Sánchez redobla su apuesta por Barcelona y ahonda la herida independentista
La cumbre hispanofrancesa ha vuelto a situar a la capital catalana en el mapa político internacional y ha provocado un nuevo desencuentro entre ERC y el sector más radical del secesionismo
20 enero, 2023 00:00"Es un homenaje de respeto, consideración y admiración a Barcelona". Así de tajante se mostró el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en la cumbre con el presidente de la República de Francia, Emmanuel Macron, al ser preguntado sobre su elección de la Ciudad Condal para la firma del Tratado de Amistad y Cooperación con el país vecino. Una cumbre que ha vuelto a situar a la capital catalana en el mapa político internacional y que ha ahondado la herida independentista con un nuevo desencuentro entre ERC y el sector más radical del independentismo, incluyendo a Junts per Catalunya (JxCat), la CUP y entidades secesionistas.
Frente a la debilidad del independentismo, con un president de la Generalitat cuyo papel ha sido irrelevante y que no ha contentado ni a propios ni a extraños, Sánchez ha exhibido liderazgo desembarcando en Barcelona flanqueado por diez ministros, volviendo a situar en el foco a la ciudad tras unos años de aislacionismo provocados, en buena parte, por el procés.
Aragonès, diana de los ataques
Un procés que tal vez no haya acabado del todo -- en contra de lo que dijo el ministro de la Presidencia, Felix Bolaños, en unas declaraciones que levantaron polvareda--, pero cuyos protagonistas atraviesan una crisis de credibilidad sin precedentes. Por un lado, Pere Aragonès dio la orden a ERC de boicotear la cumbre en la que él mismo ha participado con un papel testimonial. Una jugada que no le ha resultado, ya que ha sido diana de los ataques de los más radicales alentados por la Assemblea Nacional Catalana (ANC) y sus exsocios de Govern de Junts y la CUP.
Además, la comitiva del líder de los republicanos, Oriol Junqueras, cuyo objetivo era cumplir con los seguidores menos moderados de ERC y con las entidades, salió escaldada con un duro abucheo que les obligó a salir escoltados entre gritos de fora, botifler ("fuera, traidor") y "traidor, te queremos en prisión".
Xavier Trias, desaparecido
Por otro lado, la líder de JxCat, Laura Borràs, y su núcleo duro vertieron duras acusaciones contra el president rodeándose de partidarios del expresident fugado, Carles Puigdemont, quien a su vez elogió "el golpe de autoridad y firmeza" de los manifestantes. Así, tras varios meses desde su salida del Govern, la relación con los que fueron sus socios republicanos no ha hecho más que empeorar y el partido sigue escorándose hacia posiciones cada vez más radicales. Con la excepción de un Xavier Trias que excusó su presencia en la manifestación y que es muy consciente de que hay fotos que es mejor evitar a pocos meses de iniciarse su campaña electoral como alcaldable en Barcelona.
De este modo, la cumbre entre Sánchez y Macron ha evidenciado la falsa unidad independentista a la par que ha revalorizado la imagen de Barcelona a escala internacional.
Barcelona, deseo socialista
Por su parte, Sánchez es consciente de la importancia de la plaza de Barcelona para salir airoso de las elecciones municipales del próximo mayo. De hecho, es un secreto a voces que la Ciudad Condal, junto con Sevilla, es objeto de deseo socialista para coger impulso de cara a los comicios generales. Esto ha quedado patente con el desfile de ministros socialistas que han aterrizado en la capital catalana y con los constantes halagos de Sánchez hacia la ciudad durante su rueda de prensa, consciente de que el PSC se la juega ante los pronósticos de un triple empate con Ada Colau y Xavier Trias.
En este sentido, con un discurso que podríamos volver a escuchar durante la campaña de las elecciones, el mandatario ha sacado pecho de que ahora "la Constitución sí se cumple en Cataluña". Y ha lanzado un dardo al PP deslizando que los catalanes, "durante muchos años, y con razón, se han quejado de que el Gobierno no se ha comprometido ni en recursos, ni en colaboración, ni en su visibilidad internacional".
Por todo ello, ni los silbidos ni el plantón de Aragonès durante los himnos nacionales han nublado el cielo de una cita marcada en rojo en el calendario de los socialistas. Una cita que sella las buenas relaciones entre Sánchez y Macron y fractura aun más al independentismo a unos cuatro meses de ir a las urnas.