La sociedad civil toma el mando frente a la italianización de Cataluña

Foment del Treball, Pimec, UGT, CCOO, el Círculo de Economía y entidades sociales llevan meses con una colaboración estrecha, al margen ya del Govern, ante lo que entienden como una “italianización” de Cataluña, y que tiene una imagen ilustrativa: el vicepresidente Pere Aragonès y la portavoz del Govern, Meritxell Budó, anunciando la nueva fecha de las elecciones, el 30 de mayo, con todos los agentes económicos y sociales en contra de que se hayan aplazado las del 14F.

Pactos transversales

La sociedad civil, débil, que ha sido superada por los acontecimientos en los últimos años, ha alzado la voz. Existe una “enorme sintonía” entre patronales y sindicatos, que puede llevar a finales de enero a un nuevo acuerdo interprofesional, con medidas que pueden tener un carácter duradero. En todos los meses de pandemia, empresarios y sindicatos han ultimado hasta cuatro grandes acuerdos sobre teletrabajo y seguridad en las empresas y reclaman, en los próximos meses y años, “pactos transversales” que puedan llevar a Cataluña a dar un salto de calidad en el sistema productivo, a partir de los fondos europeos.

El presidente de Foment del Treball, Josep Sánchez Llibre / EP

¿Y el Gobierno catalán? Está, es “correcto”, pero “no concreta nada ni impulsa nada”. Son palabras de las patronales y también de los sindicatos, que han mostrado su indignación con la prórroga de las elecciones, porque entienden que “se puede perder todo un año, un ejercicio que será vital, con los fondos europeos y la necesidad de salvar todas las empresas que se puedan”.

Movilización empresarial en la calle

Los nuevos hombres del momento, los que buscan salidas, surgen de ese tejido económico: Josep Sánchez Llibre, en Foment; Josep González y Antonio Cañete, en Pimec; Javier Pacheco, en CCOO y Camil Ros y Matías Carnero, en UGT; además de Javier Faus en el Círculo de Economía o Antonio Delgado al frente del Círculo Ecuestre, que no ceja en impulsar iniciativas para que Barcelona recupere su impulso internacional.

Una de las más activas, al margen de Josep Sánchez Llibre, que ha decidido lanzar propuestas de forma continua --Pablo Casado ha hecho suya la idea de inyectar hasta 50.000 millones de euros en las empresas-- es Pimec. La patronal de las pequeñas y medianas empresas, las más afectadas por la pandemia --restauración, hostelería, gimnasios, entidades deportivas...-- iniciará en las próximas semanas una fuerte movilización social para hacer ver que todo ese tejido económico “está en las últimas y no puede aguantar más”.

Acabar con la polarización

El presidente del Círculo de Economía señalaba esta semana en un encuentro con Pimec y sindicatos que el “ruido político” impide que puedan cristalizar más acuerdos y que se apueste, realmente, por proyectos de colaboración público-privada. Sin embargo, pese a la “inoperancia” del Govern, según apuntan los propios sindicatos, se ha creado un nuevo clima en el que imperan las ayudas mutuas. “La pandemia del Covid ha posibilitado más encuentros y ha sensibilizado a todo ese tejido empresarial”, señala un miembro de la clase empresarial, que entiende que con los fondos europeos se debería abrir también “una profunda reflexión en el mundo político de que ya no es el momento de polarizar más ni de buscar los intereses particulares”.

La figura del vicepresidente Pere Aragonès, que ha tratado con todo ese mundo económico en los últimos años, se valora por su “corrección”, por su saber estar, a mucha distancia de los presidentes de la Generalitat anteriores, como Carles Puigdemont o Quim Torra, que “ni sabían ni tenían ningún interés” por las necesidades empresariales. Pero más allá de esa corrección, “no se aprecia nada concreto, con muy pocas acciones y con poca valentía”, señalan las mismas fuentes.

Italia como fantasma

El proceso guarda similitudes con Italia. Justo ahora, bajo el mandato de Giuseppe Conte, la decisión de Mateo Renzi de retirar su apoyo el Ejecutivo puede derivar en una crisis de grandes dimensiones. Esa permanente inestabilidad política de Italia se vio compensada durante años por una fuerte sociedad civil y empresarial, por un tejido económico que ha vivido al margen. Pero eso tiene consecuencias. El poder político tiene la responsabilidad de mirar a corto, pero también a medio plazo, de dibujar horizontes de futuro y poner a toda la sociedad a trabajar por ellos. Y eso no se da en Italia ni tampoco en Cataluña.

Los secretarios generales de CCOO de Cataluña, Javier Pacheco (d) ,y de UGT, Camil Ros (i) / EUROPA PRESS

“¿Cómo se podrá actuar en los próximos meses sin presupuestos, sin poder adaptar los presupuestos del Estado a las necesidades de Cataluña? Permanecer así es un auténtico disparate”, señala un dirigente sindical.

Abismo con las administraciones

Lejos de establecer puentes, de establecer acuerdos transversales, la distancia entre la administración autonómica y los agentes económicos y sociales es cada vez más grande. Y también respecto a la administración local, en relación al Ayuntamiento de Barcelona y a su alcaldesa Ada Colau. Al margen de las distancias en determinados asuntos, como la política de movilidad en la ciudad, lo que irrita al empresariado es que la líder de BComú no quiera tener “ningún contacto”, que no busque “ninguna colaboración”.

El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, en el Círculo de Economía / CdE

Son dos mundos distantes en estos momentos, cuando la pandemia exige, tras las decisiones de ayuda económica que ha impulsado la Comisión Europea, una gestión multilateral, hombro con hombro. Lo que llega será duro para toda la economía europea. Lo señaló en el Círculo de Economía el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, al pedir que se diseñen desde ahora mismo programas de consolidación fiscal y reformas que lleven a mejorar la productividad del conjunto de España.

En Cataluña, en cambio, el Ejecutivo ha decidido “de forma inexplicable, más allá de los intereses partidistas de los partidos del Govern”, paralizar la acción política hasta bien entrado el otoño, teniendo en cuenta que las elecciones serán el 30 de mayo, pero luego hay que formar gobierno y las dificultades ya se antojan que serán enormes.