Cataluña es la comunidad autónoma de toda España que recibe más turistas. Sus playas, sus ciudades, su arquitectura, su cultura, sus pueblos, las montañas y parques naturales y muchas otras cosas la hacen muy atractiva. Aunque claro, no todo puede ser maravilloso. Algún pueblo que, bueno, digamos que no es tan atractivo.

Nosotros queremos ser políticamente correctos, pero hay una revista especializada en viajes, que ha ido a buscar esa palabra que puede resultar hiriente. Ha hecho un ranking de los pueblos más feos de cada provincia española. Aunque bueno, ya se sabe que todo es subjetivo. Al menos, eso dicen.

La revista Viajar asegura que en Tarragona, un pequeño pueblo de menos de 1.300 habitantes según el Institut d’Estadística de Catalunya (Idescat), se ha ganado ese reconocimiento. Claro que tiene mucha competencia alrededor. A menos de 10 kilómetros está la imperial Tarraco con su legado romano.

La localidad en cuestión es Perafort, un pequeño municipio de menos de 10 kilómetros cuadrados que se encuentra en la margen izquierda del río Francolí, donde se extiende otro minúsculo pueblo Puigdelfí. Entre ambos no media ni un kilómetro de distancia, pero eso es otra historia.

Dónde está

El tema es que este pequeño rincón de Cataluña parece que no gusta a los expertos viajeros. Es verdad que no hay mucha información sobre él, que tampoco tiene un legado modernista, ni tiene la playa cerca. Ni tan sólo se puede decir que está bien comunicado. Y eso que en su término municipal está la estación del AVE.

Sí, como muchos ya saben, la alta velocidad no llega a Tarragona ciudad, la disputa de la antigua Tarraco con Reus hizo que se optara por una opción neutral, Camp de Tarragona. A unos 10 kilómetros de la ciudad. Pues bien, ese lugar es Perafort, aunque el núcleo urbano también queda alejado de la estación.

Pero a pesar de este calificativo del municipio más feo de Tarragona, sí hay cosas por ver. Para empezar, Perafort tiene mucha historia. El municipio cuenta con joyas arquitectónicas como la villa romana de la Barquera y dos sepulcros monumentales de los siglos IV y V que fueron trasladados al núcleo urbano. Pero su pasado es aún más lejano.

Fueron las mismas obras del tendido del AVE los que permitieron descubrir que a las afueras de la localidad restos neandertales. Por eso, los aficionados de la historia pueden ahora acercarse a este lugar rebautizado con el nombre de Yacimiento de Vinyes Gran.

Qué ver

Claro que si algunas ruinas destacan en Perafort son las de la antigua Abadía de Codony, datadas del siglo XIV, y el Castellet de Bofarull, una fortaleza militar del siglo X, de la que apenas se aprecian algunos muros.

Acercándose ya al casco urbano, uno puede percibir que no está en el pueblo más turístico de Tarragona. Esto equivale a una paz y tranquilidad que ayuda a mantener intacto también el carácter rural y tradicional. Este ambiente se deja notar en su interesante patrimonio, que abarca desde la edad media hasta la actualidad, y también en sus calles, que conservan un encanto que a menudo ya se ha perdido en muchos lugares.

Entre sus monumentos más destacados se encuentran la iglesia de Sant Pere de Perafort, del siglo XVIII y estilo neoclásico; y el conjunto de la Vila Closa, en el núcleo de Puigdelfí. También es interesante pasear por la calle Nou, que concentra buena parte de la actividad comercial y social del pueblo. 

Y a pesar de todo esto, se lo conoce como el pueblo más feo de Tarragona. Pero sí, merece una visita para conocer todo este patrimonio.

Cómo llegar

Para llegar a Perafort en coche desde Barcelona, se debe tomar la autopista AP-7 en dirección sur, hacia Tarragona. Esta autopista es la principal vía que conecta Barcelona con las localidades del sur de Cataluña. Es necesario continuar por la AP-7 durante aproximadamente 80 kilómetros, pasando por paisajes típicos de la región, con vistas al mar Mediterráneo en algunos tramos y áreas rurales y boscosas. Tras unos 45 minutos de viaje, se debe tomar la salida 33 hacia Tarragona/Bonavista y seguir las indicaciones hacia la carretera N-340.

Una vez fuera de la autopista, se deben seguir las señales hacia la carretera N-340 y luego tomar la T-721 en dirección a Perafort. Esta carretera atraviesa áreas rurales hasta llegar a la entrada del municipio. El trayecto completo desde Barcelona hasta Perafort tiene una duración aproximada de una hora, dependiendo del tráfico. Al acercarse a Perafort, las señales indican cómo llegar al centro del pueblo.

Noticias relacionadas