The Heaven Club, el club cannábico transfronterizo entre España y Francia / CG

The Heaven Club, el club cannábico transfronterizo entre España y Francia / CG

Vida

El último 'juguete' de La Jonquera: un fumadero transfronterizo

La asociación The Heaven Club se estrena en el lado español como 'refugio' frente a las duras leyes contra la marihuana en Francia

12 julio, 2020 00:00

Es el último juguete de La Jonquera, el último municipio español en la frontera con Francia en Cataluña. The Heaven Club nace como club cannábico en el municipio sito junto a la aduana. Sus impulsores, "un grupo de amigos", quieren contribuir a reducir el narcotráfico entre ambos países desde la coraza legal que supone ser una asociación cannábica registrada ante la Generalitat de Cataluña.

Interior de The Heaven Club, asociaciòn cannábica transfronteriza en España con 1.000 socios / THC

Interior de The Heaven Club, asociaciòn cannábica transfronteriza en España con 1.000 socios / THC

Lo explican promotores de The Heaven Club en conversación con este medio. "Somos la primera asociación establecida en La Jonquera. Nació de un grupo de amigos que buscaban crear un sitio seguro para el consumo y la investigación", ilustran. "La Jonquera es conocida por ser una zona un poco conflictiva y se pensó que el club liberaría un poco el trabajo de las fuerzas del orden", agregan.

Hasta 1.000 socios y "buena fe"

Los impulsores del refugio verde situado en un polígono industrial del pueblo gerundense lamentan que "el hecho de estar en una frontera ha perjudicado el funcionamiento normal de nuestro club de muchas maneras". ¿Por qué? "La actividad, de buena fe, se mezcla con un mundo muy complicado para las autoridades. Aquí en La Jonquera tenemos Mossos d'Esquadra, Policía Local, Guardia Civil y Policía Nacional. Eso hace que tengamos que mantener los niveles de excelencia en los más altos estandartes de la gestión de clubes cannábicos. No hay margen de error", aseveran.

Imagen de un control en la autopista AP-7 en La Jonquera / EFE

Imagen de un control en la autopista AP-7 en La Jonquera / EFE

Pero, ¿a quién se dirige este fumadero transfronterizo? "La regulación en Francia es bastante más prohibitiva que la española pero tenemos muchos socios asiduos que viven en pueblos aledaños a la frontera y para ellos somos un gran servicio. Disponemos de casilleros para que el consumo se haga con la máxima profesionalidad posible y no pueda causar riesgos a los socios en la frontera", admiten sus promotores. En la actualidad, el hub cannábico que permite sortear la aduana con seguridad cuenta con 1.000 asociados, 60 de ellos muy activos.

Ayuntamiento y vecinos: "No es problema, no hay quejas"

El paraíso del cáñamo para los sufridos franceses que lidian con una legislación más dura que la nacional --y los españoles que desean consumir en un entorno de seguridad-- ya se ha adaptado a La Jonquera sin problemas. La localidad, que protagoniza a menudo las noticias por inseguridad y la actividad masiva de alterne, ha aceptado el club cannábico francoespañol. "Desde el Ayuntamiento de La Jonquera no nos consta queja alguna en relación al citado local", aclara un portavoz. Según él, "no constan quejas porque el local está ubicado en un polígono industrial en el que no existe ninguna vivienda".

Prostitutas en las carreteras aledañas a La Jonquera; un fenómenos que los vecinos sí piden combatir / EFE

Prostitutas en las carreteras aledañas a La Jonquera; un fenómenos que los vecinos sí piden combatir / EFE

Fitu Guillén, portavoz de La Plataforma de Vecinos de La Jonquera, un activo grupo de residentes que combate el narcotráfico y la prostitución ilícita en las carreteras, ahonda en la misma argumentación. "No tenemos quejas con el club. Es una asociación que, cuando bajan los franceses, es una opción más para ellos. Pasan el día comprando en el outlet, pernoctan en el hotel, comen en los restaurantes locales y, si lo quieren, acuden a un entorno seguro a consumir", recuerda el activista. "Nuestros problemas son otros", insiste. ¿Cuáles? "Los narcopisos que trafican con drogas más duras en el centro urbano. Y la prostitución de carretera, que se ha trasladado a los municipios vecinos. Lo que pasa en el polígono industrial, mientras sea discreto y cumpla con la ley, no nos perturba", apostilla la misma fuente.