A juicio los tres Boixos Nois que casi matan a un ultra del Rayo Vallecano en Sitges
- El fiscal pide una pena de 11 años de prisión por los delitos de homicidio en grado de tentativa y tenencia de armas prohibidas
- Otras historias: La causa contra Casuals por homicidio se tambalea: cae una de las principales pruebas para condenarlos
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El próximo lunes 13 de enero arranca en la sección 2ª de la Audiencia de Barcelona el juicio contra tres exmiembros de los Boixos Nois --los seguidores ultras del FC Barcelona-- por apalizar hasta al borde de la muerte a un seguidor del Rayo Vallecano.
Los hechos sucedieron el 10 de noviembre de 2018 en Sitges (Barcelona) cuando los tres acusados, acompañados de un menor de edad, se cruzaron con el bucanero (como se conoce a los ultras del Rayo) e iniciaron una pelea motivada por las diferencias ideológicas entre los dos grupos de hooligans.
Usaron una defensa de metal
Durante la acalorada discusión, la víctima cayó al suelo. Fue entonces cuando los acusados, "con ánimo de privarle de su vida", empezaron a propinarle múltiples "patadas y puñetazos por todo el cuerpo y la cara".
Uno de ellos llegó incluso a golpear varias veces a la víctima con una defensa rígida extensible de metal, de 54 centímetros de longitud.
Los procesados --añade el escrito del Ministerio Fiscal-- "persistieron en su conducta hasta que consiguieron romper la camiseta del Rayo Vallecano con el logo de los 'Bucaneros'".
Como consecuencia de la brutal agresión, la víctima sufrió lesiones que le dejaron al borde de la muerte. Entre ellas, una hemorragia frontonasal y la fractura de múltiples huesos de la cara y el cráneo.
Un mes después de los hechos, los investigadores de los Mossos d'Esquadra intervinieron en casa de uno de los acusados la defensa rígida extensible que utilizaron en el ataque. Arma, cuya "publicidad, compraventa, tenencia y uso por particulares se encuentra prohibida en nuestro país".
Piden 11 años de prisión
Volviendo al caso que nos ocupa, el fiscal pide hasta 11 años de prisión para los tres acusados mayores de edad, a quienes acusa de los delitos de homicidio en grado de tentativa y tenencia de armas prohibidas.
Asimismo, el fiscal también prevé la agravante de "haber cometido el delito por motivos discriminatorios referentes a la ideología de la víctima".
En este sentido, cabe recordar que los Bucaneros tienen una ideología antagónica a la de los Boixos Nois, quienes, mayoritariamente, suelen ser individuos de extrema derecha y neonazis.
En paralelo, el fiscal también les reclama una indemnización de 8.624 euros por las lesiones físicas sufridas; otra de 27.604 por las secuelas; y, una tercera, de 12.000 euros por los daños morales causados.
Desvinculados del grupo ultra
Por otro lado, fuentes conocedoras del caso explican a esta redacción que, en la actualidad, los tres acusados están totalmente desvinculados del grupo ultra.
Insisten, además, que en el momento de los hechos todos ellos eran "cachorros" de los Boixos Nois. "Eran unos críos", aseguran.
En relación con el menor de edad, las voces consultadas aseguran que este caso ya se juzgó en un tribunal de menores y acabó con una condena por lesiones.