El expresidente de Pimec fracasa en su intento de tomar el control de los cónsules de Barcelona
Josep Lluís Rovira, exvicepresidente de Grup Sifu y cónsul de Estonia, no logra candidatura y acaba protestando en vano ante la indiferencia de la asamblea
21 marzo, 2024 00:00Noticias relacionadas
El expresidente de Pimec ha fracasado en su intento de tomar el control del Cuerpo Consular de Barcelona. El empresario Josep Lluís Rovira, exvicepresidente de Grup Sifu y ahora cónsul de Estonia, no ha logrado armar una candidatura crítica, como quería. En la asamblea que encumbró a la lista del cónsul de Israel como ganadora, Rovira incluso protestó ante la indiferencia del resto de legados.
Lo detallan fuentes diplomáticas, que explican que Rovira, que se postuló inicialmente como secretario general del ente con candidatura propia, pero no ha conseguido suficientes apoyos entre el centenar de representantes de estados. Ante ello, y al ver que Yosef David Sánchez-Molina sí lo lograba y su propuesta era elegida, mostró su disconformidad.
Caso omiso
Ocurrió en la asamblea celebrada ayer en el Ilustre Colegio de Abogados de Barcelona (Icab). Rovira, también exconsejero de Avalis y cofundador de The Baltic General Investment Corporation junto al excónsul de Letonia Xavier Vinyals -expresidente de la Plataforma ProSeleccions Catalanes y arrestado en el marco del caso Voloh-, intentó "introducir el asunto del conflicto palestino en la reunión".
Ante ello, diversas voces de legados se alzaron para recordarle que la Convención de Viena -que regula el papel de los cónsules- no permite a éstos inmiscuirse en política ni hacer manifestaciones de este cariz. Esta competencia se reserva a las embajadas.
Llegado el momento y ante el escaso éxito de su iniciativa, según las fuentes consultadas, el cónsul de Estonia ha afeado a los presentes que "le hayan dejado solo".
Felicitaciones
Pasado ese pequeño lance, el resto de asistentes sí felicitaron al nuevo comité ejecutivo encabezado por Sánchez-Molina en la secretaría general y Artem Vorobyov, cónsul de Ucrania, en el decanato.
Uno de los que se pronunció a favor de la nueva junta fue Josep Maria Jové, representante de Austria. Hubo más, que loaron la tarea desempeñada por el comité ejecutivo saliente, del que el nuevo recoge el testigo en clave de continuidad.
Enésima polémica
La reacción del cónsul de Estonia ayer llega después de que el legado verbalizara algunas boutades controvertidas que le han cortado un carácter peculiar dentro del Cuerpo Consular de Barcelona.
Otros representantes han aprendido del "fuerte carácter" que le atribuyen, algo que, a la postre, le podría haber pasado factura a la hora de confeccionar una candidatura.
Nueva etapa
El nuevo comité ejecutivo del Cuerpo Consular tendrá el reto de abrir un nuevo capítulo productivo y en clave positiva en el influyente organismo. En los últimos años, la institución ha pagado dos polémicas. La mayor de ellas son las hebras de un presunto caso judicial de blanqueo que afectó a José Luis López -excónsul de Mali- y Josep Maria Calmet -Albania-, que fue además secretario general.
Antes, el ente fue zozobrado por otra polémica exógena: el procés independentista en Cataluña. El Ministerio de Exteriores se vio obligado a sancionar con la retirada de la credencial o execuátur a seis legados. Se habían posicionado de una manera u otra en el entorno del movimiento nacionalista radical.
Con las elecciones celebradas ayer y la victoria de la lista de Sánchez-Molina, se estrena un nuevo capítulo que deberá reconstruir y reforzar la reputación de un cuerpo que, a menudo, es interlocutor de las administraciones públicas.