El Hotel Arts arroja dividendos de 26 millones en dos años
El famoso rascacielos del puerto olímpico está valorado en 230 millones de euros y pertenece al Gobierno de Singapur
10 mayo, 2021 00:00La compañía Hotel de la Villa Olímpica SA (Hovisa), titular del Hotel Arts, repartió entre 2018 y 2019 unos dividendos de 26 millones, a razón de 23,5 millones el primer año y 2,5 el segundo.
Los receptores de esos fondos son dos sociedades instrumentales domiciliadas en Holanda, que se reparten por mitades el capital de Hovisa. Se trata de Banzai Venture Investments I y Banzai Venture Investments II. Ambas pertenecen por entero al brazo financiero del Gobierno de Singapur.
Ritz Carlton
Hovisa aloja en su balance un activo principal, el rascacielos del Hotel Arts sito en el puerto olímpico de Barcelona, más algunos locales comerciales en las inmediaciones. El valor en libros del edificio del Arts asciende a 230 millones.
De la explotación del establecimiento se encarga Luxury Hotels International of Spain (exRitz Carlton España), firma con la que Hovisa tiene suscrito un contrato de gestión desde hace más de veinte años.
Ganancias
En virtud de dicho acuerdo, Hovisa alcanzó en 2019 una facturación de 84 millones. Las habitaciones aportaron 51 millones, los restaurantes contribuyeron con 29 millones y el resto provino de convenciones y otros servicios.
La empresa declaró un beneficio de 13,7 millones, algo inferior al del ejercicio anterior.
Desplome de las ventas
El hotel tuvo que cerrar sus puertas en el intervalo marzo-junio, como consecuencia del confinamiento. La clausura se acompañó de un expediente de regulación para la práctica totalidad de la plantilla, salvo algunos empleados de mantenimiento y administración.
Volvió a levantar la persiana el 15 de julio. En el conjunto del ejercicio 2020, Hovisa registró una caída de sus ingresos del 65%.
Pasivos
La entidad debe a la banca 225 millones. Durante la vigencia del préstamo, formalizado en 2017, solo abona intereses. Todo el capital se amortizará mediante un solo pago en diciembre de 2022.
Dado el desplome del giro y los resultados, el año pasado no pudo cumplir los ratios mínimos fijados en el contrato del crédito.
Apoyo de Singapur
Por ello, solicitó una dispensa al banco prestamista y éste se la concedió hasta el 30 de junio próximo.
En todo caso, Hovisa dispone de una sólida posición de tesorería y cuenta con el respaldo de sus accionistas, que en última instancia es el opulento estado de Singapur.
Historia agitada
Hovisa ha logrado una alta rentabilidad durante los últimos años. Pero no siempre fue así. Los orígenes de la compañía se remontan a finales de los años 80. En sus inicios contaba con dos socios, el visionario hombre de negocios norteamericano Ware Travelstead y la firma japonesa de centros comerciales de lujo Sogo.
La construcción del edificio sufrió innumerables problemas y retrasos. El presupuesto inicial, cifrado en 270 millones, se acabó disparando hasta el doble de esa suma, es decir, 540 millones.
Fallido abultado
El hotel de superlujo se inauguró a trancas y barrancas para los juegos olímpicos de 1992. Pero poco después, Hovisa entraba en suspensión de pagos sepultada bajo la losa de un pasivo de 360 millones.
Finalmente, la matriz japonesa de Sogo instó también la quiebra en su país. El interventor judicial del fallido en Japón decidió sacar a subasta los activos de Sogo en el extranjero, entre ellos el Arts, que a la sazón acumulaba unas pérdidas de 400 millones.
Deutsche Bank y Patron Capital
El abogado barcelonés Javier Faus, hoy presidente del Círculo de Economía, actuó de asesor de Travelstead durante su estancia en Barcelona.
A raíz de la crisis del Arts, Faus articuló un consorcio inversor del que formaban parte Deutsche Bank y el fondo americano Patron Capital, y adquirió el edificio mediante el desembolso de 285 millones.
En 2006, Deutsche y Patron propinaron el trasvase de Hovisa a favor de las firmas de Banzai, de Singapur, por 417 millones.