'El Prenda' admite la violación de Pamplona y pide perdón

José Ángel Prenda, más conocido como El Prenda, uno de los cinco condenados de La Manada por la violación de una chica de 18 años en las fiestas de San Fermín en Pamplona (Navarra) en 2016 ha admitido el crimen y ha pedido perdón a la víctima y a su familia. 

En una carta enviada a la Audiencia Provincial de Navarra avanzada por El Periódico, El Prenda expresa su "total remordimiento por el delito por el cual cumplo esta condena". Asimismo, expresa su "solicitud personal de perdón a la víctima por los daños causados, que lamento profundamente, así como a sus familiares directos". 

A las puertas de un permiso

La misiva enviada por El Prenda a la sección segunda de la Audiencia Provincial que le condenó a 15 años --ha cumplido cuatro años y tres meses-- por la violación de San Fermín de 2016 tiene otra arista. El reo la envía a las puertas de llegar al umbral de la cuarta parte de la condena, lo que le permite acceder a permisos penitenciarios.

El reconocimiento del delito y la restitución del daño son condiciones necesarias para acceder al beneficio penitenciario, que ahora evaluará la Junta de Tratamiento. 

El único que reconoce la violación

Sea interesada o no, la carta de El Prenda desde la cárcel de Puerto III de Cádiz significa que el preso es el único de los cinco condenados por la agresión sexual de Pamplona en 2016 que reconoce su participación en el delito y pide perdón. "Trabajaré incansablemente para reparar este mal", asegura el interno desde el penal. 

Con ello, también, José Ángel Prenda se desmarca de otra carta que envió a la prensa desde la penitenciaría andaluza. En la misma, el ciudadano aseguraba que la violación era una "mentira" que "había destrozado a cinco familias". 

El Supremo confirma la condena

Cabe recordar que los cinco integrantes de La Manada, uno de ellos El Prenda, encajaron penas de 15 años de cárcel por agresión sexual con prevalimiento en las fiestas de San Fermín en Pamplona de 2016. La condena la impuso el Tribunal Supremo, que corrigió al alza la sentencia previa de la Audiencia Provincial de Navarra de 2018 que calificaba los hechos de abuso. Un fallo que provocó una ola de indignación social. 

De hecho, el ataque sexual a la chica de 18 años fue entendida como diez agresiones en menos de dos minutos por el alto tribunal. No obstante, la máxima instancia judicial no pudo elevar la pena porque ninguna de las partes lo había pedido.