Lorena Roldán, senadora y diputada de Ciudadanos

Lorena Roldán, senadora y diputada de Ciudadanos

Política

Roldán: "La sociedad catalana está rota, ¿qué hacemos? ¿Quedarnos en casa? ¿Callar?"

La senadora y diputada de Ciudadanos afirma que son los independentistas quienes generan crispación al saltarse la ley y denuncia que "la operación diálogo de Sánchez es mirar hacia otro lado"

4 septiembre, 2018 00:00

Lorena Roldán (Tarragona, 1981) asegura que son los secesionistas, y no Ciudadanos, quienes generan crispación al saltarse la ley. La senadora y diputada de la formación naranja en el Parlament afirma que su partido "no dejará de defender a todos los catalanes que rechazan salir de España y de la UE".

-En medios políticos se habla de un nuevo “otoño caliente” en Cataluña. ¿Gesticulación o ruptura?

-El propio presidente Quim Torra ha avisado de ese otoño caliente. Y está previsto que pronuncie una conferencia (hoy) en la que explicará su hoja de ruta. Pero ya desde el primer día, en su discurso de investidura, dijo que trabajaría para recuperar las leyes suspendidas y declarar la independencia. Ojalá no ocurra. Lo que sí tenemos es un calendario judicial y en sus últimas declaraciones, Torra ha dicho textualmente que “hay que atacar al Estado”. Así lo dijo el aniversario del 17A, cuando politizó con descaro el homenaje a las víctimas de los atentados.

-Su partido pide que se vuelva a aplicar el artículo 155 de la Constitución –intervención de las instituciones catalanas--, pero todavía no se ha producido una desobediencia real...

-Es que el 155 no se debió retirar. Hubo un consenso de las fuerzas constitucionalistas para aplicarlo contra dirigentes que ahora dicen que quieren “atacar al Estado”. Y no solo hay declaraciones. Se ha aprobado una moción en el Parlament en la que se vuelve a plantear el objetivo de la independencia (iniciativa de la CUP apoyada por JxCAT y ERC). Asimismo, estamos viendo  a los independentistas apropiarse del espacio público colocando lazos amarillos en plazas, calles, ayuntamientos o la Generalitat, cuando hay sentencias del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) que lo prohíben. Pero el Gobierno de Pedro Sánchez no hace nada.

Lorena Roldán en una rueda de prensa del Parlament / EP

Lorena Roldán en una rueda de prensa del Parlament / EP

Lorena Roldán en una rueda de prensa del Parlament / EP

-¿Qué debería hacer?

-Debe rectificar porque Torra no es ese  “líder amable” que describió en tras su reunión en Moncloa. La operación diálogo de Sánchez equivale a mirar para otro lado y decir que lo que ocurre en Cataluña es normal. ¿Es normal dar una paliza a una mujer en el parque de la Ciutadella por quitar lazos amarillos?. Lo que tiene que hacer Sánchez es enviar un requerimiento a Torra para que aclare si piensa acatar la Constitución. Si la respuesta es ambigua, se debe lograr el consenso suficiente para aplicar la Constitución y proteger a los catalanes.

-¿Cómo se aplicaría ese nuevo 155?

-El primer paso sería esperar la respuesta de Torra porque lo que está pasando en Cataluña no pasa en ninguna comunidad autónoma. Ese 155 debería controlar las finanzas catalanas porque la Justicia alemana aprobó la extradición por malversación. Pero también se debería hacer extensivo a otras áreas, por ejemplo a los Mossos, que Torra quiere convertir en policía política.

-Sin embargo, las fuerzas constitucionalistas en Cataluña están divididas.

-Hay que pensar en el bien común, no en el partidismo. Los anteriores gobiernos nos han dejado abandonado. Lo de los lazos amarillos no es algo nuevo y vimos inacción por parte de Mariano Rajoy. Por eso, miles de catalanes han salido a la calle porque sienten que nadie les ampara. Existía un consenso entre las fuerzas constitucionalistas, pero Sánchez lo rompió porque está más pendiente de dormir en la Moncloa.

Lorena Roldán es la apuesta de Ciudadanos para las elecciones catalanas / EP

Lorena Roldán es la apuesta de Ciudadanos para las elecciones catalanas / EP

Lorena Roldán en la sede de Ciudadanos de Barcelona / EP

-El presidente español, propone un nuevo Estatut que sea votado en referéndum como vía de solución al conflicto catalán. ¿Qué opina?

