Élite Taxi plantea que la nueva ley del sector exija conocer el catalán

El sindicato Élite Taxi ha planteado que la nueva ley catalana que regulará el sector del taxi y de los vehículos de alquiler con conductor (VTC) que se negocia con la Generalitat incluya la obligación de conocer el catalán.

El portavoz de Élite Taxi, Tito Álvarez ha asegurado que se sienten "hartos de que se diga que hay taxistas que no conocen ni el catalán ni el castellano", según declaraciones difundidas por El Nacional.

Examen de catalán para trabajar

Por ello, aprovechando que en Cataluña se negocia una nueva ley del sector, proponen que se programen cursos de reciclaje de catalán y que se exija la comprensión de esta lengua para trabajar como taxista y en el sector en general.

Según Álvarez, esos conocimientos del idioma incluyen comprenderlo y hablarlo, razón por la cual propone que todos los profesionales del sector superen una prueba de presencia oral y, "quien no la pase, no podrá ejercer".

Conocimiento "indispensable"

El portavoz de Élite Taxi sostiene que no reclaman que se exija el nivel C de catalán, pero sí superar ese examen al que alude para, según él, "mejorar el acceso a la profesión", haciendo que sea "indispensable un buen conocimiento del catalán".

Tito Álvarez también se queja en las que, según él, se presentaron certificados de idiomas falsos sin comprobar si éstos se dominan.

Endurecimiento del régimen sancionador

El sindicato, asimismo, reclama a la Generalitat que endurezca "el régimen sancionador con aquellos taxistas que estafen o realicen fraudes ejerciendo a la profesión”. Una propuesta que trasladó al Govern secesionista en una reunión el pasado martes con la Consejería de Territorio en la negociación sobre la nueva ley autonómica que regulará el transporte público de vehículos de hasta nueve plazas. Entre ellos, el funcionamiento del taxi, de los VTC y de las plataformas de intermediación. La Generalitat prevé tener el borrador ya hecho antes de acabar 2023 y que entre en vigor el verano que viene.

En la actualidad, el Instituto Metropolitano del Taxi (IMET) exige un dominio mínimo de catalán y castellano, además de un conocimiento del sector antes de obtener la autorización para el transporte de pasajeros.