Joan Laporta está decidido a mantener la misma estrategia de siempre. Ante la fuga de talento, el presidente del FC Barcelona apuesta por soluciones conservadoras: o familiares, o gente amiga y de confianza o mejor no poner a nadie. Más vale dejar todo tal y como está que arriesgarse a que un desconocido alcance a saber demasiado. La decisión del dirigente azulgrana, por ahora, es clara. No se incorporará ni ascenderá a nadie para ocupar el vacío que deja Eduard Romeu como vicepresidente económico.
Según ha podido saber Culemanía, y tras varios días de sondeo, Laporta ha descartado cubrir el cargo de Romeu en la vicepresidencia. No vendrá nadie de fuera ni se apostará por ninguno de los directivos que forman parte de la junta actual, a pesar de que en la última semana han sonado dos nombres por encima del resto: Àngel Riudalbas y Ferran Olivé.
Riudalbas, un perfil empresarial
Riudalbas es un contrastado empresario con una dilatada experiencia en el sector de los electrodomésticos que ha hecho fortuna en firmas como Taurus. Además de un buen currículum empresarial, también le avala su solvencia económica --todos los vicepresidentes del Barça, salvo Rafa Yuste y Elena Fort, fueron premiados con una vicepresidencia por su capacidad económica para avalar--, cosa que no ocurre con la denominada "guardia pretoriana" del presidente. Menos gustan sus hábitos nocturnos junto a otros miembros de la junta como, especialmente, Xavi Puig.
No ha trascendido el motivo por el que no accederá a la vicepresidencia pero se barajan dos escenarios: o bien, es que él mismo prefiere no asumir un rol tan protagonista en la junta directiva, o bien es que Laporta no lo considera de confianza suficiente como para desempeñar un cargo de tanta responsabilidad. Un aspecto que le avalaría de forma positiva es que fue el directivo que más ayudó a Romeu en la ejecución de los drásticos recortes salariales que se aplicaron en el club el pasado verano. La tijera fue especialmente severa con Barça TV y las secciones, aunque también se recortó mucho la masa salarial del primer equipo.
Olivé, el tesorero de confianza
El otro candidato era Ferran Olivé, la verdadera persona de confianza de Laporta en cuestiones económicas. En este caso es conocido el papel decisivo que el actual tesorero ha tenido en la mayoría de cuestiones delicadas del club. De hecho, es vox populi que a nivel interno mandaba más que el propio Eduard Romeu, cuya relación con él estuvo más marcada por las desavenencias que por la buena sintonía.
Olivé fue el verdadero artífice de las palancas de Laporta, quien negoció en primera instancia el crédito del Espai Barça con Goldman Sachs, el único directivo que se adentró en las complejidades del Fair Play Financiero y, sobre todo, el que lideró los distintos avales que tuvo que presentar la junta directiva ante la Liga a través del Banco Sabadell: el de Koundé en 2022, el de las secciones en junio de 2023 y el de los Joaos en agosto de 2023. Estos dos últimos, por valor de 6 y 12 millones, respectivamente, todavía siguen en vigor y podrían ser ejecutados en verano si el club no cumple con el plan de viabilidad pactado con la Liga.
Romeu y los avales
En el caso de Olivé, es sabido que si no asume la vicepresidencia económica no es debido a una cuestión de confianza por parte de Laporta. Y es que el presidente siempre ha confiado ciegamente las cuestiones económicas en él, especialmente desde que se marchó del club Ferran Reverter. Por lo tanto, es de presumir que si no asume ese cargo es, más bien, porque prefiere pasar desapercibido y no tener un papel protagonista a nivel mediático como el que ostentaba el propio Romeu.
Desde marzo de 2021 ha sido Romeu el encargado de defender ante la asamblea de socios compromisarios los resultados del anterior ejercicio económico y los nuevos presupuestos. En muchos casos, el vicepresidente no había sido el gran artífice de componer los números y no siempre tenía toda la información. Este ha sido uno de los motivos que le han empujado a salir, junto a otro mucho más explícito: cuando quiso pedir un crédito al banco para poder montar su nuevo proyecto profesional como consultor, la entidad bancaria se lo denegó por tener todo su patrimonio bloqueado debido a los avales que presentó el Barça. Otros miembros de la junta directiva andan molestos con Laporta por esta situación y algunos aún le deben dinero al presidente por los intereses derivados de los avales.
Maribel Meléndez ya tiene trabajo
Más allá de la vacante en la vicepresidencia económica, Laporta tampoco parece dispuesto a reforzar el comité de dirección antes del 30 de junio. Tras la dimisión sonada de Maribel Meléndez, el club anunció que Manel del Río, director financiero del Barça, asumiría las funciones de esta. No se comunicó intención de reforzar a Del Río con nuevos fichajes y no se esperan novedades en este sentido.
El caso de Maribel Meléndez, que llegó al Barça de la mano de Ferran Reverter, es especialmente llamativo. Alegó "motivos personales" para dejar el cargo, pero tan solo 20 días después de salir del club ya ha sido anunciada como nueva directora corporativa de la firma Renta Corporación, vinculada al sector de la construcción. Parece ser que la alta ejecutiva necesitaba un cambio de manera urgente tras asumir toda la responsabilidad con el Espai Barça, el crédito de Goldman Sachs y unos presupuestos que van 37 millones de euros por debajo de las previsiones.
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