-Gobierna a golpe de titular, no tiene proyecto para Cataluña. Dijo que quería celebrar su consejo de ministros en Cataluña, ahora dice lo del referéndum sobre un nuevo Estatut... Lo que debe hacer Sánchez es cambiar de socios. No le queda otra porque viene un otoño complicado. No puede decir que hay normalidad cuando hay palizas y cruces en las playas. Debe rectificar.

-Se ha acusado a Ciudadanos de fomentar la confrontación, de avivar la guerra de los lazos.

-Quienes aumentan la tensión son los independentistas. La sociedad catalana está dividida, está rota por la mitad. Y nosotros damos apoyo a quienes se sienten desamparados. ¿Qué hacemos? ¿Nos quedamos en casa? ¿Nos callamos? No dejaremos de defender millones de catalanes que no quieren salir de España y de la Unión Europea. Quienes crispan son los que se saltan la ley. Carles Puigdemont pone querellas contra jueces del Tribunal Supremo. Torra dice que hay que atacar al Estado.

-¿Cómo valora las consignas independentistas que lanza el Ayuntamiento de Vic por megafonía?

-Si no fuera tan grave se podría calificar de anécdota. Estamos viendo casos muy alarmantes. Como el de un comerciante de Blanes acosado porque no quiere poner lazos amarillos. Lo de Vic supone que unos ‘salmos’ independentistas se cuelan en tu casa. El 21D, Ciudadanos obtuvo 3.000 votos, lo cual supone que esos votantes se ven obligados a oír cada día esas consignas. Sánchez debe actuar y evitar esas situaciones.

-Pronto se cumplirá el primer aniversario de los días 6 y 7 de septiembre, cuando se aprobaron en el Parlament las leyes de ruptura. ¿Cómo recuerda esos días?

-Fueron días muy tristes. Aquello supuso un golpe a la democracia. La Generalitat se saltó todo el ordenamiento jurídico. Lo único positivo fue la unión de las fuerzas constitucionalistas, que nos levantamos y nos fuimos. Aquello no se puede volver a repetir. Hay que estar al pie del cañón porque nos están avisando de que quieren una nueva ruptura y otra declaración unilateral de independencia. Son los mismos y están haciendo lo mismo.

La diputada de Ciudadanos, Lorena Roldán, valora la suspensión de la Barcelona World Race / CG

La diputada de Ciudadanos, Lorena Roldán, valora la suspensión de la Barcelona World Race / CG

Lorena Roldán atendiendo a los medios de comunicación / EP

-El independentismo está muy dividido y ahora hemos visto la narración de cómo Carles Puigdemont dejó solos a los suyos. ¿No cree que el procés se hundirá solo?

-Puigdemont mintió desde el primer momento. Nunca ha sido de fiar. Hay crisis en el independentismo porque el nacionalismo rompe todo lo que toca. Solo les une romper España. Me parece que el ciudadano tenga que sufrir esta crisis. Miles de empresas de han ido de Cataluña por culpa de las decisiones irresponsables de los independentistas. El Parlament está cerrado, no se celebran comisiones, no se puede hablar de listas de espera, dependencia u otros temas urgentes en los que seguro que encontraríamos consensos entre todas las fuerzas políticas.

-¿Un adelanto electoral sería bueno o malo para desencallar el conflicto?

-Todo está en manos de Puigdemont, un fugado de la Justicia que decide el futuro de Cataluña. Necesitamos estabilidad y eso no pasa por elecciones. La solución pasa por volver a la normalidad y tener dirigentes que acaten la Constitución y se dediquen a trabajar. En el Parlament hay 2.000 iniciativas pendientes de resolver, la mitad son de Cs. Tenemos un pleno pendiente sobre la recuperación de la convivencia que los independentistas quisieron impedir. Es más urgente que nunca que podamos hablar de cómo volver a coser la sociedad catalana. Ya no es un tema de Cataluña contra España. El primer diálogo que se debe recuperar es entre los catalanes.

-Se acerca la Diada del 11 de septiembre ¿cómo la vivirá su partido?

-Nos gustaría que fuera la fiesta de todos los catalanes, pero el Gobierno de la Generalitat y las asociaciones independentistas han patrimonializado ese día. Por tanto, los catalanes no pueden disfrutarlo. También lo hemos visto en las fiestas mayores de las ciudades. Invadir el espacio público y patrimonializar la Diada es expulsar a los catalanes no independentistas. El hartazgo generalizado ha llevado a muchos catalanes a salir a la calle y decir ¡basta ya!.