Buenas noticias en el expediente de la vivienda. La regulación relativa a las zonas tensionadas habría provocado ya un cierto efecto de bajada en los precios de los alquileres, disparados en los últimos meses hasta extremos inalcanzables para la mayoría de la población "indígena". En plena discusión sobre la ley de vivienda, Cataluña aportaría una brizna de esperanza en relación al intento de moderar el mercado y evitar la suplantación de los jóvenes locales por los "expat" que toman el "brunch" y pasean por la calle el café "de especialidad" en vasos de cartón.

Los medios reaccionan con prudencia y un cierto escepticismo. "El alquiler medio bajó hasta un 5% en Catalunya por el límite de precios, según la Generalitat", apunta La Vanguardia. Ese "según la Generalitat" muestra una obvia prevención en un entorno tan volátil como el de la vivienda. El texto es de Fernando H. Valls y Maite Gutiérrez y arranca así: "El precio del alquiler bajó en Catalunya entre el 3% y el 5% en términos interanuales durante el primer semestre del año, según los datos de la Generalitat que avanzó este jueves la consellera de Territori, Habitatge i Transició Ecològica, Sílvia Paneque. El Govern considera este descenso en los arrendamientos como un indicio de que la declaración de una gran zona tensionada en 140 municipios (80% de la población catalana) y la consiguiente aplicación desde marzo del control de precios contemplado en la ley de Vivienda empieza a surtir efecto. “Observamos una leve disminución de las rentas del alquiler”, afirmó Paneque tras participar en la conferencia sectorial de Vivienda celebrada en Madrid. “En cualquier caso veremos si hay otros impactos”, añadió, haciendo referencia a la posibilidad de que la oferta de alquiler tradicional haya disminuido en los últimos meses. La Conselleria tiene previsto ofrecer las cifras oficiales completas la próxima semana en el marco del debate de Política General que se celebrará en el Parlament, pero Paneque ya apuntó que el Govern detecta un cierto impacto de la medida".

Sigue la pieza: "El índice de precios que a día de hoy aplica exclusivamente en Catalunya es de obligado cumplimiento para los nuevos contratos que firmen los inquilinos de grandes tenedores de vivienda y para los nuevos acuerdos que se incorporen al mercado siempre y cuando la vivienda no haya estado en alquiler en los últimos cinco años. En el caso de los pequeños propietarios, estos no están obligados a acogerse al índice estatal sino que tienen que referenciar sus alquileres, siempre en las zonas tensionadas, a los precios del contrato anterior. A Catalunya se le sumará pronto el País Vasco. El consejero de Vivienda y Agenda Urbana, Denis Itxaso, adelantó hoy que su Ejecutivo prevé declarar “zona tensionada” las tres capitales de provincia –San Sebastián, Bilbao y Vitoria–, así como Irún (Guipúzcoa), Galdácano (Vizcaya), Zumaya (Guipúzcoa) y Lasarte-Oria (Guipúzcoa). También lo hará Errentería".

Y: "El balance parcial ofrecido por Catalunya contrasta con las referencias de los portales inmobiliarios privados, que siguen apuntando a un incremento de los precios y a un descanso de la oferta del alquiler tradicional. Idealista concreta un crecimiento de las rentas del 0,4% en Catalunya en el último trimestre y a un incremento del 9,1% interanual. El portal sí identifica una bajada de los precios en el último trimestre en las provincias de Girona, Tarragona y Lleida. En la de Barcelona se produjo una subida del 2,1%. Desde la Cambra de la Propietat Urbana de Barcelona sí observan una bajada en el precio del alquiler en el segundo trimestre. Ahora bien, matizan que en este periodo se suele producir un descenso, por lo que podría producirse cierto efecto estacional, señala el gerente de la entidad, Òscar Gorgues. Asimismo, la Cambra apunta que la superficie media de las viviendas de los nuevos contratos ha disminuido, lo que también influiría en los precios. Para Gorgues, el impacto de la ley de Vivienda en el mercado del alquiler ha de tener en cuenta también la disponibilidad de inmuebles. En este sentido, afirma que la Cambra ha detectado un descenso en el número de contratos firmados, que casi iguala a los que se acaban. “Esto indicaría que el mercado de alquiler se está frenando”, sostiene. En el primer trimestre (últimos datos públicos disponibles) se firmaron en Barcelona 9.826 contratos con un precio medio de 1.193,41 euros al mes. En el conjunto de Catalunya –teniendo en cuenta tanto las zonas declaradas tensionadas como las que no lo son–, los contratos ascienden a 34.503 entre enero y marzo, según datos de la Generalitat, con un precio medio de 868,85 euros".

