Isabel II cumple 95 años este miércoles sin su marido, el duque de Edimburgo, el gran apoyo en sus casi 70 años como jefa del Estado británico. El príncipe Felipe falleció el pasado día 9 de abril a los 99 años.
A causa de la pandemia, la reina permanece en el castillo de Windsor, a las afueras de Londres, donde el pasado sábado tuvo lugar el solemne funeral del duque. Con la muerte del príncipe Felipe, su confidente y asesor, Isabel II continúa sola los últimos años de su reinado, uno de los más importantes y el más largo de la historia del Reino Unido.
Transición
Respetada y admirada por todos, la reina está en el periodo de transición de la monarquía, iniciado hace unos años al dejar de viajar al extranjero y ver reducidos sus compromisos oficiales debido a su avanzada edad. El príncipe Carlos, heredero al trono, y el duque de Cambridge, segundo en la línea de sucesión, han dado un paso al frente al representar a la soberana en visitas oficiales al exterior o en algunas de sus funciones en territorio británico.
Según los expertos, la muerte del duque de Edimburgo, y la retirada de Harry, el duque de Sussex (hijo del príncipe Carlos y Diana de Gales) de la monarquía, pueden acelerar la transición, si bien Isabel II se comprometió antes de asumir el trono a no abdicar jamás.
Polémica
La retirada de los duques de Sussex de la casa real británica y la polémica entrevista que la pareja concedió a la presentadora estadounidense Oprah Winfrey, el pasado marzo, han provocado una nueva crisis en la familia real.
En esa entrevista, grabada en la casa donde residen en Los Ángeles, los duques llegaron a acusar a la monarquía de racismo y de no haber respondido a la ayuda que Meghan Markle dijo haber pedido a la familia cuando sintió impulsos casi suicidas.
Mala relación
Las fricciones entre el príncipe Harry y su padre fueron claramente visibles en el funeral del duque de Edimburgo, al no observarse diálogo entre ellos al término del servicio. Sin embargo, Guillermo y Harry sí que hablaron.
El diario The Daily Telegraph ha afirmado que el príncipe Harry se reunió el sábado, después del funeral, con su padre, su hermano y la duquesa de Cambridge en Frogmore Cottage, la casa ubicada en Windsor. Según la prensa, los cuatro hablaron durante dos horas, pero sin avances positivos, ya que el príncipe Carlos no acepta que su hijo menor haya utilizado una entrevista por televisión para airear los problemas de la familia.