El cerebro en la sombra del desafío jurídico de Torra
Xavier Uriós, director general de Asuntos Contenciosos, declaró como testigo en el juicio del 1-O y ahora mueve los hilos de estos servicios de la Generalitat
14 julio, 2020 00:00Los servicios jurídicos de la Generalitat están llamados a tener un papel esencial en la nueva ofensiva de Quim Torra contra el Estado. El encierro de la ciudad de Lleida y siete municipios más, que una juez considera ilegal, abre un conflicto de competencias que el presidente de la Generalitat, a las órdenes de la confrontación declarada por Carles Puigdemont, quiere exprimir con una finalidad claramente electoral.
Así, Torra ha puesto a trabajar a su gabinete jurídico, que oficialmente está dirigido por Francesc Esteve, hijo del expresidente de la Diputación de Barcelona Salvador Esteve, detenido por el desvío de subvenciones a fundaciones vinculadas a CDC.
"Es el que sabe de Derecho"
Pero, en realidad, quien mueve los hilos es Xavier Uriós (Lugo, 1966), el cerebro en la sombra del equipo jurídico del Govern, que desempeña el cargo de director general de Asuntos Contenciosos, determinante si, finalmente, la Generalitat impugna el rechazo de los jueces a sus resoluciones sobre el Covid por la vía contencioso-administrativa.
Si la experiencia jurídica de Esteve es corta, larga es en cambio la de Uriós, que “es quien realmente sabe de Derecho en ese departamento”, según explica un abogado conocedor de la estructura letrada del Ejecutivo catalán. Conocido como el Underwood de ese negociado, en alusión a la celebérrima serie de televisión House of Cards, este licenciado en Derecho ha tenido una fulgurante carrera en la administración gracias a su proximidad con UDC. Cuando Albert Raventós dirigía el gabinete jurídico de la Generalitat, Uriós fue nombrado subdirector de Servicios Consultivos. Ya con el primer Gobierno tripartito de Pasqual Maragall, Uriós se convirtió en la mano derecha del nuevo responsable de dicho departamento, Jaume Galofré, y de la segunda letrada en el escalafón, Meritxell Josa.
En aquella época, Mercedes Nieto, la mujer de Xavier Uriós, también formaba parte del cuerpo de abogados de la Generalitat, aunque asistió a la fundación de un nuevo partido, Ciudadanos. “Uriós había asistido a mítines de Cs cuando todavía era una plataforma y no se había constituido como partido”, explica el citado abogado. Es ahí cuando el letrado se revela como un camaleón político, capaz de adaptarse a los continuos cambios de gobierno y seguir ascendiendo en la jerarquía jurídica.
Tras convertirse en abogado jefe de la Consejería de Gobernación, Uriós se ganó la confianza de los dirigentes de ERC, pero cuando el tripartito tocó a su fin y CiU recuperó la presidencia de la Generalitat, se dejó ver en mítines de los nacionalistas. Así es como logró permanecer en el departamento de Gobernación, que pasó a estar dirigido por Meritxell Borràs, y estableció contacto con Francesc Esteve, que entonces era secretario general de esa consejería.
El convulso 'procés'
Cuando, en junio de 2017, Esteve fue nombrado director del gabinete jurídico, se llevó a Uriós como número dos y le nombró director general de Asuntos Contenciosos. La nueva etapa de los servicios jurídicos de la Generalitat estuvo marcada por el gran desafío contra el Estado, esto es, la aprobación de las leyes de ruptura y la organización del referéndum del 1-O, por el que Uriós presentó declaración como testigo en el juicio celebrado en el Tribunal Supremo. Fue interrogado sobre el papel de la Consejería de Gobernación, la adquisición de urnas y la cesión de locales para celebrar la consulta.
Los cambios continuaron y éstos afectaron a Xavier Uriós. La Dirección General de Administración Local, que siempre había dependido de Gobernación, pasó a depender de la Consejería de Presidencia, donde Uriós nombró a su mujer, Mercedes Nieto, abogada jefe. Además, el gabinete jurídico pasó a controlar la gestión de la supervisión de los contratos administrativos, asumiendo incluso la elaboración de las ponencias previas del Tribunal de Contratos.
De esta forma, el gabinete jurídico controla todos los contratos administrativos de la Generalitat, pero muy especialmente, todos los de los ayuntamientos y las diputaciones. El Jurado de Expropiación Forzosa también pasa de Gobernación a Presidencia. Así, cualquier pequeña o gran obra, cualquier contratación, queda controlada por Francesc Esteve y el gabinete jurídico. Pero eso ya es otra historia.