Feijóo ofrece el PP a Sánchez y caos diplomático en Bolivia
El dirigente popular insiste en que Sánchez tiene otra alternativa al pacto con ERC. Bolivia acusa a España de intentar sacar de la embajada mexicana a un exalto cargo de Morales
29 diciembre, 2019 09:09Prosigue la murga de la investidura, sainete republicano con la Abogacía del Estado y la Junta Electoral Central como excusas para dilatar las negociaciones, estirar la goma y apurar el chicle. La historia causa mucha fatiga, pero resulta inevitable. Está en las portadas. Así, El Mundo asegura que "Sánchez bloquea una respuesta de los barones al pacto con ERC"; La Razón lleva una entrevista con Alberto Núñez Feijóo en la que el presidente gallego hace de Casado y dice que "Sánchez tiene otra alternativa, el PP es un partido de Estado" y La Vanguardia ataja por la vía de las honduras del acuerdo entre socialistas y Podemos y advierte ufana que "PSOE y UP ultiman un programa con acento social y feminista".
También hay medios que tratan de esquivar lo evidente, como El País, que recurre a la estadística social y afirma que "España reduce al 50% la migración irregular pero crece la vía canaria". También El Periódico se sale del carril y avisa a sus lectores sobre las inminentes restricciones, con moratoria de cuatro meses, a los vehículos más contaminantes en Barcelona. Se acaba el año con más elecciones de la historia de la democracia y todavía no hay Gobierno en Madrid. La circunstancia, sin embargo, no ha causado ningún cataclismo tectónico. Hay una cierta afectación sobre la economía, pero nada que ver con una catástrofe. Años atrás, Bélgica se tiró meses y meses sin poder formar gobierno y ahí sigue, con sus cosas de flamencos y valones.
Mientras PSOE y ERC ultiman y no acaban el pacto de la investidura, el presidente de la Junta de Galicia, el antecitado Alberto Núñez Feijóo ejerce de presidente del partido de Pablo Casado y le dice a Sánchez desde La Razón que otro acuerdo es posible. Firma la entrevista Carmen Morodo:
–"Dicen que ustedes no dan su abstención a Sánchez, pese a ese coste que lamenta que haya que pagar por esta situación, porque, precisamente, creen que el «cuanto peor mejor» les beneficia electoralmente.
–¿Quién dice eso?
–Está en las interpretaciones que se hacen de la posición que fijaron tras el 10-N.
–No ha habido ni una sola propuesta de gobernabilidad de Sánchez al PP. El mismo día que nos enteramos, a la vez que todos los demás españoles, del acuerdo con Podemos, hicimos en público la oferta de que se dejase sin efecto ese preacuerdo y nos pusiéramos a hablar. Desde ese día hasta el lunes pasado, cuando se celebró la reunión de Sánchez con Casado, no hubo ni un solo ofrecimiento por su parte de acuerdo ni de diálogo.
–Insistía antes en que «sí había otras alternativas». ¿Y sigue habiéndolas? ¿Hay todavía margen para que el PP se abstenga o ese camino está cegado?
–El PP sigue siendo un partido de Estado. Y ante una propuesta de coalición o de pacto de Legislatura, si volvemos a la casilla de salida, si se abandona el precipicio independentista y si se deja sin efecto el gobierno de coalición con la extrema izquierda, cosa que no ocurre en ninguna parte de Europa, nosotros estaremos donde hemos estado siempre.
–Casado no parece estar en eso. Ya ha dicho que su obligación es ser el líder de la oposición, sin más alternativa.
–El problema no está en Casado, sino en que Sánchez está aplicándole a Casado el «no es no» que usó contra Rajoy. Desde distinta posición, pero es el mismo «no es no». Los que hemos defendido una alternativa a este Gobierno desde el 10 de noviembre cada día tenemos menos esperanza porque hemos comprobado que el candidato socialista no está dispuesto a moverse de ese «no es no»".
El pacto ya formalizado es el del PSOE y Unidas Podemos, aunque todavía está abierto a mejoras o es susceptible de empeorar, según se mire. En La Vanguardia baten palmas a favor del acuerdo entre socialistas y podemitas en una pieza que firma Pedro Vallín. Primero recuerda la época Zapatero en tono francamente elogioso: "El expresidente del Gobierno socialista José Luis Rodríguez Zapatero dio toda una lección, entre el 2004 y el 2011, de programa legislativo sin coste presupuestario, con la ampliación de los derechos políticos (más que sociales) de la ciudadanía: el divorcio exprés, el matrimonio homosexual, la ampliación de la ley del aborto, la ley antitabaco, la ley de Memoria Histórica, el carné por puntos... fueron algunas de las medidas de hondo calado social que no tenían impacto relevante en los Presupuestos y que sin embargo eran leídas como un proyecto ambicioso de modernización".
Después, anticipa algunas de las medidas del futuro Gobierno: En el caso de la agenda del ejecutivo que planean PSOE y Unidas Podemos, más que de ampliación de los derechos, el eje será su recuperación, rehabilitarlos tras las severas amputaciones de los gobiernos de Mariano Rajoy. En tal sentido, la intensidad con la que se reescriban dos leyes del PP permitirá medir la ambición del proyecto: la última reforma laboral y la llamada ley mordaza --como se conoce al endurecimiento de la ley de Seguridad Ciudadana--. (...) Por una parte, una derogación parcial y urgente de los artículos que han afectado más seriamente a los derechos de los trabajadores, así como una subida paulatina del salario mínimo interprofesional, hoy en 900 euros, tras el pacto de PSOE y Unidas Podemos del 2018, y que podría situarse a corto plazo en los mil. En un segundo momento, se abordará la redacción de un nuevo Estatuto de los Trabajadores, que el PSOE siempre ha llevado como bandera".
