Será, si nada se tuerce, el sábado. Cataluña recibirá el 4 de abril la mayor remesa de material hospitalario chino que ha entrado en la autonomía desde que se inició la pandemia del virus SARS-CoV-2 en la región. Los productos fungibles --mascarillas, guantes y equipos de protección individual (EPI)-- procedentes de Shanghái (China), entrarán en España a bordo de un supercarguero B747-800 de la empresa rusa AirBridgeCargo. La entrega complementará las realizadas hasta ahora y que llegaron a través de los aeropuertos de Zaragoza y Adolfo Suárez Madrid-Barajas.

Fuentes del sector han indicado a este medio que el territorio, por fin, parece empezar a sortear la carestía de material que ha llevado al límite al personal sanitario que lucha contra el patógeno en los hospitales y ha provocado el contagio masivo de facultativos. Por lo pronto, la sanidad pública habría conseguido llenar, según algunas fuentes, el almacén de Logaritme Serveis Logístics que abastece a la mayoría de ciudades sanitarias de la región. Al parecer, la nave robotizada se habría llenado con remesas procedentes de distintas importaciones. Ahora el sistema espera, si no hay contratiempos, la llegada de un gran avión con material que abastezca a las plantillas de cara al sábado. Estas fuentes han apuntado, de nuevo, al aeropuerto de Zaragoza.

"Sábado a las 15:25 horas"

La compañía de cargueros rusa AirBridgeCargo ha confirmado la operación y ha precisado algunos detalles. "Será un vuelo entre Shanghái y Barcelona operado por un Boeing 747-800 con capacidad para 700 metros cúbicos de carga. Es nuestra aeronave de más capacidad [ver modelo aquí]. Y sí, lleva material hospitalario", ha explicado una portavoz de la empresa. El cliente se mantiene en el anonimato, pero diversas fuentes apuntan a las administraciones públicas. Al cierre de esta edición, ni el Ministerio de Sanidad ni la Generalitat de Cataluña habían confirmado la compra. Sí lo había hecho el intermediario, AirBridge, con sede en el aeropuerto Josep Tarradellas Barcelona-El Prat.

Un médico del Clínic estalla: "Estamos hartos de trabajar en condiciones penosas" / TWITTER

"Se trata de una operación de envergadura. Habitualmente, los vuelos de carga con fungibles aterrizan en Madrid y Zaragoza", ha precisado la misma fuente. Según AirBridge, la llegada del material no está siendo sencilla por las tensiones del mercado. "Es una auténtica guerra. Cada país puja para conseguir material de China y los proveedores se lo ofrecen al que paga más", han alertado.

A esa situación se le añaden la próxima incorporación de Estados Unidos a la lista de países demandantes de material fungible --"lo cambiará todo. Cuando entre EEUU habrá problemas de nuevo, pues tienen un gran poder de compra"-- y las dificultades de la Generalitat para pagar al contado. "Los chinos solo quieren transferencias y la Administración autonómica insiste en compras a crédito por su delicada tesorería", avisan voces del sector sanitario.

"Si llega, será el mayor hasta ahora"

Fuentes del sector aeronáutico han aportado más datos sobre la situación de los corredores de material sanitario a España. "A Barcelona van llegando cargueros, como no podría ser de otra manera. Pero dedicados exclusivamente a material sanitario no son nada frecuentes. Estas aeronaves aterrizaban hasta ahora en Barajas y Zaragoza", han confirmado las voces. "La Ciudad Condal ha visto cambiar su aeropuerto en los últimos años. De ser una instalación muy volcada a la carga, con operadores como Cargolux y otros rivales, ha mutado a infraestructura más centrada en pasajeros de turismo y ocio", han añadido.

Imagen de la llegada del primer avión del Corredor Aéreo Sanitario de Iberia y Fenin / EFE

En cualquier caso, el cargamento que llegará desde Shanghái el sábado si no hay contratiempos, será el mayor hasta ahora para Cataluña. "100 toneladas de material hospitalario es una capacidad poco frecuente. La operativa de carga en El Prat se mantiene, claro, pero no es frecuente ver operaciones así", han indicado. De hecho, el Corredor Aéreo Sanitario abierto por la patronal de empresas de productos hospitalarios Fenin en colaboración con Iberia, cuya creación avanzó este medio, entregó 30 toneladas de material sanitario ayer. La cantidad se sumó a las 20 toneladas gestionadas por la vía aérea en una primera entrega el lunes.

Horas antes, un A400M del Ejército del Aire trasladó a España otras 14 toneladas de fungibles desde, también, Shanghái, una de las cuatro ciudades de la primera corona china. El martes, 24 de marzo, Inditex sí consiguió entregar una cantidad mayor (94 toneladas) fletando una aeronave de carga de Atlas Air desde Zhengzhou (China). Libró 1,4 millones de mascarillas y cerca de 76.000 equipos de protección. Su competidora catalana, Mango, también ha conseguido importar a España dos millones de mascarillas quirúrgicas en un mercado muy tensionado por la feroz competencia.

La justicia obliga a proteger a los sanitarios

Los esfuerzos de las compañías y administraciones llegan después de las quejas de sindicatos de médicos y organismos colegiales sobre la desprotección de los sanitarios que luchan contra la pandemia del SARS-CoV-2. La parte social y colegial alertó mediante denuncias públicas y actas a Inspección de Trabajo de que los centros de internamiento carecen de mascarillas quirúrgicas --menos aún de FFP2 y FFP3, tapabocas de bricolaje que filtran el 99% de las bacterias--; guantes de látex; gafas protectoras y equipos de protección indiual (EPI). De hecho, el Sindicato Médico de Cataluña (Simecat) presentó una acción legal en el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) el viernes para instar al Instituto Catalán de Sanidad (ICS) y a las entidades concertadas a "proteger a sus trabajadores". El TSJC estimó ayer algunas de medidas cautelarísimas.

Sanitarios con mascarillas en el Hospital de Sant Pau i la Santa Creu de Barcelona ayer / EFE

Este aviso judicial llega después de que la Generalitat de Cataluña y sectores del independentismo acusaran a la Guardia Civil de "incautar" mascarillas quirúrgicas para hospitales de la Comunidad de Madrid. La acusación fue rebatida por el Gobierno y los promotores de la fake new, incluido el alcalde de Igualada, Marc Castells, jamás aportaron pruebas. Lo cierto es que el material va llegando a los hospitales que tratan a pacientes de Covid-19, sí, pero lo hace con cuentagotas. Los críticos con el Govern recuerdan que el sistema de compra centralizada y la logística unificada de Logaritme, una empresa participada opaca participada por el ICS, no ayudan a imprimir celeridad en las compras y aprovisionamientos.