"Okupas han convertido mi chalé de Escapada Rural en una ruina"
Una trama 'squatter' dirigida desde Rusia señorea una villa en Sitges y la transforma, según sospecha su propietaria, en una plantación de marihuana
21 junio, 2020 00:00"Transformaron mi idílico chalé anunciado en Escapada Rural en una ruina". Este es el lamento de M., una vecina de Barcelona cuya villa en Sitges (Barcelona) ha sido asaltada por okupas y convertida, sospecha, en una plantación de marihuana mediante la manipulación de los cuadros y cables eléctricos.
La ciudadana ya no sabe qué hacer. Lleva siete años de infierno con la villa que su madre construyó a tiro de piedra del paseo marítimo de la coqueta localidad catalana. M. le alquiló la torre al empresario turístico ruso-holandés Vladimir E. para que éste la destinara a apartamento turístico en 2013. El directivo ha desaparecido, ha cedido el chalé a personas en Rusia y éstos, a su vez, han colado a una familia en la propiedad. "Dicen que son personas vulnerables, pero yo creo que cultivan marihuana, pues han manipulado y reforzado la instalación eléctrica, tirado cables por todos los lados y viven siempre con las ventanas bajadas", lamenta la denunciante.
Caso ganado
El suplicio de M. comenzó en 2013. Aquel año, la ciudadana alquiló el activo a Emmerig. "Es una casa que construyó mi difunta madre en los años 50. Estilo mediterráneo, con seis habitaciones, cinco baños y piscina. Preciosa y con mucho gusto. Pues bien, Vladimir me propuso alquilarla para uso vacacional", resume. Dicho y hecho. Aporta el contrato de arrendamiento por 2.000 euros al mes al empresario. "A los tres meses, reventó los desagues intentando llenar la piscina. Acometió una reforma de 60.000 euros de la cual no hay facturas. Pero le funcionó. Creemos que facturaba cerca de 4.000 euros al mes alquilando la casa por semanas", explica M.
Todo ello empeoró en 2017. Aquel año, murió la madre de la ahora propietaria. Y el arrendatario dejó de pagar. "Se fugó. Huyó. Le cargábamos la renta y jamás había fondos. Le llamaba y me decía que estaba fuera de España. Siempre. Me derivaba a una tal Ana K. que vive en Rusia", recuerda. ¿Qué hizo? "Traté de rescindir el contrato, pero mi abogada me dijo que era muy difícil. Así que inicié un procedimiento de desahucio por impago", admite. Lo ganó en el juzgado de Instrucción número 9 de Sitges. El lanzamiento quedó visto para el 15 de enero de 2020.
"Ha metido a unos compinches"
La comitiva judicial no completó el lanzamiento. "Cuando llegamos a la casa, apareció Ana como si fuera propietaria de la misma. Blandió un contrato de arrendamiento a una supuesta familia colombiana con dos hijos", explica M. ¿Realquiló la propiedad? "Como si fuera la propietaria. Sin permiso, claro, porque no lo es. La casa es mía --muestra las escrituras--. Y han metido a una presunta familia con niños que dicen que es vulnerable. Se han empadronado allí, pero yo no les veo nunca. Y han denunciado a los Mossos d'Esquadra que les han intentado echar ilegalmente", ilustra la denunciante. Pero, ¿no necesitan los nuevos moradores una vivienda? "Si fuera así, y no les culpo, sería entendible. Pero es que les ha realquilado la casa alguien que no es la propietaria. Es una okupa, porque gané el juicio por desahucio y que, además, vive en Rusia. Y no son una familia vulnerable: no les creemos", alerta.
¿No podría llegar a un acuerdo con los nuevos inquilinos? "Primero hay que sacar a la gente que ha tomado mi casa. La casa que construyó ladrillo a ladrillo mi madre para pagarse la residencia cuando era mayor. Gané el primer juicio por desahucio. Al segundo, celebrado este año, no se presentaron", avisa la propietaria. Lo que es más: desde 2013, su idílico chalé de Escapada Rural se ha convertido en una ruina. "Lo han destrozado todo. Han manipulado los cuadros eléctricos. Viven con las persianas bajadas todo el año. Han tirado trozos de cornisa", enumera. ¿No puede recuperar su villa familiar? "No, pues sería allanamiento. Nadie, ni mi abogada ni la justicia me ofrece soluciones. ¿Qué hago?", se pregunta desesperada.
Negocios con su chalé
M. no tiene respuestas a su caso, pero sí información. El arrendatario de su vivienda en Sitges, Vladimir E., tiene registradas diversas empresas en España. Es administrador único de Costa Barcelona Sitges Leisure SL, son sede social en el municipio costero, según el Registro Mercantil. Tiene también otra empresa de subarriendo de chalés y, además, montó una empresa de mayordomos y acompañantes, Enables Concierge SL, que ha acabado condenada por impago por el juzgado social número 34 de Madrid. Anna Krozaeva tampoco parece ser una familia vulnerable: opera el turoperador Russian Tourist Agent 2000 SL desde mayo de 2019, según el mismo Registro.
La mayoría de empresas de los okupas de Sitges están domiciliadas en el número 5 del Passatge Garrofers. Siguen anunciando la propiedad de M. por 2.500 euros al mes en Escapada Rural, sí, pero también otros portales de vivienda vacacional. Ninguno de los teléfonos de estas empresas están operativos.