El desempleo y el PIB per cápita mantienen la calificación del Ayuntamiento de Barcelona en A-

El Ayuntamiento de Barcelona es una institución fiable. Así lo determina EthiFinance en su último informe sobre la capital catalana, un municipio que mejora en el perfil de riesgos estimados gracias a que presenta “tasas de desempleo más bajas y niveles de PIB per cápita por encima de la media nacional”. Todo ello permite que se mantenga la calificación de A- que ya se consiguió en la anterior valoración de la agencia, pero con “tendencia estable”.

Los principales riesgos de la primera institución de la ciudad no aparecen por acción propia. El consistorio sufre por las “incertidumbres geopolíticas, la inflación y el endurecimiento de las condiciones financieras”, hecho que ha frenado la buena marcha económica de la ciudad en el arranque del ejercicio en curso.

El Producto Interior Bruto (PIB) local creció el 6,6% en el cierre de 2022, cifra que mejoraba la tendencia de crecimiento iniciada en 2021, el ejercicio en que la actividad se normalizó de forma paulatina tras el frenazo que implicó el estallido de la crisis del Covid. Esta dinámica se mantuvo en el primer trimestre del ejercicio en curso, que cerró con un avance económico del 4,3%, pero se frenó de forma destacada de abril a junio. El segundo trimestre el ritmo de expansión se quedó en el 2,1% y la estimación de EthiFinance es que “la tendencia a la baja persista hasta el cierre del año”. De nuevo, por el contexto internacional.

Alerta por la fragmentación política

La agencia sí alerta del “clima de fragmentación política” que vive el Ayuntamiento de Barcelona. Recuerda que el anterior equipo de gobierno, el liderado por Ada Colau, tuvo muchas dificultades para aprobar los presupuestos de 2023. Consiguió la abstención de ERC sobre la bocina y evitó de este modo someterse a una cuestión de confianza para contar con cuentas públicas, un mecanismo al que los comunes recurrieron en 2017 (y que se puede activar dos veces por mandato).

El Ayuntamiento de Barcelona celebra el plenario del Consejo Municipal de septiembre Ajuntament de Barcelona Barcelona

“Las elecciones de mayo no resolvieron esta fragmentación”, señala EthiFinance, hecho que plantea “desafíos adicionales para el gobierno en minoría y la aprobación de los presupuestos para 2024”. De hecho, la agencia ve factible una prórroga de las cuentas públicas de la capital catalana ante la imposibilidad del PSC de conseguir los apoyos necesarios para aprobar su primera gran hoja de ruta económica de la ciudad, la ley más importante de cualquier corporación local.

Efectos colaterales de la investidura de Pedro Sánchez

Cabe recordar que el último presupuesto de Barcelona alcanzó los 3.600 millones de euros. El alcalde, Jaume Collboni, tuvo que retirar hace cinco días su propuesta antes de que se votase en la Comisión de Economía por falta de apoyos. Los socialistas se toparon con un rechazo frontal de la oposición -Junts, Comunes, ERC, PP y Vox- al proyecto de ordenanzas fiscales, la otra gran política local, y evitaron abrir el debate sobre las cuentas públicas. Ahora, intentan acercar posiciones con los principales partidos con representación local, empezando por los neoconvergentes de Xavier Trias.

El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, en el pleno de septiembre Ajuntament de Barcelona Barcelona

A nadie se le escapa que los avances en este sentido están muy ligados a lo que ocurra en Madrid con la negociación de investidura de Pedro Sánchez. Por lo que, de nuevo, lo que ocurra en Barcelona estará determinado por factores externos a la ciudad.

El desempleo crecerá

La dualidad del mercado laboral y la alta tasa de desempleo juvenil son otros retos a los que el equipo de Collboni debe hacer frente. Según la valoración de la agencia, aunque los niveles de PIB per cápita son “sustancialmente” superiores a la media nacional, las proyecciones de la ciudad muestran un crecimiento del desempleo. Se espera que alcance del 8%, una cifra peor que la actual pero que aún es inferior a la registrada antes de la pandemia.

Más optimista es EthiFinance ante la “sólida posición fiscal y de liquidez” del ayuntamiento. Destaca que Barcelona “mantiene un nivel de ahorro bruto positivo y se espera que continúe esta tendencia”, por lo que puede hacer frente de forma solvente a los “desafíos económicos” que surjan.

La deuda crece, pero es sostenible

También aplaude los datos de ejecución presupuestaria. Manifiesta que los gastos incrementan respecto a los de 2022, “lo que podría resultar en un margen fiscal menor de lo esperado al cierre” del ejercicio en curso. La deuda pública también ha crecido en niveles absolutos, pero se mantiene por debajo del límite del 60% de los ingresos corrientes. Es decir, es sostenible.

Personal de seguridad ante el Ayuntamiento de Barcelona Cedida

También se destaca que los “plazos de pago a proveedores son muy bajos, cumpliendo con el límite legal” que otorgan la fortaleza económica de la capital catalana.

El ayuntamiento “lidera esfuerzos significativos para mejorar la sostenibilidad de la ciudad” y para cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenibles (ODS) de la ONU. Además, ha incrementado su compromiso en este sentido para cumplir con “desafíos como la transición ecológica y digital”. Cuestiones que hace tiempo que se monitorizan y se tienen en cuenta, pero que son más urgentes que nunca en el mundo que ha dejado la pandemia de coronavirus.