Más noticias inmobiliarias. "Barcelona cerrará el supermercado 24 horas de la histórica Casa Heribert Pons", señala Metrópoli Abierta. En el sumario se explica que "El propietario, de origen asiático, no solicitó la autorización pertinente para abrir el colmado ni pidió permiso para hacer las obras en el interior del inmueble". El asunto tiene su enjundia. La Casa Heribert Pons era la sede de la consejería de Economía que la Guardia Civil trató de registrar el 20 de septiembre de 2017 en el marco de las operaciones para desactivar el referéndum ilegal del 1-O. Frente a ese edificio se concentró la multitud independentista llamada a impedir el registro. Ahí estaban desde primera hora personajes como Joan Tardà, el ínclito Rufián y todo aquel que se preciara de pintar algo en el independentismo.

Antes de la información, un par de líneas más de contexto. El edificio fue adquirido en los años ochenta por la Generalitat a instancias de Ramon Trias Fargas. Y fue en 2013 cuando el entonces consejero de Economía Andreu Mas-Colell decidió sacarlo a subasta ante las graves dificultades financieras que presentaba la administración autonómica. Fue adquirido por algo más de 23 millones de euros por una compañía italiana, la farmacéutica Angelini, que firmó un acuerdo para que la consejería permaneciera durante unos años en régimen de alquiler. Total, que a principios de esta década la Generalitat abandonó el edificio para irse a la Zona Franca, en un lugar, por cierto, donde no se habría manifestado ni el Tato.

Y ahora, el oprobio. Un supermercado 24 horas donde los Jordis cobraron fama y notoriedad subidos a los todoterrenos de la Guardia Civil. En vez de unos bustos de Cuixart y Sànchez conmemorativos de la heroica jornada independentista, productos de alimentación, higiene y maletas.

La información de Metrópoli es de Clara Fernández y dice así: "El Ayuntamiento de Barcelona dictará una orden de cese al supermercado 24 horas ubicado en la planta baja de la histórica Casa Heribert Pons, en Rambla Catalunya, dos meses después de su apertura. Una inspección realizada el 6 de agosto concluyó que el local no dispone de licencia de actividad, con lo que procederán a precintarlo. El propietario, de origen asiático, no solicitó la autorización pertinente para abrir el supermercado ni pidió permiso para hacer las obras en el interior del inmueble (necesarias, pues se trata de un edificio protegido y catalogado como Bien de Interés Local). Por ello, el consistorio abrió dos expedientes de disciplina urbanística: uno por obras terminadas sin permiso y otro por actividad sin permiso; según ha avanzado La Vanguardia".

Continúa el exto: "Estos expedientes, que obligan a enmendar deficiencias y solicitar permisos correspondientes, fueron notificados a los propietarios. Finalizado el plazo de presentación de alegaciones, que ha sido nulo, se ha dictado una orden de cese. Fuentes del consistorio han asegurado, tras este polémico caso, que serán “contundentes e inflexibles contra la actividad irregular e ilegal” y que el Ayuntamiento de Barcelona está en proceso de restablecer la legalidad urbanística. Según explicó Metrópoli hace dos meses, el propietario del supermercado posee una decena de negocios semejantes en Barcelona, la mayor parte de ellos ubicados en el Eixample. Justo enfrente de la Casa Heribert Pons también dispone de otro colmado 24 horas, en el número 22 de la propia Rambla Catalunya".

Y: "Se desconoce el alquiler que paga el dueño del supermercado a la propiedad, pero en Rambla Catalunya el precio del metro cuadrado es de 87 euros mensuales, según pudo saber este medio. Tomando como partida esta referencia, el colmado pagaría más de 20.000 euros de alquiler cada mes. Y no es para menos: Rambla Catalunya, con un 96% de ocupación, es uno de los bulevares más cotizados de Europa. (...) La Casa Heribert Pons fue construida en 1907 por Alexandre Soler, en pleno esplendor del modernismo. Del edificio destacan los detalles de los balcones –obra de Eusebi Arnau–, que son alegorías al arte, la pintura, la música, la literatura y la escultura. Su promotor, Heribert Pons Arola, era un empresario de Manresa que quería un edificio residencial que reflejara el esplendor de la época. El resultado fue una estructura imponente, con una fachada que muestra una fuerte influencia del estilo Sezession de Viena".

De modo que el edificio dejará de albergar un badulaque, el tipo de establecimiento que subleva a quienes recuerdan los sucesos acaecidos en el lugar.

