Playa del Trabucador

Playa del Trabucador GOOGLE

Curiosidades

Un paraíso entre dos playas: así es el precioso pueblo catalán de la costa del Mediterráneo

Un desierto de 6,5 kilómetros de largo que contiene dos calas en una frente a uno de los pueblos más meridionales de la comunidad

8 enero, 2024 09:52

Noticias relacionadas

Hay una playa en Cataluña que tiene aires de Miami, pero en mejor. No lo decimos por chovinismo, se trata de una extensa península en forma de playa situada enfrente de Sant Carles de la Ràpita. Como los cayos de Miami Beach del continente americano.

El lugar no puede estar más fuera del mundo. Se trata de una lengua de arena que se extiende al final del río Ebro y que, con el viento que sopla, hace creer al visitante que se encuentra casi en el fin del mundo. Tal vez, el inicio del paraíso.

Cómo llegar

El transporte público no llega y andar desde el pueblo más cercano puede suponer muchas horas al sol. El vehículo privado es la opción perfecta y el trayecto puede hacer las delicias de los amantes de la naturaleza.

Si uno llega por la AP-7 debe salir en Amposta, tomar la N-340 y en el desvío para ir a Sant Jaume d’Enveja/Els Monells ir por la TV-3405. Esta carretera no se deja casi hasta su final, cuando se gira a mano derecha por el camí de Baladres hasta el destino.

El cielo en la tierra

No es una exageración. De camino a la playa del Trabucador, el visitante va a encontrar de lado a lado de la carretera una gran cantidad de arrozales. Cuando están cargados de agua y, a determinadas horas del día, son auténticas balsas de aceite donde se refleja el cielo y da la sensación que hay un trozo de éste en la tierra.

Playa del Trabucador

Playa del Trabucador GOOGLE

La imagen es increíble. Por eso, muchos conductores tratan de detenerse en alguna parte del camino para tener fotos del momento, otros graban desde el vehículo y otros amainan la velocidad de crucero para disfrutar de las vistas.

La playa

Al final del camí de Baladres, uno puede dejar el coche en un parking de tierra y a cielo abierto. Una vez bajas del vehículo, sólo hace falta mirar a ambos lados y sentirse rodeado por el Mediterráneo, mientras una larga lengua de arena se extiende al frente.

El Trobador son dos playas en una, divididas por un desierto de arena de 6,5 kilómetros de largo. Un lugar ideal para los amantes de los largos paseos por los parques naturales como el del Delta del Ebro o de los que practican wind y kite surf. El viento sopla fuerte por esos lares.

Relax

En el lado que no da al Mediterráneo y mira a Sant Carles de la Ràpita, el agua está más en calma. Es ideal para familias que necesitan un ambiente más relajado.

Lo que sí es necesario saber es que en temporada de verano, especialmente en julio y agosto, se llena de bastante gente y más en fin de semana. Y es que los atardeceres allí son de otro mundo.