El independentismo se subleva: ha llegado el 'momentum'
Bronca en el Parlament por el ingreso en prisión de los siete CDR acusados de terrorismo. Quim Torra inaugura el otoño caliente, arrastra a ERC y se declara en rebeldía
27 septiembre, 2019 09:49"Pim, pam, pum, que no quede ni un". Los seres de luz que respondieron anoche al llamamiento de las benéficas entidades independentistas y partidos del ramo gritaban eso frente a la Jefatura Superior de Policía en Vía Laietana y en otros puntos de la geografía catalana. Sólo era un grito, un desahogo natural ante el encarcelamiento preventivo de siete miembros de los Comités de Defensa de la República (CDR), otra organización benéfica. Como es sabido y de dominio público, ser independentista lleva implícita una inocencia virginal incompatible con cualquier forma de violencia o maldad, de modo que los siete cederraires arrestados no podían fabricar explosivos ni tener previsto cometer una serie de atentados en respuesta a la sentencia del Tribunal Supremo sobre lo que las buenas gentes del país denominan escrupulosamente "fets de la tardor" del 17. Nunca, jamás y para nada.
Así pues, el independentismo celestial llora la prisión de sus querubines y emprende la confrontación contra el Estado, el mismo diablo, reproduciendo en el Parlament las circunstancias y ambiente de los días 6 y 7 de septiembre de hace dos años. Da nada sirve que un juez de la Audiencia Nacional (Manuel García-Castellón, el mismo que ha empurado a la plana mayor del PP de Madrid con Esperanza Aguirre por delante) haya decretado prisión incondicional y sin fianza en base a una investigación de más de un año de duración fundada en seguimientos, intervenciones telefónicas y grabaciones de vídeo.
Esto es que el juez es un hacha del derecho cuando imputa a los florones peperos y un siniestro magistrado del Tribunal de Orden Público cuando se trata de los indepes, estos chavales que organizan las fiestas de Sabadell, salen a la calle cada Onze de Setembre y el resto de las fiestas de guardar del nacionalismo y están dispuestos a lo que haga falta por conseguir la república catalana. Y en estas, por tanto, es inconcebible, imposible y falso que en el seno del independentismo, cuya superioridad moral es indiscutible, haya un grupo dispuesto a utilizar la violencia. Palabra de Torra, Eduard Pujol, Sergi Sabrià y Carles Riera.
El partido está donde quería el president, en el momentum, ahora o nunca hasta la próxima ventana de oportunidad. Comienza la bullanga. Queda inaugurado el otoño caliente. De momento, anoche salieron cuatro gatos, pero menos es nada y de una chispa nacen los incendios. Torra y los grupos independentistas están on fire, el Parlament, también. Rumbo de colisión y piloto automático. Ni en los peores tiempos del País Vasco una cámara parlamentaria se había opuesto a una resolución judicial con tal intensidad.
Por partes. La Razón asegura en portada que los detenidos preparaban una "oleada de explosiones" para el 1-O. Escriben Ricardo Coarasa y J. M. Zuloaga: "La célula de los Comités de Defensa de la República (CDR) desarticulada por la Guardia Civil en Cataluña tenía como consigna causar el caos mediante la ejecución de dos planes simultáneos, consistentes en la destrucción de redes eléctricas y de telefonía y en la paralización de vías de comunicación, según han informado fuentes de la investigación".
Sigue el texto: "Los siete arrestados (otros dos fueron puestos en libertad por la Guardia Civil y no han comparecido aún ante el magistrado) pasaron ayer su primera noche en la cárcel de Soto del Real (Madrid) después de que el juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón ordenase, a instancias de la Fiscalía, su ingreso en prisión incondicional, incomunicada y sin fianza por delitos de pertenencia a organización terrorista, fabricación y tenencia de explosivos y conspiración para causar estragos. A todos ellos los vincula con los Equipos de Respuesta Táctica (ERT) de los CDR, «una organización con una estructura jerarquizada que pretende instaurar la república catalana por cualquier vía, incluidas las violentas»".
ERT, tomen nota, un compañero nuevo en la oficina. De la pieza de Antonio Salvador en El Independiente: "La investigación que vienen desarrollado desde hace meses el Juzgado Central de Instrucción 6 de la Audiencia Nacional y la Guardia Civil ha permitido poner al descubierto la existencia en el seno de los Comités para la Defensa de la República (CDR) del llamado Equipo de Respuesta Táctica (ERT), el frente más «radical» del movimiento independentista catalán. (...) Inspirado en la terminología militar y policial, el ERT cuenta con una estructura jerarquizada y persigue un objetivo: la instauración de la República Catalana «mediante cualquier vía, incluidas las violentas»".