Política. O más política. "Puigdemont sueña con Zapatero de mediador tras el fiasco de la cita con Santos Cerdán", señala un titular de El Confidencial. La información es de Antonio Fernández: "El fugado Carles Puigdemont se ha hartado de Santos Cerdán, el mediador que Pedro Sánchez envió a Suiza para negociar el apoyo de Junts al Gobierno español. Cerdán ya había negociado el apoyo de los posconvergentes a la investidura del líder socialista el año pasado y para ello, se trasladó en varias ocasiones tanto a Suiza como a Bélgica. Pero ahora, y tras el fiasco de la última cita en Suiza, el líder de Junts quiere a alguien con mayor peso. Cerdán es un hombre de partido y, como tal, no habla directamente en nombre del Ejecutivo, sino del aparato del PSOE. Por eso, dice Puigdemont, no tiene la trascendencia de otros posibles candidatos. A Moncloa se ha hecho llegar el malestar de Puigdemont sobre las negociaciones. El fugado repite a su entorno más cercano que Pedro Sánchez le ha engañado y de ahí el alejamiento político y los sucesivos castigos a que Junts ha sometido al Gobierno, tumbándole varias votaciones en el Congreso. Pero la cosa se puede enmendar, de momento, cambiando el mensajero: Puigdemont sueña con que tome las riendas otro interlocutor. Y el preferido de Puigdemont es alguien que sabe muy bien lo que es hacer de mediador para Sánchez: el expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero".

Y: "Para Puigdemont, el nombre de Zapatero le daría otra dimensión a la negociación, puesto que es el comodín que Sánchez utiliza para resolver asuntos delicados de ámbito internacional, como la salida del opositor Edmundo González de Venezuela para pasar a exiliarse en España. Zapatero, según fuentes bien informadas, también ha estado negociando muy discretamente otras cuestiones empresariales con el régimen venezolano. Si Zapatero, que mantiene muy buenas relaciones con la cúpula del independentismo, llegara a pilotar las negociaciones, el líder de Junts habrá conseguido un sueño. De hecho, según algunas fuentes, el expresidente socialista ya mantuvo discretos contactos con la cúpula de JxCat el año pasado, tras las elecciones del 23 de julio y fue el encargado de sondear en un primer momento las posibilidades de un pacto y de llevar a Sánchez los posicionamientos de esta formación. El objetivo de la estrategia de Puigdemont es doble, según varias fuentes consultadas por El Confidencial: por un lado, quiere dotar a las negociaciones de un mayor compromiso; en segundo lugar, quiere vengar las ‘mentiras’ de Pedro Sánchez a Junts. Por eso, el acto final de este deseo de Puigdemont para sostener al Gobierno de Sánchez sería una reunión con foto entre Pedro Sánchez y él mismo en un terreno neutral".

Y mientras Puigdemont elucubra con una estampa con Sánchez, "Artur Mas apremia a Junts para que elija quién liderará la oposición en Cataluña", según destaca El País. En el subtítulo se explica que "Puigdemont renuncia a liderar la fiscalización a Illa en el Parlament y su antecesor en la Generalitat alerta de la necesidad de visualizar una “alternativa potencialmente ganadora”". Y ahí es donde aparece el hombre que lo echó todo a perder dando consejos, el tal Mas. Escribe Marc Rovira: "Tras la derrota sufrida en las elecciones catalanas del 12-M, Junts per Catalunya busca la manera de no aparecer públicamente como un segundón. Carles Puigdemont ha descartado ejercer de jefe de la oposición y su partido ha confirmado que nadie le sucederá en el papel de fiscalizador del Govern que comanda Salvador Illa. Para Junts el nombre hace la cosa y se ha decidido relegar el término “oposición” para dar prioridad al concepto “alternativa”. El juego semántico forma parte del plan que el expresident ha expuesto esta semana en Waterloo (Bélgica), durante unas jornadas de trabajo con su grupo parlamentario. La decisión se asume sin aspavientos internos, pero el expresidente Artur Mas, que no es militante de Junts pero exhibe total afinidad con la formación continuadora del legado de Convergència, ha advertido que si Puigdemont renuncia a la figura de opositor, el partido no puede quedarse inmóvil: “Si no lo hace él, alguien tiene que hacerlo”, manifestó este jueves en una entrevista en Catalunya Ràdio".

