Pacientes en guerra en Cataluña por el último recorte en los ambulatorios catalanes. Federaciones de asociaciones vecinales han iniciado maniobras de cara a futuras movilizaciones contra el avance del cierre de los centros de atención primaria (CAP) en el territorio, la llamada unificación horaria.
La medida entró en vigor de forma parcial el martes, 1 de enero. Ayer miércoles fue el primer día laborable en el que cerca del 73% de los centros asistenciales cerraron a las 20.00 horas en lugar de a las 21.00 horas, una iniciativa que surge del pacto entre los facultativos y la Consejería catalana de Salud que zanjó la huelga de médicos que tuvo lugar en noviembre. El departamento que comanda la secretaria de Salud, Laura Pelay --la titular, Alba Vergés (ERC), está de permiso de maternidad-- defiende la medida como un avance para "conciliar la vida familiar y laboral de los facultativos". El mismo argumento esgrime Metges de Catalunya (MC), sindicato mayoritario entre los galenos y que históricamente defendió este ajuste.
"Han actuado como Boi Ruiz"
Por contra, otra fuentes del sector aportan otra versión más matizada. "El Departamento prometió que se consensuaría cualquier cambio en atención primaria (ver tuit inferior) y no ha sido así. Se ha impuesto de forma bilateral mediante un pacto con un solo sindicato", han señalado.
Las mismas fuentes han agregado que "ERC actúa ahora como lo hizo el consejero Boi Ruiz (de la extinta CiU, ahora PDeCAT) en 2011, cuando amplió de forma unilateral el horario de los ambulatorios una hora más en plenos recortes de la época de Artur Mas al frente del Govern".
Laura Pelay, secretaria de Salud y líder del departamento ante el permiso de su titular / EFE
Las mismas voces se han inquirido por "la organización de la bolsa de horas que tienen que hacer los médicos anualmente". Según portavoces sindicales, la medida "será en general bien acogida en el sector salvo por los pacientes. Es la única arista que vemos en este asunto".
"Saldremos a la calle"
Dicho y hecho. El presidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Sabadell (Favs), Manuel Navas, no tardó ni un día en valorar negativamente el cambio. "Es un recorte más en la sanidad pública, lo vendan como lo vendan. Si tu ambulatorio está cerrado, te irás a las urgencias del hospital, con lo que ello conlleva: el colapso del segundo nivel asistencial", aseveró ayer en conversación con este medio. Discrepa del argumento de la conciliación familiar y laboral, "pues Salud lo ha impuesto con un segmento muy determinado del sector, cuando en salud intervienen muchos actores" y avisa que "hay peligro de sobrecarga de trabajo" por la reducción de las horas de apertura.
No se detendrá aquí la Favs. Presionará en el seno de la Confavc, la mayor red de asociaciones de vecinos de Cataluña, para iniciar movilizaciones contra la última medida implementada por Salud. "Nos concentraremos en las puertas de los CAP si es preciso. Y no solo en Sabadell, sino en toda Cataluña", ha avisado Navas.
Cabe recordar que el avance del cierre de los ambulatorios y los Servicios de Atención de Salud Sexual y Reproductiva (Assir) arrancó anteayer de forma gradual y se completará el 31 de marzo de 2019. Afectará no solo a los dispositivos del Instituto Catalán de Sanidad (ICS), sino que el Departamento quiere implicar también a los proveedores del Servicio Catalán de Sanidad (CatSalut).