Ayer hubo show en el Parlament. Los grupos independentistas, en el paroxismo de la batasunización, ejercieron de brazo político de los CDR. Además, aprobaron una cascada de propuestas sobre desobediencia, amnistía y fora les forces d'ocupació, la apoteosis del ghandismo, una orgía cívica, pacífica y festiva. En suma, que el independentismo hará a partir de ahora lo que le dé la gana, que no acatará las sentencias y que verdes las han segado.
Dicen en Madrid que están dispuestos a todo para frenar el embate. Se deduce de titulares como este de El Confidencial: "El Gobierno exhibe mano dura antes del 10N: impugnará los acuerdos del Parlament". Tremendo, el Gobierno. El caso es que en la información se diluye un tanto, por no decir casi del todo, la respuesta. De la crónica de Juanma Romero y Javier Bocanegra en el referido medio: "Las mismas fuentes gubernamentales aclaraban también que lo que se manifestaba este jueves es la "decisión política" de recurrir esos textos, pero necesitará su trámite, por eso es complicado que estén cumplidos para el Consejo de Ministros de este viernes. Hay que tener en cuenta, añadían, que esas resoluciones del Parlament no están aún publicadas. Y aunque el Gobierno, de manera oficial, no avanza ante qué instancia impugnará esos acuerdos, desde la Moncloa sí se afirmaba que se hará, lógicamente, ante el Tribunal Constitucional".
Hay quien cree, por contra, que el 155 es inminente. Es el caso de Lluís Llach. También José Antich en El Nacional se malicia una parecida y escribe: "Quan vaig assenyalar fa diverses setmanes que Pedro Sánchez havia decidit jugar-se la seva sort en unes noves eleccions amb el tema català com a eix central de la seva campanya, tampoc no creia que la posada en escena arribés tan lluny i ser tan arriscada per a la convivència a Catalunya. La línia que s'està creuant és enormement perillosa atiant l'opinió pública espanyola a confrontar-se no amb l'independentisme pacífic català sinó amb una inexistent violència a Catalunya a la qual se li vol donar forma de terrorisme organitzat, estructurat. Només hi falta afegir: una ETA catalana. El circ de Ciutadans al Parlament va en aquesta direcció i el seu requeriment al president del Govern espanyol en funcions perquè apliqui el 155 abans que hi hagi "algun mort", també".
La estrategia independentista está clara. Se trata de intentar condicionar la sentencia del Tribunal Supremo, acogotar al Gobierno en funciones y a los magistrados, exhibir músculo callejero y máxima indignación, fuego en las rotondas, el puro Vietnam. Sin embargo, el estamento judicial no parece sensible a esa clase de presiones. De la pieza de Jesús Hierro en ABC: "La sentencia contra los líderes del procés todavía es una incógnita, pero la Fiscalía tiene claro que, de ser condenados a penas de prisión, los políticos independentistas de ninguna manera deben cumplirla en las cárceles catalanas. El tiempo que los líderes del «procés» han estado en prisión provisional en esas prisiones confirma, según el ministerio público, la falta de «imparcialidad» de las autoridades penitenciarias autonómicas para gestionar la estancia en prisión de los políticos separatistas de haber una sentencia condenatoria con penas privativas de libertad. Cabe recordar que Cataluña tiene traspasada la competencia en materia de prisiones".
Sucesos. Se suicida el autor del crimen de la Villa Olímpica. De la pieza de Metropoli Abierta: "El autor del asesinato de una joven de 26 años el pasado 4 de septiembre en el Port Olímpic de Barcelona se suicidó este jueves a última hora de la tarde cuando iba a ser detenido. Los Mossos d’Esquadra habían desplegado un amplio dispositivo para arrestar al agresor, de 20 años, en el barrio de Sant Roc de Badalona, donde residía. La policía buscaba al sospechoso desde hacía prácticamente un mes, después de que apuñalara a una joven de 26 años en una discoteca del Port Olímpic e hiriera de gravedad a un guardia de seguridad de la zona de ocio barcelonesa. El otro implicado en el caso se entregó poco después del 4 de septiembre ante los Mossos".
Ha fallecido Jacques Chirac, expresidente francés.
27 de septiembre, santoral: Bonifilio de Fara, Cayo de Milán y Vicente Paúl.