Sigue la nota: "“No asumiremos el cargo de jefe de la oposición, ni los cargos de confianza que se deriven, pero sí el rol que las urnas nos han dado de ser la alternativa al Govern del president Illa, una alternativa que necesita Cataluña”, ha anunciado, desde Waterloo, el presidente del grupo parlamentario de Junts, Albert Batet. “Nosotros no hemos venido a hacer oposición. Venimos a construir una alternativa fuerte, potente, a favor de los catalanes y las catalanas, que haga que se respete Cataluña y que evidencie que la dependencia de Madrid no es buena para los catalanes”, ha sentenciado. Solo una voz ha salido del entorno de Junts a criticar el planteamiento. El expresident Artur Mas ha dicho que considera “lógico” el argumento de Batet pero al mismo tiempo ha advertido a Junts que no está en disposición de hacer ninguna renuncia en la Cámara. “Alguien tiene que hacerlo”, ha manifestado Mas, en relación con el rol de jefe de la oposición, recogido dentro del reglamento del Parlament. Igualmente, el expresidente ha señalado que la formación fundada por Puigdemont “no solo tiene que ser un partido que resiste a las elecciones sino que tiene que ser capaz de organizarse para ser una alternativa potencialmente ganadora”".

Y: "A la espera de saber qué situación le depara la ley de amnistía, Puigdemont tiene previsto mantener su escaño en el Parlament, pero sin asumir el rango de jefe opositor. De acuerdo con el reglamento de la Cámara, tiene derecho a ese reconocimiento el presidente del segundo grupo parlamentario más votado. El cargo confiere derecho a un tratamiento protocolario específico y conlleva retribuciones personales y extras para asesores, además que suele implicar poder aparecer en una entrevista institucional en la televisión pública catalana. Durante el Govern de Pere Aragonès, el socialista Salvador Illa asumió la condición de cara visible de la oposición. Illa, además, inventó un Govern Alternatiu y trató de darle credibilidad y empaque".

De vuelta a las noticias que más afectan al común, El Periódico destaca un informe de la Cámara de Comercio. "'Generación sándwich': Más de 33.000 personas en Catalunya cuidan de sus padres, hijos y también trabajan". La historia viene con la firma de Gabriel Ubieto: "Unas 60.000 personas en Catalunya forman lo que se ha venido a denominar 'generación sándwich'. Es decir, están en una edad bisagra en la que tienen a unos padres ancianos ya y dependientes que necesitan cuidados, a la vez que todavía están a cargo de sus hijos, que son menores de edad. Más de la mitad de esa 'generación sándwich', más de 30.000, hacen equilibrismos para cuidar a sus familiares y a la vez trabajar para llevar ingresos al hogar. Y, perpetrando parte de los roles de género, ese contorsionismo conciliador es más habitual entre mujeres, que entre hombres. Todo ello tiene un importante desgaste en la salud de los cuidadores, hasta el punto de que el 40% reconoce haber visto deteriorada la suya. Estas son algunas de las conclusiones de la radiografía que ha publicado este jueves la Cambra de Comerç de Barcelona junto a la cooperativa Suara sobre el impacto social y económico de los cuidados informales en Catalunya. Un sector, el de cuidado a las personas por familiares sin una relación contractual de por medio, que movería anualmente si se remunerara como un trabajo reconocido el equivalente a unos 10.105 millones de euros, una cifra que representa el 4,1% del PIB catalán".

En términos de salario bruto serían algo más de 4.000 euros al mes (unos 2.800 netos) lo que cobrarían los familiares cuidadores en caso de estar remunerado su trabajo. El texto de Ubieto sigue así: "En Catalunya, de los siete millones de catalanes, aproximadamente 150.780 personas dedican una parte muy relevante de su tiempo a cuidar de algún familiar. De estas, el 40% cuidan tanto a sus padres -o un familiar de una generación precedente- como a sus hijos -o un familiar de una generación posterior-. Es decir, unas 60.000 personas, de las que 40.000 son mujeres y 20.000 hombres. A estar pendientes de sus familiares dedican más de lo equivalente a una jornada laboral, concretamente 52,4 horas a la semana. Y la mayoría de ellos, además, trabajan. Lo que, en muchos casos, supone un torpedo a su vida personal, especialmente en el caso de las mujeres, que dedican más horas a los cuidados que los hombres y compaginan, en mayor proporción, trabajo y cuidados. "Las mujeres se han visto más afectadas por la reducción de su tiempo de ocio, tienen más dificultades para irse de vacaciones y tienen más conflictos con su pareja debido a la dedicación de los cuidados", reza el informe".

4 de octubre, santoral: Francisco de Asís, Aurea de París, Petronio de Bolonia y Quintín de Turón.

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