En el plano internacional continúa la bronca diplomática con Bolivia por el incidente a las puertas de la embajada mexicana en La Paz. Espinoso expediente. Las nuevas autoridades bolivianas extienden la tesis de que el Gobierno de España quería sacar de la embajada mexicana a un exalto cargo de Evo Morales implicado en delitos de narcotráfico y difunden la especie de que en Podemos no les llega la camisa al cuello por el dinero que supuestamente habría pagado Morales a empresas supuestamente vinculadas con el partido de Iglesias. Como cabría esperar, tales teorías encuentran encaje en España. El Gobierno, por su parte, niega la mayor y pide explicaciones a La Paz sobre la encerrona sufrida por los agentes españoles.
En El Mundo se ocupan del vidrioso asunto Pablo Herráiz y Daniel Lozano, que escriben: "A la espera de los resultados de la investigación ordenada por Exteriores, el incidente del viernes en las inmediaciones de la residencia de la embajadora de México "pudo ser una encerrona preparada", según manejan fuentes de Interior y círculos diplomáticos. El conflicto entre los dos países americanos ha provocado que la Embajada mexicana esté vigilada permanentemente, y por eso se sospecha que "alguien informó" de la llegada de la diplomática española para realizar esta visita a su homóloga mexicana".
Sigue la información: "Los policías españoles acudieron este viernes a recoger a Cristina Borreguero, encargada de Negocios y embajadora ad interim, ya que el embajador se encuentra de vacaciones. Se trata de uno de sus trabajos habituales, ya que por protocolo de seguridad acompañan siempre al principal representante diplomático español. (...) Es precisamente uno de los ciudadanos que hostiga a los agentes españoles a la entrada de la urbanización donde se encuentra la residencia de la embajadora mexicana el que pone en marcha la tesis de la fuga: "Un vehículo con placas diplomáticas y gente encapuchada que están queriendo ir a rescatar a Juan Ramón Quintana, el delincuente", gritó mientras grababa el interior del vehículo con su teléfono móvil. Desde ese mismo instante, tal afirmación se convirtió en uno de los principales puntos retóricos de los medios cercanos al gobierno de Jeanine Áñez y de su mano derecha, el ministro Arturo Murillo, quien ayer insistía en que evitaron una fuga, y además pidió la sustitución del personal diplomático español por otro. No obstante, el gobierno de La Paz no ha aportado ninguna prueba al respecto".
Actualidad catalana. Neus Tomàs entrevista en El Diario a Artur Mas, quien saca pecho de su etapa al frente de la Generalitat, admite que la sociedad está partida, pero insiste en el derecho a decidir y en que el proceso nació en la calle:
-"Algunos de sus adversarios le han reprochado que usted cambió las tijeras por la estelada.
-Esto es una tontería absoluta. Se puede insistir en la tontería, no hay impedimento para eso en la vida, y sigue siendo una tontería por mucho que se insista en ello. Los recortes eran absolutamente obligados, los hicieron todos los gobiernos europeos, los de izquierdas, los de súperizquierdas, los liberales, los de derechas, los de súperderechas... Todo el mundo recortó, porque las normas en Europa, nos guste o no, son las de la austeridad y el control del déficit. Por lo tanto, una cosa era una política obligada, en términos europeos, de ajuste de las cuentas, y otra muy distinta era cómo se resuelve el conflicto permanente entre Catalunya y el Estado español. En este caso era cómo se orienta el tema soberanista que, recuerde usted, fue algo que nació en la calle y no en los despachos. No fueron los políticos los que se lo inventaron, sino mucha gente que se movilizó".
-Otra frase que ha hecho fortuna, parafraseando a Gerard Piqué, es que con usted empezó todo.
-Eso me dicen, tanto los que están favor como en contra.
-¿Le molesta o le halaga?
-Depende, forma parte del juego. Los que están a favor de lo que está pasando en Catalunya y apoyan el derecho a decidir me reconocen que efectivamente conmigo empezó todo, me lo alaban e incluso los hay que me piden fotos con ellos. Después hay otros que lo que hacen es criticarme duramente e incluso insultarme, con el mismo argumento, con el 'contigo empezó todo'".
Puigdemont llama a los suyos a no dar la brasa en Estrasburgo. Recoge la "crida" Xavi Tedó en Ara bajo el siguiente titular: "Omplim Estrasburgo desconvoca la marxa per acompanyar Puigdemont i Comín a petició del Consell per la República". Del texto: "El col·lectiu Omplim Estrasburg, que havia convocat una manifestació el 13 de gener a la ciutat francesa per acompanyar l'expresident Carles Puigdemont i l'exconseller Toni Comín en el seu desembarcament al Parlament Europeu, ha desistit d'organitzar la marxa perquè el Consell per la República considera que les protestes s'han de vehicular a les institucions espanyoles".
Se conoce que en Francia ya tienen bastante con sus propias manifestaciones.
Por otra parte, sostiene Javier Cercas que Cataluña vivió una situación prebélica en 2017 que no acabó como el rosario de la aurora porque "España es una democracia y existe la Unión Europea".
Sorprendente tuit de Pere Vigo, miembro de ERC, contra Ramón Cotarelo, que destaca el e-notícies: "L’exalcalde de Ribes de Fresser i exdiputat d’ERC, Pere Vigo, en una piulada a twitter, ha manifestat que “a aquest el Cotarelo, abans de tancar-lo al zoològic, li haurien de donar pel cul amb una canya esquerdada i untada de bitxo!!”".
Es el espíritu navideño del independentismo.
29 de diciembre, santoral: Tomás Becket