La reactivación económica ya está aquí, a la espera del turismo
El grueso de la economía se ha puesto en marcha, con crecimientos robustos, lastrados por el 14% que representa el turismo, y que se recuperará de forma progresiva
26 abril, 2021 00:00Las empresas estarán pendientes del final de los ERTE, y algunos sectores deberán reestructurarse, como ya está haciendo la banca. Pero esto estaba ya latente y depende de un proceso que se ha acelerado con la pandemia del Covid. La reactivación económica, a pesar de todo eso, que no será menor, ya está aquí y los servicios de estudio de las compañías y los expertos así lo corroboran. Eso sí, habrá que esperar al turismo, que no se podrá recuperar de forma inmediata.
La vicepresidenta Nadia Calviño se ha visto forzada a cambiar las previsiones de crecimiento, y ahora quiere ser prudente, con un crecimiento del 6,5% del PIB para 2021, pero un 7% para 2022. Sin embargo, todo dependerá de la campaña de vacunación y si ésta es exitosa, este mismo verano se podría producir un crecimiento vigoroso, aupado por los elementos psicológicos que la economía no puede perder nunca de vista.
Sentimiento económico
La Cámara de Comercio de Alemania, que agrupa a las principales empresas multinacionales alemanas radicadas en España anticipan una etapa de crecimiento, que ya notan en la cartera de pedidos. La previsión es aumentar inversiones e incrementar plantillas, aunque siempre sujetos a un posible paso atrás por la pandemia, que ahora no se prevé.
El analista internacional de Funcas, Raymond Torres no duda en señalar que el crecimiento ya está aquí. El índice PMI de gestores de compra se incrementó en marzo para superar el umbral de 50, que indica que la economía ha vuelto a crecer con fuerza. Y el índice de sentimiento económico, una medida de las expectativas, rebotó en marzo para alcanzar el valor máximo desde la crisis, según apunta Torres.
Hay otros datos, y depende de dónde se ponga el acento. En marzo, insiste Torres, se crearon 31.000 empleos efectivos, el incremento del número de afiliados que trabajan, y que no están en ERTE o en otra situación. Y también se puede fijar la atención en las reservas hoteleras que se registran en el portal Sojern, que no deja de repuntar desde inicios del mes de abril.
El plan expansivo de Biden
El economista Joan Ramon Rovira, responsable del servicio de estudios de la Cámara de Comercio de Barcelona, respira optimismo. “Habrá un crecimiento este año por encima del 6%, y es cierto que el primer trimestre se pensaba que sería algo mejor, pero los efectos de la pandemia todavía han estado presentes”. Ese crecimiento, sin embargo, podría ser mayor, porque nadie contaba con un plan tan expansivo como el que ha puesto en marcha el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, que tira de toda la economía mundial. De rebote, eso incidirá en la economía alemana, de la cual España depende en gran medida, principalmente el sector industrial y el sector exterior, con un aumento de las exportaciones.
Rovira explica que la economía se ha recuperado, en cuanto al empleo, en un porcentaje cercano al 92%. Es decir, se ha perdido un 8% del empleo, por ahora, y un 10% del PIB, en comparación con la etapa anterior a la pandemia. Y esos datos tienen mucho que ver con el sector turístico, y todo lo que conlleva, que es el gran damnificado por el parón económico y el cierre de fronteras.
Rovira considera que esa recuperación se deberá abordar en dos o tres tiempos. Este mismo verano, pero, principalmente, en el verano de 2022.
Las sombras y el plan europeo
En ese lapso habrá dos sectores que se recuperarán antes, el industrial y la construcción, según Torres, que ve indicadores en ese sentido. Es cierto que hay algunas sombras, que el propio responsable de análisis internacional de Funcas señala: “Queda camino por recorrer para hablar de una recuperación sostenida, porque muchas empresas atraviesan una situación financiera complicada, con las familias, que han ahorrado mucho, pero serán cautelosas con sus compras, y luego está un posible cuello de botella que es el aumento de los costes de producción por los semiconductores o determinados metales”. En paralelo a eso está el plan de recuperación europea, y el efecto “tractor” que se puede generar y las reformas que se acometan y que podrían absorber a los trabajadores que pierdan el empleo en el corto plazo.
El economista y profesor de la UB, Gonzalo Bernardos, se agarra, precisamente, a ese plan europeo. Y tiene claro que los fondos pueden permitir que España se suba al tren de la recuperación, que le permitan dar un salto importante. “A diferencia de los recibidos desde 1986, su destino no será financiar principalmente la construcción de infraestructuras, sino dos actividades con previsiblemente mayor impacto sobre la productividad y el PIB: la transición ecológica y digital. A ellas deberemos destinar, obligados por Bruselas, como mínimo el 37% y 20%, respectivamente, del capital recibido”.
El plan de Estados Unidos no se puede dejar de lado. Ni tampoco las medidas en política impositiva que impulsa la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, porque, a juicio de Bernardos, pueden aportar muchos recursos a las administraciones a partir el incremento del impuesto de Sociedades a muchas grandes corporaciones.
Las dudas sobre el futuro del turismo
Pero, ¿y el turismo? La pregunta de todos los economistas y servicios de estudios, como el del Banco de España, hace referencia a la necesidad imperiosa de que España compense el 14% del PIB del turismo con otros sectores. El turismo no perderá ese porcentaje de forma abrupta, pero tampoco lo recuperará en su totalidad. Es lo que considera el analista en el sector, Javier Blanco, que fue viceconsejero de Turismo del Gobierno vasco y que participó en la exitosa campaña turística bajo el lema Ven y cuéntalo, que todavía se recuerda. “Es muy difícil hacer cualquier pronóstico sobre el turismo, porque ni en países como Australia o Nueva Zelanda, con una incidencia muy menor del covid, el turismo casi no se ha recuperado. Es una cuestión que afecta al país receptor, pero también a los emisores”.
Blanco confía en el “enorme poder de atracción de España”, que tiene un sector “robusto”, y con una variedad de destinos muy grande. Pero, ¿el turista será el mismo? “Puede haber un cambio de hábitos, o la idea de que no se puede gastar el mismo dinero en viajes. Es pronto para decir que España recuperará en dos o tres años el nivel de turistas. Y luego surge otra preguna, ¿querremos el mismo volumen, los ochenta millones que se había alcanzado?”
El peso en el PIB de países que están en la cúspide del sector, como España, no es tan elevado. Para Francia, el turismo representa el 8% de su PIB, y para Estados Unidos es el 8,6%. ¿Qué podría hacer España? Es lo que el propio sector debe responder, aunque a corto plazo necesite recuperar, este mismo verano, el máximo número posible de turistas. Ese es, en todo caso, el gran obstáculo para la recuperación plena de la economía española, que ya está en marcha.