Premio a la gestión de Sant Pau pese a la cascada de despidos de médicos

Polémica en el sector sanitario porque se ha premiado al Hospital de Sant Pau de Barcelona pese a la cascada de despidos de médicos en el centro sanitario, uno de los cuatro grandes de la Ciudad Condal. La institución vinculada al Arzobispado ha recogido un galardón al management excelente pese a una treintena de salidas en dos años, demandas laborales y sospechas de espionaje a al menos un sanitario. 

Lo detallan fuentes del sector sanitario, que alertan de que la directora asistencial de Sat Pau, la doctora Xènia Acebes, recogió un reconocimiento a la Gestión Sanitaria a Nivel de Gerencias y Direcciones Médicos de la Sociedad Española de Directivos de Salud unos días atrás.

El premio tildó de "indispensable" a la Acebes en un programa concreto, el Codi Medicament. En total, media docena de profesionales recogen la distinción cada año. 

Despidos y demandas

El reconocimiento ha causado malestar porque el Hospital de Sant Pau encadena polémicas a diversos niveles, siendo la laboral la principal de ellas. Por despidos de al menos una treintena de médicos y altos cargos en los ejercicios que lleva al frente de la gerencia Adrià Comella, exdirector del CatSalut. 

Es gestión ha provocado aristas en el propio CatSalut, por cuanto Sant Pau es, a la postre, un centro concertado que cuenta con representación de la aseguradora pública en sus órganos de gobierno. 

¿Se espió a un médico?

En esta clave, uno de los despedidos sospecha que la gerencia de Sant Pau, de la que forma parte la doctora Acebes, espió ilegalmente su ficha médica para justificar su desvinculación. 

Ello ha provocado que entre una petición de listado de los accesos, que el Hospital está preparando. La dirección, a su vez, niega entradas indebidas. 

Comella, en la diana

El trasfondo del debate es la gestión hecha por el doctor Comella, que no había regido un gran hospital tras su salida del CatSalut. Al salir del organismo, se le asignó el timón de la ciudad asistencial. 

Por contra, algunos círculos echan de menos la figura de la doctora Gemma Craywinckel, que también pasó por el mismo centro sanitario y por la aseguradora pública. Al contrario que Comella, la médico ha terminado desterrada en el Parque Sanitario Pere Virgili de Barcelona, con mucha menos entidad que el campus médico que dirigió, dejando buen recuerdo entre el estamento facultativo y directivo.