Pimec cedió sus trabajadores a Uatae para cobrar subvenciones de forma ilícita al inflar su representatividad
La justicia investiga un certificado firmado por el secretario general de la patronal de pymes, Josep Ginesta, que permitió a la organización de autónomos aparentar que tenía en plantilla a los empleados de la organización catalana
29 febrero, 2024 00:00Noticias relacionadas
Pimec, patronal de la micro, pequeña y mediana empresa de Cataluña, habría facilitado que la Unión de Asociaciones de Trabajadores Autónomos y Emprendedores (Uatae) cobrara de forma indebida subvenciones al permitir contabilizarse como propios a sus trabajadores. No sólo los contratados de forma directa por la patronal, también los de Autònoms Pimec, hecho que convirtió a la organización próxima a Podemos y Sumar en la más representativa del sector en 2011, por delante de ATA y Upta.
Lo segundo fue completamente legal, ya que ambas están constituidas como organizaciones de autónomos y su colaboración implica que Autònoms Pimec se convirtiera en filial territorial de Uatae, señalan fuentes de la investigación. Pero Pimec, como patronal, no podía hacer esta cesión de fuerza laboral por su naturaleza jurídica.
Maniobra para inflar la representatividad
Pimec patronal representa a los trabajadores por cuenta propia, sí, pero también a pymes e incluso podría hacer lo propio con grandes empresas si sus preceptos fundacionales lo contemplaran. La normativa vigente en el país la habilita para colaborar con entidades de autónomos y dinamizar juntos este tipo de actividad, pero no para simular que la organización menor tenga más fuerza en su sector con el fin de percibir ayudas públicas. Es decir, para inflar su representatividad.
El Juzgado de Instrucción número 17 de Madrid investiga en la causa que implica a Pimec la maniobra que, precisamente, consigue esta simulación de organización con más peso que el real. Las pesquisas iniciales consideran que, gracias a esta cesión de trabajadores de la patronal de pymes catalana, Uatae percibió la principal ayuda pública de economía social del sector que el Ministerio de Trabajo otorgó en 2011.
Se elevó a los 266.123,10 euros. Que hubo fraude lo ha reconocido la propia organización de autónomos investigada. Ha reembolsado más de 133.000 euros al erario por un “error administrativo” detectado, según su justificación pública. La acción mitigaría posibles consecuencias penales del acto ilícito, mantienen las mismas fuentes de la investigación.
Los tres certificados emitidos por Pimec
La acusación de que Pimec participó de forma activa en esta maniobra ilícita se basa en tres certificados que están incluidos en la instrucción. Los tres fueron firmados el mismo día, el 30 de julio de 2021. El primero de ellos lo ratifica la presidenta de Autònoms Pimec, Elisabet Bach Oller. El documento asegura que la “Asociación Autònoms Pimec a todos los efectos mantiene un acuerdo de colaboración con Uatae” y notifica que la entidad “cuenta con afiliados o asociados pertenecientes, al menos a tres sectores de entre los de agricultura, industria, construcción y servicios”.
El segundo, igualmente legal, lo firma el presidente de la patronal Pimec, Antoni Cañete. Se limita a asegurar que “los trabajadores autónomos asociados a Pimec pertenecen a tres sectores de entre los de agricultura, industria, construcción y servicios”.
Josep Ginesta, imputado
El problema aparece en el tercer documento, que ha acabado con la imputación del secretario general de Pimec, Josep Ginesta. En él, se afirma que “Pimec, a todos los efectos, se encuentra integrada y asociada a Uatae” y que “los trabajadores autónomos asociados a Pimec pertenecen al menos a tres sectores de entre los de agricultura, industria, construcción y servicios”. Habla en todo momento, incluso en el CIF que incluye en el certificado, en nombre de la patronal.
La fiscalía considera probado que los tres documentos fueron creados ad hoc para que Uatae aparentara ser una entidad de más tamaño en el proceso de concurrencia pública para solicitar ayudas del ministerio. Cabe recordar que las ayudas públicas para dinamizar el trabajo autónomo se reparten en base a la fuerza que tienen las organizaciones en el sector. Es decir, su representatividad. Y, para medirla, los parámetros que se consideran más neutrales son contabilizar el número de trabajadores que están en la sede central y las territoriales, el número de oficinas y demostrar que son intersectoriales.
