BlackRock juega al 'monopoly' en Colonial: apuesta 32 millones a que baja tras cobrar el dividendo
El movimiento llega tras la permuta para que el fondo de Qatar aumente al 20% su capital en la inmobiliaria y esta eleve el control sobre su filial francesa Société Foncière Lyonnaise (SFL)
29 octubre, 2018 00:00"De bien nacido es ser agradecido", reza un refrán que BlackRock, la mayor gestora de fondos de inversión del mundo, no parece tener la menor intención de aplicar en el marco de su inversión en la socimi catalana Colonial. Todo lo contrario.
Tras recibir --el pasado mes de junio-- 2,8 millones de dividendo por su 3,65% en la inmobiliaria, la gestora estadounidense decidía operar a corto para buscar ganar un dinero extra con la caída de los títulos de la socimi.
Todo vale para obtener beneficios
Cuando de obtener beneficios se trata, todo vale. Incluso entrar en el enrevesado juego de mantenerse como uno de los accionistas principales en la inmobiliaria que preside Juan José Brugera y, a la vez, destinar parte de la inversión a posiciones cortas, que buscan el beneficio con la caída de la acción. Como si de echar una partida al monopoly se tratara.
Juan José Brugera (i), presidente de Colonial; Pere Viñolas (d), consejero delegado; y Carmina Ganyet, directora general corporativa de la inmobiliaria / CG
En esta operativa acaba de entrar la gestora estadounidense, que coloca el 0,8% del capital de Colonial en apuestas bajistas. Al precio al que actualmente cotiza la socimi --que dirige Pere Viñolas como consejero delegado--, son unos 32 millones de euros los que la gestora ha apostado para que las acciones, en unas semanas, se sitúen por debajo de esos casi 9 euros en los que se mueve estos días.
Mejora del 'rating' y acuerdo con Qatar
El aumento de esta posición bajista, desde el 0,5% notificado en julio a ese 0,8% notificado este martes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), se produce una semana después de que Colonial viera cómo la agencia Standard & Poor’s (S&P) revisara al alza su calificación crediticia. En buena medida, por la localización de sus activos prime en mercados con altas perspectivas de crecimiento y de que la socimi anunciara un acuerdo de permuta con el fondo soberano de Qatar.
Un intercambio de activos que convertirá al fondo qatarí en el primer accionista de la inmobiliaria, con el 20% de su capital. A cambio, la socimi elevará hasta el 80,74% el control sobre su filial francesa Société Foncière Lyonnaise (SFL), cuyo precio de mercado alcanza los 2.330 millones de euros.
Junta extraordinaria de accionistas
Para ratificar esta operación, la socimi ha convocado una junta extraordinaria de accionistas, a celebrar en Madrid el próximo 8 de noviembre. Esta será para autorizar la adquisición de las acciones de SFL y aprobar un aumento de capital no dinerario, para que el fondo de Qatar suscriba los 53,52 millones de acciones nuevas, valoradas en un nominal de casi 134 millones de euros. El 20% del fondo en Colonial tiene actualmente un valor de mercado de 894 millones de euros.
Con esta ampliación, todos los accionistas de referencia de Colonial verán diluida su participación en la socimi. BlackRock pasará del actual 3,65% al 3,19%. También verán mermada su presencia la familia Puig y el magnate mexicano Carlos Fernández, jefe de la cadena de restaurantes La Tagliatella y al frente del holding AmRest, que ultima los preparativos para cotizar en la Bolsa española.
El empresario mexicano Carlos Fernández, dueño del holding AmRest y de La Tagliatella
En el caso del grupo perfumero catalán, su participación en Colonial, a través de la sociedad Inmo, caerá al 6,1%, mientras que el empresario azteca verá cómo su principal inversión en España disminuye desde el 18,38% al 16%. Un paquete valorado en 720 millones de euros.
BlackRock, Dia y Banco Popular
No es la primera vez que BlackRock practica en la Bolsa española el doble juego de ser, simultáneamente, accionista de una empresa cotizada y apostar a que esas acciones bajarán.
Entre 2015 y 2017 lo hizo durante muchos meses tanto en el Banco Popular, propiciando la vertiginosa caída bursátil del banco que acabó siendo rescatado y vendido al Santander en junio del pasado año, como en la cadena de supermercados Dia. Una práctica que, en este caso, desechó por completo a raíz de la entrada en el capital del grupo de distribución del inversor ruso Mikhail Fridman.