Compañeros de la cocinera asesinada en una cárcel catalana denuncian que no se respetan sus derechos

Compañeros de la cocinera asesinada el miércoles 13 de marzo en la cárcel de Mas d'Enric (Tarragona) han denunciado este viernes que los derechos de los presos se respetan pero los suyos, en cambio, no.

En un comunicado leído por una funcionaria de Mas d'Enric a las puertas de la prisión de Brians 2 -donde unos 60 periodistas esperaban la posible salida del futbolista Dani Alves-, los trabajadores han replicado a las entidades de derechos humanos que piden respetar los derechos de los reclusos: "Los derechos humanos de los internos son respetados en todo momento, y nos implicamos con sus necesidades a diario mucho más que cualquier burócrata desde su despacho", afirman en su escrito.

"Nuestros derechos se vulneran de forma sistemática"

Los trabajadores aseguran que el comunicado se dirige a las entidades de derechos humanos y a la parte de la ciudadanía que creen que no entiende sus protestas: "Todas las personas que trabajamos en centros penitenciarios también tenemos derechos humanos que se vulneran de forma sistemática". Y, entre ellos, ha mencionado el derecho a la vida y a la integridad física y moral.

También señalan la importancia de la salud mental de los presos para garantizar la convivencia en las cárceles. Y critican que "está desatendida" por parte de la Generalitat por falta de unidades psiquiátricas para atenderlos.

Aumento de las agresiones

"Pero nuestra salud mental también es muy importante, y no parece que le importe a nadie", han añadido, recordando que las agresiones en centros penitenciarios han aumentado tanto entre los presos como de los presos a trabajadores.

El comunicado afirma que con las protestas de la última semana "no se busca un cambio de rumbo ni la abolición del sistema penitenciario hacia uno más punitivo, sino que el actual sea correctamente ejecutado".

Más protestas

Los trabajadores de prisiones de Cataluña insisten en pedir las dimisiones de la consellera de Justicia, Derechos y Memoria, Gemma Ubasart, y del secretario de Medidas Penales, Amand Calderó. Y ha apelado también al director del Centre d'Iniciatives per a la Reinserció (Cire), David Font, que encabeza la empresa pública que empleaba a la cocinera asesinada.

"Seguiremos con las movilizaciones y concentraciones que consideremos necesarias como plantilla para que no se olviden ni el asesinato de nuestra compañera Núria ni las condiciones de inseguridad reiterada en las que desarrollaba su trabajo", explican.