Una planta de Cementos Molins
Cementos Molins recibe el OK del Govern a su planta móvil de reciclaje
La compañía ya usa más combustibles alternativos que petróleo en sus hornos de Sant Vicenç dels Horts
5 octubre, 2023 23:30Noticias relacionadas
Cementos Molins ya tiene el aval de la Generalitat para su nuevo proyecto en materia de sostenibilidad. La histórica compañía ha recibido el visto bueno de la Administración autonómica para construir una planta móvil de reciclaje, como explicó ayer el consejero delegado de la histórica empresa, Julio Rodríguez, en el marco de la presentación de sus nuevas oficinas de Sant Vicenç dels Horts (Barcelona).
Esta instalación permitirá a la corporación llevar a cabo tareas de procesamiento de residuos in situ, es decir, allí donde se realicen actividades extractivas. Se trata de una iniciativa enmarcada en los objetivos ambientales de Cementos Molins, que pretende alcanzar la neutralidad climática en 2050 y recortar en un 20% sus emisiones contaminantes en 2030.
'Plan B' al petróleo
De ahí que en los últimos años la cementera haya fomentado los combustibles alternativos al petróleo. En 2022, materiales como madera, neumáticos fuera de uso, los lodos de depuradora o los llamados CDR --siglas de combustibles derivados de residuos, una mezcla de desechos de vertedero-- supusieron el 55% de energía empleada en los hornos.
En términos absolutos, se usaron 95.000 toneladas de combustibles alternativos que supusieron un ahorro de 113.000 toneladas de CO2 emitidas. Estos esfuerzos se han notado sobre todo en la generación de clínker, el producto intermedio entre el crudo y el cemento. Por otro lado, el grupo ha solicitado a la Generalitat una modificación del porcentaje de cada una de estas fuentes en el mix de biomasa empleado con fines térmicos.
Captura de carbono
Cabe recordar que la valorización energética se considera por parte de la Unión Europea una de las mejores técnicas disponibles para hornos de cemento. Por citar dos países líderes, la sustitución de los combustibles fósiles alcanza niveles cercanos al 80% (Austria) y superiores al 70% (Alemania) del total de la energía térmica consumida.
Pero hay retos pendientes. Rodríguez ha lamentado que Cataluña esté retrasada en la tecnología de captura de carbono. "No tenemos un proyecto piloto", ha reconocido. Por eso ha llamado a estrechar lazos entre privados y públicos con el fin de superar esta laguna.
Beneficios en 2022
Las innovaciones de Cementos Molins en este apartado no han hecho mella en las cuentas de resultados. En 2022, la empresa ganó 80 millones de euros, un 40% más que el año anterior, pese a la caída de la obra pública y el encarecimiento de los costes del sector.
De hecho, la patronal catalana del ramo, Ciment Català, lleva tiempo reivindicando que la licitación pública y privada están muy por detrás de los países del entorno.
Centro de control de la fábrica de Cementos Molins en Sant Vicenç dels Horts (Barcelona)
El sector, en guardia
En 2022, se usó en España el mismo volumen de cemento que en 2012, entre dos y tres millones de toneladas. Ello pese a que en este periodo el Producto Interior Bruto (PIB) aumentó cerca de un 20%.
A su juicio, esta coyuntura pone en riesgo la viabilidad de las fábricas radicadas en la región. Las compañías representadas por Ciment Català --Cementos Molins, Cemex, Lafarge y Cementos Portland, filial de FCC-- esperan que el nuevo mecanismo de ajuste en frontera por carbono, que entró en vigor la semana pasada, beneficie a los productores locales y ayude a superar el estancamiento de la industria.
