La Generalitat da 267.000 euros a Plataforma per la Llengua para una actividad en diciembre
El Saló del Gaming, organizado por la entidad ultranacionalista catalana, ha recibido 133.000 euros de la Consejería de Cultura, 98.000 de la de Empresa y Trabajo y 36.000 de Presidencia
20 diciembre, 2023 19:31Noticias relacionadas
La Generalitat de Cataluña ha dado un total de 267.000 euros a la una de sus entidades afines, Plataforma per la Llengua, para organizar el Saló del Gaming (SAGA), celebrado los pasados 1, 2 y 3 de diciembre en La Farga de L’Hospitalet (Barcelona).
Según desvela El Triangle, así lo ha reconocido la consellera de Cultura, Natàlia Garriga (ERC), en respuesta a una pregunta que le formuló por escrito el diputado no adscrito Antonio Gallego, y que publicó el Boletín Oficial del Parlament del 5 de diciembre.
Desglose
La mayor aportación de la Generalitat a este evento llegó, de hecho, desde la propia consejería de Garriga, con 133.000 euros. Desde la de Economía y Trabajo se aportaron 98.000 euros, y por parte de la conselleria de Presidencia, 36.000.
Asimismo, la Corporació Catalana de Mitjans Àudiovisuals (CCMA) -el ente público que gestiona TV3 y Catalunya Ràdio- también colaboró con el salón, entregando unos premios a autores de videojuegos en catalán.
La de este año fue la segunda edición del Salón organizado por Plataforma per la Llengua, que lo define como "la fiesta mayor de las comunidades catalanohablantes de los videojuegos".
Subvenciones millonarias de la Generalitat
La actividad de Plataforma per la Llengua, a la que la Generalitat de Cataluña ha asignado medio millón de euros en subvenciones en sus Presupuestos de 2023, y a la que ha concedido más de tres millones de euros públicos en los últimos cinco años, abarca un sinfín de ámbitos: desde alentar y recoger quejas contra empresas y trabajadores, tanto del sector público como del privado, que no utilizan este idioma -célebres fueron sus lamentos por la contratación de enfermeras andaluzas en Cataluña en plena crisis del Covid, o su señalamiento a una sanitaria andaluza por expresar su rechazo a hacer la prueba del nivel C1 de catalán-, hasta tratar de imponer que los niños se comuniquen en catalán hasta en los patios de las escuelas, donde el castellano está excluido como lengua también vehicular.