Silencio del mundo de la cultura en catalán frente al bulo contra Cercas
Escritores y periodistas ignoran el acoso a Cercas, pese a que éste defendió a Sánchez Piñol cuando fue vetado en el Instituto Cervantes en Amsterdam
15 abril, 2021 00:00“Estamos a punto de vivir un cambio de paradigma en Israel”. Pilar Rahola, periodista y escritora en lengua catalana, está preocupada por Oriente Medio, y por el “fascismo” latente en España. Concede entrevistas sobre el pueblo judío a medios internacionales, pero ¿qué ha pasado con el escritor catalán Javier Cercas? Nada. Rahola guarda silencio. ¿Ha tomado alguna decisión alguna asociación de escritores en lengua catalana? Nada. La AELC, que preside la escritora Bel Olid, consideró este mismo miércoles, en la reunión de su Junta, qué hacer y la respuesta fue no pronunciarse. Silencio. Es una cuestión no sustantiva. No interesa al mundo de la cultura en catalán.
Esa posición muestra una profunda división en el campo de la cultura, además del ámbito político, sin puentes entre escritores o intelectuales que sepan consensuar un denominador común. Y prueba hasta qué punto el proceso independentista no ha sido un proyecto transversal, como sostenían sus dirigentes, en el momento inicial del movimiento, o como han defendido las asociaciones soberanistas, como Òmnium Cultural o la ANC. Esa división, como han señalado los distintos sondeos sociológicos, los que aporta, entre otros organismos, el CEO de la Generalitat, constata que la independencia se apoya entre sectores sociales catalanohablantes y con un nivel de renta mayor.
Operación a propósito
Hay excepciones. Las que mostraron el ensayista e intelectual Jordi Amat o el periodista y analista político Francesc-Marc Álvaro. Los dos señalaron el peligro de que se acose al que piensa diferente. “Todo aquel que escribe y habla en público está en manos de desfiguraciones de otros. Es lamentable cuando eso le pasa a Javier Cercas o cuando le pasa a Quim Torra o a Pablo Iglesias. Y cuando me pasa a mí, que es de vez en cuando. Ahora, no todo el mundo tiene el mismo apoyo para defenderse”, aseguró Álvaro.
El problema es que las defensas de Cercas sólo han llegado desde un flanco determinado. Jordi Amat ha recordado qué señaló Cercas en su alocución en Extremadura, que algunos activistas independentistas descontextualizaron a propósito. Lo ha hecho destacando un artículo del economista Francesc Trillas, en el que sostiene que “la mentira –contra Cercas—estaba basada en una frase ridículamente sacada de contexto de un discurso admirable pronunciado hace unos años, muy celebrado en su momento, en el que el escritor hacía en Extremadura, la región donde nació, un homenaje a la democracia y su propia catalanidad”.
Un boquete en el independentismo
¿Qué ha sucedido? Según Amat, en conversación con Crónica Global, en Cataluña ha surgido “un trumpismo local”, que se ha unido a una parte del independentismo, que no duda en atacar al adversario político. Pero hay algo más. Cercas, en su entrevista en TV3, en el programa FAQS, desarmó al movimiento independentista, porque, en muchas ocasiones lo importante no es el mensaje sino quién defiende un determinado mensaje. Y Cercas lo hace como escritor consagrado, con prestigio crítico y con éxito comercial, “en catalán de Girona, donde ha desarrollado su labor académica y de forma respetuosa”. Y eso supone un boquete en una audiencia que cada sábado por la noche se sienta ante el televisor ávida de una buena dosis de ánimos independentistas.
Pero hay mucho más en esa cuestión sobre el bulo que se ha hecho correr sobre Cercas, según los interlocutores contactados. Javier Cercas sí se pronunció cuando pasó lo contrario. El autor de Anatomía de un instante defendió a Albert Sánchez Piñol cuando el autor de Victus fue vetado por el Gobierno español en un acto en Utrecht, la sede del Instituto Cervantes en Holanda.
La defensa de Sánchez Piñol
Cercas escribió en defensa de Sánchez Piñol en El País –octubre de 2014-- y sugirió que algún escritor no independentista podría renunciar a una invitación similar para demostrar que, se piense como se piense, no se puede vetar y coaccionar la libertad de expresión.
“El Gobierno español temió que el acto de Utretch ‘se politizase’. Se trata de una excusa sin sentido, que delata una ignorancia alarmante sobre lo que es una novela y no consigue enmascarar un acto intolerable de censura (ni un alarde de torpeza política): una ficción no es un libro de historia, pero, si la interpretación de la historia que ofrece no nos convence, lo que hay que hacer es refutarla con datos y razones, no acallarla”, escribía Cercas.
¿Como el 'poeta' Karadzic?
E iba más allá, al dejar caer que él mismo renunciaba a ser invitado en un acto, también en Holanda, con la participación del Instituto Cervantes, en solidaridad con Sánchez Piñol, para “no perder la decencia”. Cercas concluía: “Así que, si un escritor no independentista tuviera previsto un acto público en Holanda organizado por la Embajada española e, incapaz de tomar la palabra donde acaban de arrebatársela a un conciudadano suyo, hubiera decidido cancelar dicho acto, no debería interpretarse este gesto de protesta como una reacción gremialista, sino como un acto de defensa propia: solidarizándose con Sánchez Piñol, el escritor estaría solidarizándose consigo mismo, porque, si a un ciudadano con los mismos derechos que nosotros le quitan derechos, también nos los quitan a nosotros. Seguro”.
Ahora eso no se ha producido con Cercas. El escritor en lengua catalana, Josep Maria Fonalleras, que ya había mostrado diferencias con el escritor de Girona, a cuenta de las diferencias socioeconómicas entre independentistas y no independentistas, ha escrito en El Periódico que hay distintos tipos de escritores, y, sin nombrar a Cercas, lo pone al lado del poeta y asesino serbo-bosnio Radovan Karadzic, el mismo nombre que utiliza el historiador Enric Calpena para cargar contra Javier Cercas.
Según Fonalleras, “a este tipo de personajes (y tenemos ejemplos cercanos) --alusión a Cercas--, lo que les acaba gustando no es la literatura (‘no creo que haya que escribir para cambiar nada’, decía Aira), sino el perfume de la pólvora, por vía intravenosa, como el comandante y poeta Karadzic, o por la vía más discreta de acercarse a los cuarteles para olerla”, en una alusión todavía más directa a Cercas, según ese vídeo descontextualizado.