Gordó amañó pagos ilegales de empresarios para beneficiar a CDC

Germà Gordó vuelve a estar en el ojo del huracán para investigar el presunto pago de comisiones ilegales a CDC dentro del caso 3%. El que fue secretario de Govern de Artur Mas y consejero de Justicia tuvo una conversión muy comprometida con el empresario Joan Manuel Parra: "Cada vez que te presentes a alguna cosa, me vienes a ver y yo hablaré con el secretario general correspondiente, con e el departamento correspondiente".

La reunión se produjo, según Joan Manuel Parra, en la antigua sede de Convergència de la calle Còrsega. En el encuentro se habría hablado de un almuerzo anterior con David Madí, el que fuera mano derecha de Artur Mas y exsecretario de Comunicació del Govern, en el que hubo un compromiso de ayudarle a través de adjudicaciones de la Administración catalana, según publica El Periódico. 

¿Engaño?

Parra le insisté a Gordó en su compromiso si llegaban a la Generalitat: "Me vendisteis muy bien la moto de que realmente si llegábamos al Govern sería la hostia". El empresario también insiste al diputado de CDC que él le había enviado a Oriol Carbó, propietario de la empresa audiovisual Triacom --productora del programa El gran dictat, emitido por TV3--, para que fuera este quien le pagara unos servicios realizados al partido y que todavía le debía dinero.

La información publicada por El Periódico está en manos del juez del caso 3% que investiga presuntas comisiones a CDC a cambio de adjudicaciones y en el que Gordó ya está investigado. De la misma forma, el exconsejero habría asegurado que podría meter mano en el Institut Català de Finances por formar parte de su junta. 

Negación de Gordó

El exsecretario del Govern y exconseller de la Generalitat Germà Gordó ha asegurado a El Periódico no haber cometido ilegalidades, ni recuerda la conversación grabada, según la cual él se ofreció en 2011 a arreglar pagos ilegales a un empresario de CDC. A preguntas de este diario, el exconsejero se ha remitido al escrito que ha enviado al juzgado en el que afirma que no recuerda haber formado parte de un encuentro con la "composición descrita". 

El político abandonó el PDeCAT tras su imputación el caso 3%, aunque se negó a entregar el acta de diputado que obtuvo al ir en la lista de Junts pel Sí, por lo que quedó como diputado no-adscrito. Ahora impulsa su proyecto político propio, Convergents, con escaso éxito. Su última intentona se producrá el 18 de septiembre en Poblet, donde todo el catalanismo moderado plantará la semilla para un nuevo partido moderado de centro.