Susana Monje presenta preconcurso en la constructora Assignia
La exresponsable económica del Barça reconoce la difícil situación de la sociedad y da el paso para protegerse de los impagos
24 diciembre, 2016 00:00Susana Monje ha solicitado el preconcurso de acreedores de la sociedad con más problemas económicos del Grupo Essentium, la compañía que preside. Comunicó el pasado 1 de diciembre la situación de insolvencia de la constructora Assignia y abrió el periodo de tres meses que marca la ley que regula las quiebras en España para negociar una salida de la situación.
¿Saldrá Assignia a flote? Fuentes cercanas a la exresponsable económica del Barça, que dejó el club a finales de noviembre por la difícil situación en la empresa familiar, aseguran que el principal objetivo de la medida es proteccionista. Evita que un tercero le inste el proceso en los juzgados mercantiles mientras ha conseguido tirar adelante la compleja refinanciación del Grupo Essentium. Firmó el acuerdo a mediados de diciembre con condiciones de la banca acreedora. De entrada, se quedará en el grupo la empresa que fiscaliza desde después de verano las decisiones que toma la cúpula, Noraction, filial del Grupo Norgestión.
Todas las opciones están abiertas
Monje busca a alguien interesado en la constructora para colocársela. Está abierta tanto a sumar a un socio para su gestión como a vender la totalidad de la compañía. Incluso está sobre la mesa declarar finalmente el concurso y abrir un proceso de liquidación de activos en el que se vendería la compañía como una sola unidad productiva… o troceada si se fracasa en este objetivo, añaden los mismos interlocutores.
Los representantes de la dirección de Essentium han reconocido a los trabajadores del centro de trabajo de Madrid la “grave situación económico-financiera y de tesorería por la que actualmente pasa el grupo Assignia”, según indica el comunicado que les ha hecho llegar y al que ha tenido acceso Crónica Global.
Tres meses de impagos de nóminas
Les ha informado de la situación preconcursal y les ha ofrecido acogerse a un “permiso retribuido temporal, el cual se estima en una duración inicial prevista de hasta un mes”. Avisa de que se podría extender “hasta nuevo aviso” y que los empleados que lo soliciten podrán disfrutar “de los mismos derechos y condiciones de los que disponen hasta la presente fecha”.
Por ahora, la plantilla acumula cuatro meses de impagos de nóminas más una quinta parte de una extraordinaria y los proveedores acumulan facturas sin pagar. Estos dos son los que podrían instar la quiebra mercantil.
También se especula con que Essentium habría registrado una entrada de tesorería por el negocio internacional y que a diferencia de otras ocasiones no se ha destinado a cubrir los impagos de Assignia. Otra señal, según fuentes internas de la constructora, del poco interés real en sacar a flote la sociedad.