Precisamente, lo que hicieron Bach, Cañete y Ginesta en los tres certificados que firmaron el mismo día en la sede de Pimec y Autònoms Pimec, en la calle Viladomat de Barcelona. Y el grueso de la plantilla que permitió a Uatae convertirse en la organización de su sector más importante de España (y cobrar por ello) eran, en realidad, de la patronal de pymes catalana.
Información sensible de la plantilla de Pimec
Las pesquisas iniciales de la causa dan credibilidad a los tres documentos por la información que Pimec remitió a Uatae para que la aportara al Ministerio de Trabajo en la tramitación de la subvención de economía social de 2011. Y van más allá de estos tres certificados.
La organización de autónomos de Madrid tenía en su poder todos los datos de los asalariados de la patronal de pymes catalana. Sus nombres, sus DNI, las nóminas que cobraban y los llamados TC2. Es decir, información que sólo está en poder de la empresa contratante y de la Seguridad Social, y que tiene una protección jurídica especial por la naturaleza de sus datos.
Quién cedió los datos de Pimec
Se trata de información sensible que se considera harto difícil que Uatae pudiera falsificar, por lo que se apunta a que se entregó desde Pimec de forma voluntaria. Las pesquisas iniciales señalan a Ginesta, que se incorporó a la patronal catalana de pymes ocho meses antes de la maniobra investigada.
Era el número dos de la consejería de Treball de la Generalitat con Dolors Bassa y siguió en el departamento tras la entrada en la cárcel de la sindicalista en el marco del juicio del procés. Militante de ERC, Ginesta puso su punto final a su etapa política en noviembre de 2020. Fue cesado de su cargo y, poco después, se unió a Pimec como director del Área de Trabajo de la patronal. En ese momento ya se destacó la buena sintonía que existía entre el republicano, un experto en las relaciones laborales, y Antoni Cañete.
Falsificación de documentos de la Generalitat
Otras fuentes conocedoras de la investigación indican que es poco probable que fuera Ginesta a título individual el que urdiera la maniobra con Uatae. Destacan que llevaba poco en la patronal catalana y que un movimiento de este estilo requiere de una concertación de más personas con responsabilidades estratégicas, aunque remarcan que esto se trata de una conjetura que se tendrá que probar en sede judicial. Sólo constan como investigados en la causa Ginesta y la secretaria general de Uatae, Josefa Landaburu.
Uatae no sólo simuló contar con más representatividad al sumarse de forma ilícita los trabajadores de la patronal Pimec, la investigación judicial también ha sacado a la luz que en el expediente de solicitud de subvenciones de 2011 también se falsificaron certificados de la Generalitat que acreditaban que la patronal era, en verdad, una organización de autónomos. El propio Gobierno catalán ha reconocido que alguien simuló la firma de una funcionaria pública en la documentación incluida en el proceso.
Pimec pasa a la acción y anuncia acciones legales
Por todo esto, las dos organizaciones empresariales están investigadas por un delito de fraude de subvenciones y otro de falsedad documental. Fue el propio Ministerio de Trabajo el que denunció los tejemanejes que detectó y la Fiscalía actuó de oficio. La causa en instrucción es penal, aunque el proceso parte de una denuncia administrativa de ATA por el reparto de ayudas públicas al trabajo autónomo de ese ejercicio.
La cúpula de Pimec ha defendido en todo momento la actuación tanto de la patronal como de todos sus miembros. A preguntas de este medio, sus portavoces han explicado que no han tenido acceso a la totalidad de las diligencias previas del caso hasta este miércoles. "Realizada una primera revisión de la documentación a la que se ha tenido acceso, podemos afirmar que existen documentos facilitados por Pimec a Uatae que han sido claramente alterados o manipulados", remarcan.
Por esto motivo, la patronal catalana pasa a la acción. "Pimec es víctima en toda esta causa y actuará en consecuencia", sentencia. "Teniendo en cuenta que los hechos están en vía judicial, Pimec continuará sus acciones para resolver esta cuestión por esta vía, para defender su honorabilidad y la de todos sus profesionales". La defensa incluye, de este modo, a Ginesta.