El 'cerebro' del Catalangate visitó a Puigdemont en Bélgica
Elies Campo, coautor del reportaje en 'The New Yorker' sobre el presunto espionaje a independentistas, departió con el 'expresident' huido en varias ocasiones
30 abril, 2022 15:18El ingeniero catalán en el centro de la polémica sobre presunto espionaje a independentistas con el programa informático Pegasus viajó en diversas ocasiones a Bruselas (Bélgica) para visitar al expresident huido de la justicia, Carles Puigdemont.
Elies Campo departió con el prófugo varias veces para, entre otros motivos, presentarle proyectos digitales, como una web de votación de cara aun eventual referéndum secesionista, según ha avanzado El Mundo.
Votaciones electrónicas y moneda digital
En efecto, Campo presentó a Puigdemont avances sobre software de votos digitales y de una moneda virtual, según figura en la documentación de la Guardia Civil, que trabaja para la Audiencia Nacional y un juzgado de Barcelona en investigaciones abiertas en ambas salas.
Concretamente, en las pesquisas sobre Tsunami Democràtic del tribunal especial, el instituto armado anotó "viajes frecuentes" de Campo a la capital europea para vender el proyecto Vocdoni de votación digital. Los desplazamientos comenzaron en 2019.
Coautor y presunta víctima
Campo es coautor del informe de The Citizen Lab sobre presunto espionaje a 63 personalidades del movimiento independentista. El ingeniero es autor y supuesto afectado, pues el nombre de sus padres figura entre las personas cuyos móviles habrían sido intervenidos.
Antes, el directivo fue uno de los primeros españoles en Silicon Valley, la región de California (Estados Unidos) que concentra a un gran número de empresas tecnológicas.
Otros 150 investigados
El independentismo redobla su ofensiva con las denuncias de presunto espionaje. The Citizen Lab está analizando ahora la infección de los teléfonos de otras 150 personas en "un segundo nivel de relevancia", ha avanzado El Confidencial.
Se trata de la segunda fase del estudio que compartió con The New Yorker y que elaboró con "organizaciones de la sociedad civil" nacionalista. En este segundo escalón de presuntos espiados se encontrarían periodistas, cooperadores y asesores de políticos y líderes secesionistas; o sea, personas con los que originariamente investigados habrían mantenido contactos.