

Jan sacó pecho de la gestión financiera de la institución catalana tras otro verano marcado por la inestabilidad y la incertidumbre. Montado en su nube de optimismo, Laporta incurrió en 4 medias verdades de su discurso. El presidente del Barça se hizo trampas al solitario. Primero aseguró que la propia plana mayor había descartado la posibilidad de alcanzar el 1-1 con el acuerdo de Nike para obtener un acuerdo todavía más beneficioso. También alardeó de un "resultado ordinario positivo por primera vez en siete años" sin hacer referencia a los ingresos y gastos extraordinarios. Sobre el mercado de traspasos, directamente esquivó los motivos reales sobre la salida de Ilkay Gundogan y el fichaje de Dani Olmo.

¿A tiro del 1-1?

En primer lugar, la falacia del 1-1. Después de buscar por tierra, mar y aire ingresos para inscribir a Dani Olmo con la Liga ya comenzada, una aseveración tan categórica como "no hemos llegado al 1-1 porque no hemos querido" no se ajusta a la realidad. El Barça tenía el Fair Play bloqueado por la patronal porque ni siquiera había podido resolver el vencimiento de 60 millones de Barça Studios --ahora Barça Vision-- en junio de 2024.

Laporta invirtió los roles con Nike ante los medios, el salvador del 1-1, representando que el club azulgrana tenía la sartén por el mango. Nada más lejos de la realidad. La marca estadounidense negocia con una resolución judicial favorable que impidió al FC Barcelona rescindir unilateralmente el contrato. La alianza con su main sponsor también prohíbe a la junta directiva sondear otras empresas para el equipamiento deportivo hasta 2026. Una vez llegada dicha fecha, la sociedad ubicada en Oregón gozará de derecho de tanteo sobre cualquier otra oferta.

Por lo tanto, Nike no tiene prisa alguna en rascarse el bolsillo y sellar una extensión de contrato presuntamente encarrilada. Tiene dos años de margen para modificar las condiciones. Por contra, la prisa impera en can Barça. Joan Laporta confía en que fructifique durante el mes de octubre, ya que es el camino más directo hacia el 1-1. El tiempo dirá. Por el momento, no se ha sellado porque la junta esperaba obtener "mejor resultado" de las condiciones sobre la mesa, que ya representaban "el mejor contrato del mundo del fútbol".

Los beneficios esperados

Segundo, la proclama de presentar ingresos ordinarios positivos. "Este año el presupuesto ordinario del club dará positivo", anunció el president en la Reunió del Senat de junio. Una afirmación cierta, y que mantuvo posteriormente en respuesta a Culemanía. No se trata de ninguna mentira, pues las cifras positivas se sustentan en el récord de patrocinadores y de facturación de Barça Licensing & Merchandising (BLM). Sin embargo, elude otra realidad todavía desconocida hasta el cierre y posterior publicación de las cuentas: los números totales, que pueden ser negativos en habida cuenta de los ingresos y gastos extraordinarios.

La camiseta oficial de Nike para el 125 aniversario del Barça FCB

Los 15 millones de euros pendientes de inyectar en Barça Studios y el bloqueo de 18 millones de Nike a la institución catalana amenazan el triunfo total en las cuentas anuales. El nuevo contrato de equipamiento deportivo no formará parte de la radiografía financiera de final de curso, pero sí que condicionará el importe actualmente retenido por la multinacional estadounidense, estipulado en el presupuesto. Tampoco ayudan en el cómputo global de desembolsos los intereses financieros relativos a los créditos de Goldman Sachs.

La salida de Gundogan

En lo referente al mercado de fichajes, el dirigente barcelonés achacó la salida de Ilkay Gundogan a motivos estrictamente deportivos: "Es una decisión deportiva, del Barça, de Gundogan y del City porque lo ha recuperado. (...) Ha tenido un impacto económico pero la razón ha sido una decisión deportiva".

Ilkay Gundogan aparece ante los culés en el Estadi Olímpic de Montjuïc antes del Gamper FCB

Lo cierto es que Deco debía adquirir unos compromisos con la Liga para desbloquear el Fair Play generado. Como el caso Nike se demoró más de lo previsto inicialmente, el director del área de fútbol se puso las pilas con la operación salida y rebajó la masa salarial entre 170 y 180 millones: "Ha doblado con creces lo que pedía la Liga". El esfuerzo titánico ha reducido el agujero de Barça Studios hasta los 20 millones, pero todavía restan unos 60 kilos hasta el 1-1.

Los emolumentos brutos de Gundogan para su segundo año de vinculación superaban los 15 millones brutos. En términos deportivos, a largo plazo se consideraba la baja menos sensible de la mediapunta con 33 años. Aun así, sin Nike, el Barça necesitaba apurar sus opciones de inscribir a Dani Olmo antes de constatar la baja de Andreas Christensen. El aspecto económico decantó la balanza sobre el volante alemán, que en su mensaje de despedida ya había desdicho al mandatario catalán: "Ahora me voy en una situación difícil, pero si mi marcha puede ayudar económicamente al club, eso me hace sentir un poco menos triste".

¿Olmo por delante de Nico?

Por último, la joya de la corona del discurso: Dani Olmo. A la postre, el regreso del canterano azulgrana ha resultado ser el refuerzo idóneo para la plantilla que dirige Hansi Flick. No obstante, el Barça no movió ni un dedo inicialmente hasta sufrir el desdén de Nico Williams, sin las garantías necesarias para su inscripción. La cláusula de 60 millones del atacante egarense venció el 20 de julio sin noticias del Barça. Laporta se había obcecado en traer al extremo del Athletic Club, una de las grandes sensaciones de España en la Eurocopa.

Nico Williams, en su llegada a la concentración de la selección española EFE

Tras arrojar la toalla por su primer objetivo Deco activó la maquinaria de un plan B que defendió a capa y espada. Como ya desvelamos en Culemanía, el director deportivo oriundo de Brasil se había "enamorado de Dani". "Insistió muchísimo en cerrar la operación. La ha tenido muy clara todo el tiempo. Lo veía como un jugador 4x1, capaz de participar en las 4 posiciones de ataque".

Dani Olmo, con la camiseta negra FCB

No andaba desencaminado el exrepresentante de Raphinha. Con esto, Laporta renegó en rueda de prensa de Nico Williams y cualquier futurible que no se llamase Dani Olmo. "Era la prioridad deportiva y se ha coseguido", presumió Laporta en el Auditori 1899. De todos, el segundo plato ha sabido mejor que cualquier otra delicatessen. Si el fichaje estrella no quita el pie del acelerador y las operaciones de Nike y Barça Studios prosperan en los próximos cuatro meses, Jan daría con la tecla para reconquistar al barcelonismo desencantado. El plan para salir victorioso de unas nuevas elecciones ya está en marcha.

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